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(mismo día)

11:34 pm

No podía ver nada, todo estaba oscuro, sus ojos estaban muy hinchados de tanto llorar, su cama estaba sucia, el estaba sucio.

Apenas tenía 7 años, no podía comprender bien la situación en la que estaba pasando, solo podia llorar.

aveces, simples palabras te pueden dejar pensando para siempre.

"Siempre te cuidare"

"Siempre estaré para ti"

"Siempre te escucharé"

"Siempre confíaras en mí"

"Siempre contarás conmigo"

Porque su cuidador, siempre le repetía lo mismo y nunca lo cumplió? Todas esas frases que en algún momento nunca le había tomado importancia, ahora sonaban en su cabeza como moscas necesitaba oír esas palabras de nuevo, era una hermosa mentira, una linda mentira.

─ T-te necesito, p-papá... ── abrazo sus pequeñas piernas y empezó a llorar el ardor que sentía era mucho.

Quería que esa tortura acabará lo más rápido posible, su cuidador, su amado cuidador le había hecho daño después de haberle prometido jamás hacerlo, ¿cómo podría confiar en el después de aquel suceso?

"Es solo un juego"

" Un juego que estoy seguro que te va a encantar"

Que juego más asqueroso el que jugó, su padre, el Sol aún no venía a casa, o eso era lo que creía, vio una silueta acercándose a su cuarto, rápidamente tomo su cobija y se tapo rogando internamente que no fuera el que le había provocado todo ese daño.

─ Venus? ── menciono el Sol llamando a su hijo

─ Q-que paso? ── no podía contener su lágrimas

─ te encuentras bien?, por qué lloras? ── rápidamente se dió cuenta en el estado que se encontraba su hijo y decidió acercarse a el estuvo apunto de quitarle las sábanas que lo cubrían hasta que escucho un grito por parte de su mismo hijo.

─ N-no me t-toques! ── empezó a llorar más fuerte

─ Venus! Estás bien?! ── se asustó al ver a su hijo

El amigo del sol y cuidador de Venus fue muy astuto al limpiar el desastre que había hecho en la cama de Venus y al igual que con el.

Venus estaba "limpio" lo único que podía decir era que sentía dolor.

─ m-me d-duele mi c-cuerpo ── dió un susurro que el Sol había logrado escuchar

─ seguro te pegaste, Venus, no vas a llorar por eso ya vas a cumplir 8 años no jodas, tienes que aprender a ser fuerte, yo casi me mato llegando acá y no ando llorando, "deja de ser una como una niña pequeña" ── dijo seriamente ── si sigues llorando vas a ver que mañana tus amigos no van a venir, no es "chantaje es una advertencia", buenas noches.

Salió de la habitación de su hijo y cerró su puerta, Sol no era mal padre solo que aveces no podía soportar que Venus llorara por cosas demasiado "insignificantes", Venus no entendía nada, acaso su papá no haría nada al respecto?

Pero, que iba a hacer quería que sus dos amigos vengan mañana a su casa para poder jugar aún que estaba adolorido en todo el cuerpo.

10:26 am

Era la primera vez que Venus dormía tanto tiempo, lo único que le sorprendió fue que su papá no le haya reclamado para nada, hasta que escucho unas voces que provenían de su sala.

Decidió levantarse de su cama, aún me dolían las piernas pero no era comparado a lo de ayer, ahora sí podía caminar.

9:57 am

oh, Hola Júpiter! Hola tierra, que tal? ── Menciono el Sol dando a paso que Entren los dos antes mencionados

─ Hola sol, ambos nos encontramos bien ── entro a la casa de sol ── wow, aún me sigue sorprendiendo lo grande que es tu casa viviendo solo tu y Venus.

─ Si, muchos me dijieron que era mejor ponerlo en venta Pero prefiero que Venus tenga su privacidad y yo también claro, y por cierto, como está tu esposo?

─ Saturno? Ya quedan pocas semanas para el nacimiento de Luna, ── observo la hora en el reloj de mano que siempre llevaba puesto  ── ya me tengo que ir, no lo puedo dejar tanto tiempo solo, te encargo a tierra, bye!

Júpiter salió de la casa del sol dejando a su pequeña criatura en manos de su amigo de toda la vida.

─ Y bueno pequeñito, estás emocionado por el nacimiento de Luna? ── trato de entablar tema de conversación con tierra

─ quiero ver a Venus! ── apartó la cabeza, no quería responder la pregunta que hizo el Sol

─ ya va a bajar, espero.. siéntate ahí en lo que llega Marte y se despierta Venus ── apunto al gran sillón que tenía ──  si tocan la puerta la abres, les traeré galletas

Sol salió de la sala dejando a Tierra ahí solo, bueno, hasta que la puerta de la sala que daba para afuera se abrió derrepente, marte habia llegado.

─ tierraaaa! Pensé que estabas ya con Venus, dónde está el? ── pregunta Marte dirigiéndose a tierra.

─ creo que sigue durmiendo aún, siéntate Sol fue por galletas para nosotros ── menciono la tierra

─ okey... ── hizo caso a su amigo tierra

Tierra y Marte se encontraban hablando sobre lo que hacian en su vida diaria, esperando a que baje el pequeño venus, mientras tanto el Sol ya llegaba con las galletas, los dejo en la mesita que había por ahí, ambos amigos agarraron las galletas como si nunca hubieran comido en su vida mientras tanto el Sol miraba la escena que era muy tierna para el le encantaba los niños pequeños definitivamente Pero no era tan bueno para cuidarlos, minutos después un pequeño niño bajaba las escaleras de su casa encontrándose cara a cara con su dos amigos, el mayor de el trio de amigos decidio salir de ahí para darles su privacidad.

─ Venus!!!! Ya te estábamos esperando, si que te volviste un dormilón ── menciono la tierra

─ sii.. eeh... Quieren jugar? ── una sonrisa forzada salió de su cara

─ te encuentras bien?, pareces desanimado, pasó algo?

Venus no sabía que responder, no sabía que decir, no sabía cómo reaccionar, acaso ese hombre lo había dejado sin emociones?

No sabía.

Se empezado a sentir mareado, todo daba vueltas.

Su cabeza dolía, todo su cuerpo.

Lo único que podía ver y escuchar era a sus amigos gritando por ayuda y Marte diciendo "no te mueras, si no con quién me casare!!" Y todo se había vuelto oscuro.

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⏰ Última actualización: Jun 10 ⏰

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