Katherine O'Ward Junco, amiga desde hace años de Sergio Michael Perez, conocido como Checo, compartió una estrecha amistad que evolucionó en algo más cuando decidieron embarcarse juntos en la búsqueda de sus sueños. cuando Checo se preparaba para p...
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𝘊𝘩𝘦𝘤𝘰 𝘗𝘦́𝘳𝘦𝘻, 26 𝘥𝘦 𝘌𝘯𝘦𝘳𝘰-𝘎P𝘔𝘪𝘢𝘮𝘪
Aún me acuerdo de esa mañana en Miami, el día de mi cumpleaños y el GP. Estaba emocionado, seguro de que sería una carrera fantástica. Me levanté en el hotel con Carola y nuestro hijo, Sergio Jr. Al llegar al circuito con Max, noté que estaba más cercano a mí, como en los viejos tiempos.
—Oye, pase lo que pase, en verdad perdóname. Sabes que estaré para ti,—dijo Max, su tono serio. No sabía a qué se refería, así que bromeé para aligerar el ambiente. —Ora, ¿qué te traes, güero? ¿A poco ya dejaste a Kelly? ¿Vamos a revivir el 'Chestappen' o qué?.
—No, solo quería darte mi apoyo en lo que sea, y lo sabes.—Max se rió, pero su mirada seguía siendo preocupada.
Asentí y le di una palmada amistosa en la espalda. Al llegar al paddock, vi a lo lejos a Maya con Katherine. Era su cumpleaños también, y me parecía una coincidencia increíble. Aunque sabía que Katherine estaba comprometida con Carlos, me sentía tranquilo porque Maya no era mi hija. No podría perdonarle a Katherine haber ocultado algo así, y me sentiría como un idiota por no haberlo notado.
Max, siempre el bromista, trató de animarme. —Ey, tranquilo, te traigo pastel, pero poco, no queremos que vomites en el monoplaza durante la carrera.— Nos reímos juntos, y en ese momento escuché la risita de Maya y su voz llamándome "papá, papá". Me volví, pensando que quizá se dirigía a mí, pero ahí estaba Carlos detrás de mí, corriendo hacia Maya para abrazarla.
Fue un momento agridulce. Ver la felicidad de Maya con Carlos me recordó todo lo que había pasado y lo que podría haber sido. Traté de concentrarme en la carrera y en disfrutar el día con mi familia, pero había una sombra que no podía ignorar
