A gangster's baby

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Podría saber el nivel del odio que las personas podían tener me, no solo por quedarme con el hombre que muchos deseas, también por ser su tan consentido niño.

No es un secreto que Hyunjin me daba todo lo que pedía incluso más de lo que deseaba. Eso podía joder, especialmente si eres alguien insignificante para la persona que amas.

Algo que los demás no entenderían por más que lo explicara era el hecho de que Hyunjin me consentía tanto por que sabía todo lo que pasaba por mi mente todo lo que quedó en el pasado. Y por qué yo era su mundo tanto como él era el mío.

Su prioridad siempre era mi bien estar, incluso cuando de su trabajo como jefe de una mafia se trataba, era capaz de dejar aquello que esté haciendo solo para atender una llamada mía y salir corriendo tras de mí si era necesario. Palabras que el siempre me repite.

_no vayas. . . Por favor

Trate de convencerlo con mis ojos aguados de lágrimas, agarraba cada vez más fuerte su brazo izquierdo, rogándole que no se fuera.

Esta era una de esas veces en las que Hwang tenía que viajar por varios negocios y me dejaba solo, odiaba quedarme en la soledad de una casa tan grande, odiaba estar solo.

_Lix te pido que no hagas esto más, sabes que tengo que ir, no me hagas esto aún más difícil.

Si para mí era complicado para él debía serlo más. Pero Encerio no quería que me dejara.

_Entonces iré contigo

El me miró analizando lo dicho, al parecer fue una sorpresa mis palabras.

_Felix, no creo que sea lo mejor, volveré lo más rápido posible.

Negué repetidas veces sabiando que aún lo extrañaría.

_No, no quiero que te vayas, no quiero estar solito, déjame ir contigo al menos. O es que acaso quieres ocultarme algo.

Él respondió al instante.

_no, jamás pienses eso Hwang Félix, sabes que no. Pero si tanto insistes, entonces ven conmigo

Sonreí contento con su respuesta, subí los escalones corriendo de felicidad le hablé a la sirvienta y le dije que empacara todo lo posible mientras yo me preparaba.

Realmente él si me consentía en todo.

Daddy You Are Hot Where stories live. Discover now