Besos bañados de sal

Cap 15

-No decías eso anoche. - y esa respuesta bastó para que Buck se pusiera rojo hasta el cuello

"Después de eso, Buck mandó a Eddie a ponerse ropa. No soportaba verlo así, aunque bueno, podría soportarlo, pero no lo diría en voz alta. Ambos ahora estaban sentados frente a frente con la mesa de la cocina dividiéndolos, mientras Eddie masticaba lentamente su desayuno y Buck lo observaba seriamente con las manos descansando sobre la mesa.

-Cuentame:-Dijo buck cuando eddie termino de comer.

-"Yo también necesito besos para aprender tu idioma", susurró contra los labios de Eddie antes de besarlos.

-¡Para! - exclamó el rubio, sonrojado y sintiéndose avergonzado por su actitud.

-Pero apenas estoy comenzando. - dijo Eddie, desconcertado por la bipolaridad de Buck.

Buck se aclaró la garganta y se recompuso. - Está bien, continúa.

No fue como la primera vez; este beso era diferente, más intenso; algo en ese beso no era como los demás.  Los corazones latían al unísono, disfrutando de cada contacto y cada roce

No podia evitar sentirse atraido al rubio que lo habia salvado de morir en esa playa. 

Se besaron apasionadamente, disfrutando de la cercanía del otro, jugando con sus lenguas entre jadeos y rostros sonrojados.

Eddie lo sabia, estaba perdido, habia caido por completo.

Yo... lo siento, no quise", dijo Buck, tratando de levantarse, pero fue detenido por la mano firme de Eddie en su muñeca.

En sus más de cien años de experiencia habia aprendido una cosa: "Los humanos no viven más de cien años"

El tritón no permitió que se levantara jalandolo hacia el para abrazarlo con fuerza, no podia dejarlo ir, no ahora que entendia que no eran los besos del rubio los que le daban piernas, ni el chocolate su obcesión. 

No ahora que se daba cuenta porque le habia mentido a ese humano solo para poder besarlo, una y otra vez porque habia algo en esos labios que habia esperado por mas de noventa años.

 Buck respondió con la misma intensidad, atrayendo a Eddie hacia sí con determinación. Sus manos se entrelazaron con suavidad, como si intentaran comunicarse a través del tacto lo que las palabras no podían expresar.

La respiración entre sus labios entrelazados se hizo más profunda, compartiendo un momento íntimo que hablaba de complicidad y conexión.

 Despues de eso el rubio, tomo otra botella del six pack de cervezas que tenia a la mano, y no dudo beber una de un trago.

-No quiero dejarte ir.-Confeso el rubio abrazando a eddie, descansando su cabeza entre el cuello y la clavicula de este.

-Creo que me gusta, me gusta un hombre..-el rubio solto una risa.-un hombre pez.-

-Espera! - detuvo abruptamente la historia Buck, con un sonrojo creciente en su rostro. - Estaba bajo los efectos del alcohol, no sabía lo que decía.

Eddie, quien contaba todo con gran detalle, sonrió negando.

-Dicen que los borrachos y los niños siempre dicen la verdad. - se burló Eddie, pero Buck lo negó.

-No sé quién te lo dijo, pero es mentira.

-Los borrachos siempre dicen la verdad... y los niños. - sollozó el rubio. 

Era su cuarta cerveza y seguía abrazado al cuello del tritón. Hacía rato que sentía calor a pesar de estar metido en la bañera. Se quitó la camiseta y la arrojó a cualquier parte del baño. Eddie solo se limitaba a asentir; aún no podía mencionar ninguna palabra, pero podía escucharlo y entenderlo perfectamente.