𝐌𝐈 𝐀𝐌𝐎𝐑

𝐃𝐈𝐄𝐙

                       📍𝐄𝐥  𝐏𝐨b𝐥𝐚𝐝𝐨, 𝐌𝐞𝐝𝐞𝐥𝐥𝐢𝐧

Habíamos llegado al apartamento de Stiven, él me ayudó a bajar las maletas y yo estaba súper confundida porque se supone que yo iba a quedarme en la casa de mi mamá pero pues tengo que esperar a ver lo que él me tiene que decir.

Mmm Stiven -le dije-

Dime mi Salo -respondió-

Por qué estamos bajando las maletas? -pregunté-

Ah cómo así,  yo no le dije? -dice-

Decirme que? -respondí-

Que ud hoy se queda conmigo -me dice-

Ay, de verdad? -digo-

Pues claro, no ve que ud me hizo mucha falta -respondió-

Ah si? -dije-

Jm ni se imagina cuanto -dijo-

Pero no se me preocupe que no vamos a hacer nada  malo, a menos que ud quiera -ríe- solo vamos a comer, ver una película o ahí miramos que hacer, y en la madrugada nos vamos a ver el amanecer en la terraza -dice-

Ayy si que lindo, me gusta -digo-

Bueno, entonces bien pueda pase que esta será su casa también de ahora en adelante, te puedes cambiar en mi pieza si quieres estar más cómoda -propuso-

Hágale pues -dije-

Pasar una noche entera en la casa de Stiven, un sueño para muchas una realidad para mi. Honestamente no me preocupaba nada solo estaba totalmente dispuesta a pasarla bien, a dejar que la noche fluyera como tenía que ser y esperar a ver que pasaba.

Entre a la habitación de Stiven, que como suponía era bastante grande y tenía su esencia en cada rincón, saqué de mi maleta una sudadera negra junto a un buzo del mismo color y unos zapatos Adidas blancos. Al llegar nuevamente a la sala de la casa me encontré Stiven organizando una especie de picnic en su terraza, se veía tan tierno fijándose en cada detalle y buscando que se viera perfecto.

Que estás haciendo? -reí cuando vi su cara de frustración-

Es que no ves que no me cuadra esa botella ahí -respondió poniendo ambas manos en su cadera-

-reí- no importa así se ve perfecto

Él me miró y se los juro que me dio LA mirada, sentí tantas cosas cuando conecté sus ojos con los míos y él decidió cortar tanta tensión con un abrazo del cual si pudiera no me iría jamás.

Ya estás lista?  -preguntó-

Sip -dije-

Bien pueda y se sienta mi amor -dijo y yo por supuesto le hice caso-

Y así se pasó la noche entre risas, miradas abrazos, alcohol y comida, era algo tan simple pero que me llenaba tanto. Ese momento lo capturé en mi memoria para siempre.

Cuando ya dieron las 5am el cielo estaba comenzando a dar luz y en medio de tanta risa las copas de licor se nos fueron pasando por lo que ambos estábamos fuera de nuestros cinco sentidos.

Salo -me habla Stiven-

Dime -respondí-

Que fue lo que ud me hizo? -pregunta-

Como así? -dije confundida-

Es que yo no dejo de pensar en ud todo el día, yo me muero por ud -dice-

Yo me quedé en silencio tratando de asimilar y digerir lo que había acabado de escuchar.

Pues si ud quiere que yo le sea totalmente sincera -dije- ud a mi también me encanta y es algo que no puedo evitar

Ah si? -preguntó-

Pues claro -dije-

Ah no eso es todo mi amor -dijo mientras me miraba a los ojos y de vez en cuando se le desviaba la mirada a mis labios-

Que estás esperando? -pregunté-

Yo nada -dijo para luego hacer lo que tanto ustedes como yo habíamos estado esperando tanto tiempo, ME BESÓ, si niñas esto está pasando, no sé si sea por todo lo que tomamos o porque de verdad él lo quería, pero lo está haciendo y a mi me empezaron a pasar muchas cosas.