Marca de una noche

capítulo 10

Capítulo 10: Cortador de galletas

Academia de baliza

El día siguiente…

Jaune y Yang volvieron a hablar.

Se suponía que eso era algo bueno.

Hablaron, pero se sintió… incómodo, a falta de un término mejor.

Si Blake no supiera nada mejor, diría que los dos estaban discutiendo sobre un tema realmente importante.

Como gustarse el uno al otro.

Las señales estaban ahí por lo que ella podía ver. Contacto visual incómodo, nerviosismo en proximidad cercana y mirada fija cuando el otro no estaba mirando, solo por nombrar algunas señales.

Fue algo que obtuvo de los libros que leyó. Deseaba que todos dejaran de llamarlo obscenidad. Era literatura artística; ¿Cómo es que Remnant ninguno de ellos entendió eso?

Volviendo al buen camino, eso es lo que podía interpretar de todos los libros que había leído. Sabía que era una mala costumbre utilizar los libros como guía para la vida real. La niña Fauno creía firmemente en los hechos y la realidad. Así la habían entrenado en el Colmillo Blanco.

Sin embargo, todavía leía ficción.

Ella deseaba un mundo mejor, como los escritos en los cuentos de hadas.

Ella deseaba su propia felicidad.

¿Mucho hipócrita?

Eso no fue todo.

Sin embargo, lo que eso también significaba era que confiaba en cosas que se habían decidido en la mente de alguien porque carecía de la experiencia sobre la que estaba leyendo.

Entonces, si ni siquiera sabía cómo manejar los eventos de su propia vida con certeza, atenuados por sus experiencias, ¿quién era ella para juzgar a Yang y Jaune? ¿Quién era ella para meterse en sus asuntos? ¿Quién era ella para decirles qué hacer?

Blake quería decir que estaba haciendo esto para asegurarse de que no pasara nada malo entre las dos rubias. Conociéndolos, había múltiples maneras en que las cosas podían salir mal. Eran un marcado contraste, lo suficiente como para desconcertar a la chica Fauno cómo Yang no había llevado a Jaune a la sala de emergencias o cómo Jaune no había hecho que Yang cayera muerto de aburrimiento.

Yang era extrovertido, Jaune era incómodo. Yang era un emprendedor, Jaune se mostraba cauteloso. Yang era animado, Jaune era peculiar. La lista de diferencias podría continuar, pero nadie la necesita. Parecía sencillo.

Jaune y Yang no iban a funcionar.

Por otra parte, Blake también era lo opuesto a Yang.

Una vez más, hipócrita.

Blake no quería seguir tanteando. Ella quería descubrir la verdad.

Por eso inicialmente se unió a Pyrrha, pero ver las sutilezas de la relación de las dos rubias hizo que la chica Fauno reconsiderara exactamente lo que estaba haciendo. Ella todavía quería saber qué estaba pasando entre ellos, pero ahora por diferentes razones.

Aunque no estaba impulsado por las mismas razones que Pyrrha, Blake no necesitaba el panorama completo para ver lo que Pyrrha temía en secreto que sucediera.

Era algo ridículo esperar de ellos dos. Sumándose a la lista de diferencias, Yang no era el tipo de Jaune, y viceversa. No era sólo que no fueran el tipo del otro; Simplemente no había ningún tipo de química entre ellos.

Jaune era un saco de boxeo y Yang era la persona que lo golpeaba por diversión. Podría ser una comparación cruel, pero era la verdad. Jaune tenía este tipo de regla obstinada de no recurrir a la ira, incluso si él y Yang no eran amigos. Debe ser un fastidio, pensó Blake, reprimiendo quién era realmente, a menos que esa fuera su verdadera naturaleza.