Idol (TwcNr)

Quince

Tom entraba al hotel con la bandeja del desayuno, había salido temprano a distraerse un poco, no había dormido nada por la actitud de Bill y decidió pasar por un buen desayuno para sus gemelos, venía confirmando que tuviera nuevos mensajes encontrando solo los de Sarah, guardo su teléfono después contestaría los mensajes, pero los gritos y el sollozo de Axel lo hizo apurarse hacia la recepción donde su hijo discutía con el empleado.

-¿qué pasó?- preguntó, pero Axel solo corrió hacia el ascensor

-¿qué tiene tu hermano Nick?- ahora el greñudo se dirige a su otro hijo.

-es que el trenzudo ese, se fue y no le avisó a Axel y él cree que solo quería...

-¿Quería qué?... Dios no me digas que tu hermano...

-mejor habla con el Pa.

-¿pero cuándo? Si ayer estuvimos juntos todos.

-cuando estás con Bill, solo tienes ojos para él, Papá

Tom tragó su nudo, si era así fue muy irresponsable y se sentía culpable, por eso, subió y cuando entro a la habitación encontró a Axel metido en la cama y con los sollozos más fuertes, se sentó a su lado y le acaricio su espalda.

-¿qué sucede mi niño?

-tenía que haberte obedecido pa, nunca tuve que acercarme a ese estúpido.

-¿Qué te hizo? Como te haya tocado un pelo le cortó los huevos.

-yo quería pa, pero él solo quería de mí eso y cuando lo obtuvo se fue como un cobarde.

-rayos Axel cuantas veces te dije que no te quedaras a solas con él.

-yo lo quiero papá y pensé que él a mí también, pero solo se aprovechó de mí y que soy un estúpido mocoso.

-Tú no eres ningún estúpido mocoso Mi niño, aquí el idiota es él, mírate Axel vales mucho y él solo seguirá con su vida vacía, mientras que tú te enamorarás de otro chico mucho más guapo e interesante.

-Gracias pa, pero me quiero ir a Chicago, ¿podemos irnos?- ruega con sus ojos vidriosos.

-claro que podemos, vamos Nick -

Tom sale con su hijo mayor y toma un trago doble de whisky.

-lo mató, cuando lo vea le arranco las trenzas esas una por una... maldito imbécil-

-¿y Bill... te dijo que se iban ayer?

-claro que no, él no me lo dijo-

-¡Llama a mamá Nick!- pide el pequeño desde la habitación

-ves con tu hermano mientras yo adelanto nuestro vuelo a Chicago.

Hundidos en una gran tristeza abordaron el vuelo de regreso a casa, Heidi aguardaba en la sala de espera cuando cruzaron las puertas Axel se refugió en sus brazos a desahogar su herido corazón le era imposible mirar a su padre a los ojos, se sentía un estúpido por confiar más en un músico playboy y no hacerle caso a su progenitor.

Sus vidas continuaron como si nunca hubieran conocido a esos chicos o al menos el greñudo hacía lo posible por aparentar que no le había dolido y que lo había tomado como un acoston más.

Las clases de los gemelos comenzaron y como de costumbre Axel se arreglaba el cabello en el baño, sintió cuando algunos compañeros entraron riendo y jugando entre ellos.

-pero mira a quien tenemos aquí, al noviecito de Kaulitz... ¿Que le diste para tenerlo así de loco por ti?- expresó Adam.

-yo creo que lo que le dio lo tiene muy bien ocultó- decía otro que ni siquiera Axel conocía.

-quiero ver... quiero probar, debes de estar delicioso, así como tu carita de niña... ¡Chicos agárrenlo! Ordenó.

Los chicos hicieron lo que pidió Adam y hábilmente lo tenía ya contra el suelo sujetando sus manos y pies, Adam se coló entre sus piernas para quitar el cinturón, mientras que Axel gritaba pidiendo ayuda y su salvación llegó, Nick de una patada voló la puerta del baño entrando y tomando Adam para reventar su rostro con puños que con rabia le propinaba, los demás chicos con lo cobarde que eran salieron del baño dejando a Axel medio desnudo tirado en el piso, se levantó y coloco su mano en el hombro de su gemelo y fue allí que lo soltó, Adam se hizo ovillo por el dolor, pero Nick lo tomó del cabello.

-como te atrevas tan siquiera mirar a Axel, la paliza será el doble, y espero que no vayas donde el director a dar quejas como la nena que eres, imbécil.-

Lo suelta del cabello y toma a Axel para salir de allí, marcan a Heidi para decirle que ellos llegaran a casa más tarde y que no tiene que venir por ellos.

-¿qué dijo mama?-

-que lleguemos pronto... ¿A dónde vamos Axel?

-Caminemos, pero Nick no quiero que nadie se entere, por favor hermano no le digas a nuestros padres.

-no lo haré, pero si siguen molestando por ser novio o exnovio del trenzudo ese, hablaré con ellos, ¿de acuerdo?-

Axel asiente y toman rumbo a su casa, hablando entre ellos y apoyándose mutuamente.

Lo primero que hizo el pequeño fue subir a su habitación, entró al baño y se dio una larga ducha se sentía sucio y asqueado, Nick tocó la puerta y éste abrió paso por su lado y sentó en su cama miro por la ventana a la luna que brillaba en el cielo y recordó cuando se entregó a su Tom esa tarde en aquel yate, sus mejillas se mojaron por las lágrimas que corrían por ellas y aunque siempre le decían que no fue su culpa algo en su interior decía que si lo era, su hermano lo abrazó y éste apoyó su cabeza en su hombro agradecía que su gemelo estaba allí para apoyarlo.