♡Mundos Paralelos♡

~Reencuentro~

Habían pasado casi 1 mes desde la batalla con aquel Oni, había tenido varias batallas, Hakudoshi había decidido irse desde el día 1 y lo necesitaba, ¡por un demonio que si!, tal vez el sabía algo sobre los híbridos.
Si sabía, era un mitad bestia, de madre humana y padre demonio.., pero... ¿desde cuando?
Su madre murió cuando el era un niño y a su padre nunca lo conoció..... de ninguna manera el era un híbrido...

— ¡Mierda! —chasqueo la lengua molesto.

Porque esto estaba pasando.... el hace 3 meses, estaba en su casa... en su mundo.... en su época, casi ni recordaba los rostros de los demás.... Aome, Deku, Bakugo.. y hakudoshi, que probablemente todo esto sea su culpa, debe haber alguna explicación, algo que ese tonto no les dijo, cada vez que intentaba acercarsele a alguien, salían hullendo y ¿porque demonios tenía orejas?, que paso con los demás, estaba seguro de que no estaban muertos o al menos eso esperaba......

Divagando en sus pensamientos no se dio cuenta que se había alejado de su "punto de encuentro", ¡si!, aun no conocía el maldito lugar, se ha estado pasando estos días buscando a los demás pero nada de ellos, ni un rastro ni nada, lo único que tiene es la pañoleta que Aome lleva en el cuello de su uniforme, la encontró en unas aguas termales, o al menos espera que sea la de ella.

— ¡Ahora como demonios regreso! —dijo arrecostandose al pie de un árbol que le resultaba muy agradable.

Al parecer, cerca de ahí había una aldea ya que el olor a comida, madera nueva y humo llegaba a sus narices, hasta eso, tenía los 5 sentidos al máximo.

Por otro lado.
Me encontraba entrenando con Luxk, era mi última semana de entrenamiento, ya que me dijo que luego de eso se iría.
Ya había pasado casi un mes, tenía más fuerza y lograba esquivar y hasta herir a luxk, algo que antes era casi imposible.

Me movía bien y mis poderes espirituales dieron un vuelco, había desarrollado mucho mi agilidad con el arco y según luxk esa era la mejor opción.

— ¡Vamos! —me en señal de ataque.

— ¡Claro! —grite orgullosa al ver mi progreso.

Salte sobre el rodeandole el cuello con ambas piernas, mi uniforme estaba rasguñado, limpio pero desgastado a un punto de quedar casi transparente..

— ¡Buen intento! —dijo antes de derribarme en el suelo.

Siempre lo hacía.

— ¡Oye! —Le dije molesta.

Alza su mano — Como en el inicio —sonrió.

Un momento..... ¡¿Sonrió?!, ¿Luxk?, ¡no puede ser!

Me quedé atónita mirandolo,, jamás pensé verlo sonreír, siempre fue tan.... serio..

— Vamos, ¿te quedaras en el suelo?

— ¡S-si ya voy! —agarre su mano aun dudosa y me levante.

— Bueno yo...me voy —se dio la vuelta pero agarre su mano.

— Espera, ¡no te vallas!

— Tengo que irme......y tu también deberías irte, Aome, es tarde.

— Si, tienes razón.. —solté su mano.

— Nos vemos mañana —me dio la espalda y lentamente se fue alejando, a paso pausado, con su rostro tan neutro....que jamas adivinaré que piensa...

Suspiré — Hoy si que me tomo tarde ¿no? —emprendí mi camino hacia donde nos estábamos quedando, por suerte en una aldea cercana nos habían prestado una cabaña.

Caminando.... pensando en todo lo que me ha pasado, entre aquella oscuridad casi palpable llego un momento en el que no sabía en qué dirección estaba..... no me había perdido, solo estaba tan adentro en lo que pensaba que no calculé hacia donde caminaba.