𝙞𝙣𝙩𝙧𝙤𝙙𝙪𝙘𝙩𝙞𝙤𝙣

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En una noche nació una niña de una familia bastante reconocida entre los hechiceros estaban tan felices por el nacimiento de una nueva integrante pero esa felicidad se vio derrumbada al pasar del tiempo, la pequeña bebé presento una muy mala salud...

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En una noche nació una niña de una familia bastante reconocida entre los hechiceros estaban tan felices por el nacimiento de una nueva integrante pero esa felicidad se vio derrumbada al pasar del tiempo, la pequeña bebé presento una muy mala salud era tan frágil como el cristal y eso no era todo ellos sabían algo sabían que eso no era normal y lo descubrían.

La niña creció con un cuerpo muy débil y delicado al tanto tiempo de buscar una explicación la familia encontró el porqué se debía eso y era nada más y nada menos que una maldición no cualquier maldición una en especial era un tormento para su familia los perseguía buscando venganza y al encontrar a la niña la tomó en sus garras e impuso en ella toda su desgracia condenándola a tener una horrible salud.

La familia no se quedó de brazos cruzados y pondrían cartas en la mesa, no le importaba si eso los pusiera en la mira que los altos mandos ellos no dejarían de lado a su pequeña y nueva integrante la salvarían cueste lo que cueste.










                              𝘜𝘯 𝘥í𝘢 𝘴𝘰𝘭𝘦𝘢𝘥𝘰
Se encontraba una bella mujer caminando entre los enormes pasillos de una casa .
El día estaba perfecto para dar un pequeño recorrido y estaba en busca de su pequeña acompañante, su hija menor su única hija.

Al entrar en una habitación se encontraba una niña de la edad de unos 11 años acostada en su cama con los antebrazos vendados, al ver a esa bella mujer se alegró tanto que quería pararse a abrazar a su querida madre pero no podía no le permitieron pararse hasta el día siguiente debido a sus resientes heridas.

__: mamá, me alegro mucho de verte te ves tan bonita como siempre. - le sonrió de la forma más amable que podía-

Keiko: mi pequeña hija, ¿como te encuentras? Te sientes mejor? Escuché que te lastimaste. -Dijo en un tono bastante preocupado-

__: estoy bien mamá realmente son muy exagerados no fue para tanto

La niña alzó los brazos mostrando las vendas, su madre no tan convencida de la declaración de su hija no quiso insistir más y se adentró más a la habitación dirigiéndose a la cama de la niña y en seguida se sentó de lado de esta.

Su madre acarició la frente de su hija depositando cariñosamente un pequeño beso.

Keiko: nadie es dramático __, todos estamos preocupados por tu salud deberías de ser más comprensible.

Regaño la mayor, la niña solo se arrepintió de sus palabras era verdad lo que decía su madre ellos solo están preocupados había minimizó sus sentimientos se sintió terrible antes de que siguiera pensando más su madre la paró ya que se dio cuenta por la expresión que había hecho su hija.

Keiko: ya no te preocupes hijita, solo se más comprensiva y ten mucho cuidado .

__: si, tendré cuidado -dijo en un tono triste-

Su madre solto un suspiro recordando el porqué fue el principal motivo de su visita.

Keiko: ya ya, hijita ven acompáñame a dar un pequeño paseo el clima está muy agradable hoy.

Soltó tratando de animar a su pequeña hija la cual se le seguía notando triste.

__: paseo? No puedo salir de la cama me dijeron que podría hasta mañana.

Keiko: vamos hijita no te va a pasar nada soy tu madre jamás dejaría que te pasara nada malo.

Dijo su madre en tono de alegría pero se escuchaba completamente a una verdad.

__: está bien mami, solo que no se entere la señora gen o me va a regañar.

Ambas se rieron por el comentario de la menor la cual poco a poco se fue levantando de su cama mostrando el lindo kimono que traía puesto.

Keiko: waaaa mi hija es tan linda cada día creces más bonita, saliste igualita a tu padre~

__: también a ti mami tú eres muy bonita cuando cresta más quiero ser igual de linda que tú.

La mayor solo sintió mucha nostalgia ante las lindas palabras de su única hija, le dio un abrazo largo tratando de no lastimarla, al final de todo su hija era muy delicada.

Keiko: vamos hijita te pondré un poco de bloqueador solar.

Su hija solo asistió con la cabeza y dejó que su madre le pusiera bloqueador mientras se reían de chistes que se contaban.
Salieron de la habitación recorriendo la enorme casa de la cual le pertenecía a su familia.

__: mami porque nunca me cuentas sobre el trabajo familiar ¿yo podré trabajar en el? -dijo la niña muy emocionada ante la idea-

Su madre soltó la pequeña manita de su hija la vio de una forma extraña y rápidamente le dijo.

Keiko: tú no tendrás que trabajar mi niña para eso está tu mamá yo te mantendré hasta que estés más viejita que yo.

Dijo tratando de alivianar la declaración que nunca trabajara como toda la familia, la niña rio por alguna extraña razón no quiso pregunta más ver la cara de su mamá no le gustó es más le dio un escalofrío.

El paseo siguió de forma normal y tranquila hablaban y reían, se notaba el amor de madre e hija a kilómetros.

Hasta que llegó la tarde la niña tenía que comer y descansar su madre la fue a dejar a su habitación para que la señora gen le diera sus respectivos alimentos y se fuera a descansar.

Se fue caminado por los mismos pasillos de los que entró y no podía sacarse de la cabeza esa pregunta de su hija "¿yo podré trabajar en el ?" ¿Su hija quería eso? Pero no podía su cuerpo no se lo permitiría al ser tan débil con un golpe moriría ¿le tendría que contar sobre lo que su familia hace ? Es más ella no sabía si su hija podría ver a las maldición ya que en su hogar no podían entrar por la barrera que tenían.

Al final del pasillo pudo ver a su hermana la cual tenía una cara sería, eso no era normal en su hermana.

Airi: encontramos algo

Keiko se asombró y puso una cara seria al saber de qué se trataba

Keiko: que encontraron ¿alguna explicación?

Airi: si, ya sabemos el por qué de su salud

Se sorprendió a más no poder solo tuvo un pequeño paseo con su hija ese día lo que en 11 años no habían encontrado nada hoy lo encontraron, dio dos pasos hacia atrás de la impresión perdiendo la fuerza de sus piernas cayendo de rodillas.

Keiko: qué alivio - dijo en un hilo de voz soltando lágrimas de alivio-

Ya sabían el porqué de la salud de su hija ahora solo faltaba buscar una solución.

Eso es todo, espero sea de su si agrado ya que el siguiente capítulo inicia todo ☝🏻

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Eso es todo, espero sea de su si agrado ya que el siguiente capítulo inicia todo ☝🏻

Chaito

𝐈𝐧𝐞𝐫𝐜𝐢𝐚 -jjk Where stories live. Discover now