Capitulo 7

8 2 0
                                    

Cuando desperte note que estaba sobre algo calido y suave. Abri los ojos centrandome en la habitacion que no conocia. Podia ver algo, gracias a la luz de la luna que entraba por el amplio ventanal. 

Algo o mas bien alguien tiro de mí cintura hacia atras acercandome a el. 

Levante poco a poco las sabanas para mirar, un brazo rodeaba mi cintura con posesividad, me sorprendi tanto que tuve que tapar la boca con la mano. 

Me gire, para ver quien era, y me encontre al hombre de ayer, el que antes era un lobo. Todo lo que sucedio volvio a pasar por mi mente recordando lo que paso. 

Con sumo cuidado me deslice para salir de su abrazo y de la cama, poniendo una almohada donde antes estaba yo, el parecio no notarlo. 

Salí rapidamente y silenciosamente de la habitacion, no tenia tiempo que perder, aprovecharia la oscuridad de la noche para huir de aqui lo mas lejos posible. Camine a hurtadillas por el pasillo hasta dar con unas amplias escaleras.

Baje las escaleras de puntillas para que no crujiera la madera, cuando ya tenia la mano en el pomo de la puerta, una mano se poso sobre la mia, asustandome, y otra mano al otro lado de mi cabeza acorralandome contra la puerta. 

Me hizo girar y me encontre con el hombre que habia dejado momentos antes en la habitacion. 

-Buena mañana y ya te intentas escapar?-dijo. 

-Quiero ir a mi casa...- susurre bajando la cabeza. 

-Esta es tu casa ahora y te prohibo salir. 

-No, mi casa es...

-Es esta y no hay nada mas que decir- dijo tortalmente serio. 

Me cogio del brazo y  me hizo caminar otra vez hasta la habitacion donde me habia despertado.

-Eres mia, mi mate.

-Yo solo me quiero ir a casa.-dije llorando. 

-¿Acaso no entiendes? esta es tu casa, cuanto antes lo entiendas mejor te ira.  

Trague saliva.

-Es hora de dormir- me tumbo en la cama que hace unos minutos habia dejado. 

Cerro la puerta con llave, la cual guardo en un cajon alto. Se dirigio a la cama. Segun el se tumbo yo me levante. Me miro frunciendo el ceño, enfadado. Yo simplemente le di la espalda.

-Ven a la cama. 

-No puedo dormir contigo, es totalmente indecente-lo ultimo lo dije algo mas fuerte. 

-Eres mia, haz lo que te ordeno y ven-ordeno casi a gritos. 

-Deja de repetir que soy tuya, no lo...- no acabe la frase ya que el hombre jalo de mi brazo de forma seca, hasta que mi pecho choco contra el suyo. Su otra mano rodeo mi cintura. 

Mire de reojo hacia la puerta de madera que habia cerrado con llave hacia unos minutos ¿Seria capaz de llegar hasta ella y escapar? Aunque claramente era impoible. 

-¿Planeas escaparte nuevamente? Que valiente... e ingenua si piensas en conseguirlo. 

Decidida, lo empuje con todas las fuerzas que pude reunir en ese momento, intentando en vano tirarle el suelo y apartarlo. Sus pies no se movieron un milimetro de su lugar, y yo aun asi corri hasta la bloqueada salida. 

Llegue a tocar la puerta de madera con las palmas de mis manos cuando una fuerza me giro bruscamente e hizo que chocara mi espalda contra ella.

El hombre me miraba con una mezcla de ira, con una mano me agarro las muñecas sobre la cabeza, yo empece a forcejear, y con la otra mano me arranco la ropa de golpe, dejandome totalmente desnuda. 

-Te hare mia, tan fuerte que no podras caminar y tendras que usar una silla de rueda por varias semanas. 

Me arroja encima de la cama, y antes de que yo pueda hacer cualquier movimiento, el ya esta aplastandome de nuevo. Senti algo duro presionarse en mi vientre bajo-.quedate quieta-ordeno fimemente.- 

Me beso para amortiguar mi grito.

-Tranquila, que hoy no sera el dia que pierdas tu virginidad, aun no es el momento, pero ten en cuenta que yo sere el primer y ultimo hombre en la cama, me vas a pertenecer. Como otro hombre te toque lo matare y tu tendras tu merecido castigo.

Yo no podia emitir ninguna palabra me habia dejado rota, solo podia llorar. 

-Eres mia, y de nadie mas- dijo apoyando su frente en la mia. 

Yo no podia emitir ninguna sola palabra me habia dejado rota, solo podia llorar. 

Sorprendemente beso mis mejillas las cuales estaban humedecidas por mis lagrimas. Me solto las muñecas, me las sobe y me tape la cara. Me encogi en la cama haciendome bolita. 

Note como me agarro para que me pusiera bien y me abrazo por la espalda, colocando su brazo sobre mi y entrelazo las piernas con las mias. 

-Duerme. Buenas noches- dijo dejando un beso en mi hombro y se puso a dormir. 

No pare de llorar, un hombre que no conozco, que me tiene secuestrada y se puede convertir en lobo, me acaba de tocar. 

En estos momentos solo queria no haber nacido, este dolor no se lo deseaba a nadie. 

Me puse a remomar lo que habia dicho la palabre "mate". ¿Eso que significaba? ¿Ramera, pero para hombre lobo?

Decidi que no queria saber lo que significaba, no queria sufrir mas, el dolor de mi pecho era demasiado grande en estos momentos. 

Poco a poco, mis lágrimas pararon de salir, estaba seca por dentro y seguramente con la cara roja e hinchada. Intente separarme un poco de el, pero sus brazos me agarraron mas fuertes e emitio un suave gruñido, advirtiendome de que no me moviera. Mis parpados se cerraron, hasta que acabe dormida. 




¡Huye!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora