En los tiempos finales, cuando las sombras se extiendan sobre la tierra, los Cinco Jinetes del Apocalipsis cabalgarán con furia y desolación.
La Hambruna, en su corcel esquelético, traerá miseria y escasez, haciendo que los estómagos rugen de vacío...
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
𝑵𝑨𝑹𝑹𝑨𝑫𝑶𝑹𝑨 Después de que Tristán y Lancelot se fueran, Liz se quedó sola sin nadie con quien compartir sus tonterías. Pero sólo serían unos días no?
Ya era de noche y la rubia no podía dormir a de ser por el insomnio que tenía, además de que tenía demasiadas ocupaciones y mucho estrés para ella, ella solo tenía 16 años es demasiado joven como para estresarse así.
Ella estaba sentada en la orilla de su cama viendo a la nada, pero detrás de ella apareció una sombra negra con una capa del mismo color y con una guadaña un poco oxidada. Era la muerte en persona, ella se iba a llevar la vida de la rubia.
Liz al parecer noto su presencia pero no le dio importancia, la muerte se acercó aún más y más a Liz hasta quedar justo atrás de ella.
-Si quieres llevarte mi vida hazlo rápido -Dijo ella sin verla.
La muerte se quedó sorprendida nadie nunca le había dicho eso.
-Me vas a contar que pasó? -Dijo el de capucha con el arma en mano- Las veces que intentado llevarte conmigo no he podido- Dijo el sentándose a su lado, dejando a la rubia confundida.
-Ya has intentado llevarte mi vida?
-Si, desde que eras una bebé -Dijo de lo más tranquilo- Pero hay algo que me lo impide siempre, al parecer tienes un campo de protección que te impide morir
La rubia quedo sorprendida por tales palabras sabía que varias veces su vida había perdido de un hilo pero no sabía que ella tenía un campo de protección.
-Un campo de protección? De que hablas -Pregunto.
-No lo se muy bien, pero debes tener cuidado -Dijo levantándose de ahí- Al parecer alguien te tiene en la mira y busca tu magia y tu corona -Dijo el dejando en shock a la rubia.
-Sabes quien es? -Dijo la rubia levantándose de su asiento.
-No, no lo se pero debes tener mucho cuidado -Dijo sin mirarla dándole la espalda- Y una cosa más "𝗗𝗲𝗯𝗲𝘀 𝘁𝗲𝗻𝗲𝗿 𝗺𝘂𝗰𝗵𝗼 𝗰𝘂𝗶𝗱𝗮𝗱𝗼 𝗟𝗶𝘇, 𝗺𝘂𝘆 𝗽𝗿𝗼𝗻𝘁𝗼 𝗮𝗹𝗴𝘂𝗶𝗲𝗻 𝗾𝘂𝗲 𝗰𝗼𝗻𝗳𝗶́𝗮𝘀 𝘁𝗲 𝘁𝗿𝗮𝗶𝗰𝗶𝗼𝗻𝗮𝗿𝗮 𝗿𝗲𝗰𝘂𝗲𝗿𝗱𝗮 𝘁𝗼𝗱𝗮 𝗺𝗼𝗻𝗲𝗱𝗮 𝘁𝗶𝗲𝗻𝗲 𝗱𝗼𝘀 𝗰𝗮𝗿𝗮𝘀"
Eso fue lo último que dijo antes de esfumarse en el aire dejando la ventana abierta, la rubia estaba en shock con tales palabras que le habían dicho anteriormente.
Ella vió que le dejaron una Rosa pero no era una Rosa común esta era un lirio rojo mejor conocido como Lycoris radiata.
Ella tomo la flor y la miro bien era muy bonita, pero se quedó pensando en lo que dijo la muerte.
-Que querrá decir?
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.