Mahidevran después de caer del caballo y quedar inconsciente por varios minutos, Su esposo junto a su hija que estaba sollozando al ver que su mamá no despertaba, regresaron a palacio, rápidamente la Reina fue atendida.
— Su Majestad — se acercó un chico e hizo una reverencia, de apenas unos 14 años que ya se había convertido en uno de los mejores guerreros del ejército, era también uno de los guardias personales de la princesa Victoria (Mihrimah)
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— Princesa ¿le sucede algo?— preguntó el chico preocupado por ver a su amiga sollozando.
— Iskender, lleva a mi hija al jardín. — Ordenó el Rey, pero antes de que se vayan él se agachó a la altura de Victoria y le dio un beso en la frente.— No estés triste hija, tu mamá está bien. En cuanto despierte te avisaré de inmediato ¿si?— Victoria asintió — Ahora ve con Iskender.
La princesa fue con Iskender al jardín, ambos eran muy amigos aunque tuvieran una gran diferencia de edad se llevaban muy bien.
— Victoria ¿Que fue lo que sucedió?— preguntó el castaño.
— Íbamos cabalgando, yo iba con Padre pero no nos dimos cuenta cuando mamá cayó del caballo, quedó inconsciente.
— Calma Victoria, ella va a estar bien.
En ese momento llegó Francis, un niño rubio de 11 años que aunque era hijo del Rey y la mayoría lo sabía lo trataban igual que las demás personas, el Rey Francisco no quería que Mahidevran sospechara algo porque cuando perdió la memoria la primera mentira que le dijo fue que se habían casado y que habían tenido una sola hija. Desde ahí el príncipe a crecido viendo como Victoria se lleva todo el cariño de su padre que a él le pertenece, pero no odia a Victoria porque ella no tiene la culpa de las mentiras de su padre, al contrario es muy buen amigo de la princesa
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En los aposentos de Mahidevran, hace un gran rato que se había despertado. Ella aunque había recordado todo su pasado y como llegó a este palacio seguía un poco aturdida y pensativa.
— Mis hijos Mustafa Y Turhan ¿Como estarán?— dijo derraman una lágrima al ser consciente que gracias al psicópata que tenía Francia como Rey, ella había perdido valiosos años de su vida con sus hijos.
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Años atrás
Mahidevran se había despertado, aun iba en el carruaje con los hombres que la habían sacado del palacio mientras que en sus brazos llevaba a su Hija.
La niña no paraba de llorar, era como si la bebé supiera el peligro que sufrían su madre y ella.— Calma mi pequeña sultana todo va a estar bien.
El carruaje se detuvo y le pidieron que bajara. Mahidevran a regañadientes bajo de el.
— Comportese señorita, hagalo por su bien y por el de su hija.— dijo amenazandola.
— ¿Esto es obra de Hurren, verdad? ¿Ella envió a que me secuestren?— dijo al recordar que ella vio cuando se las llevaban y no hizo nada, el hombre le quito a su hija de sus brazos y dos hombres le intentaban atar las manos.
