Finalmente, libremente

355 51 3
                                    

Narración tercera persona: Omnisciente

Pedro Pablo no podía dormir,  mañana tenía que hacer una confesión muy importante a su familia, recibe la notificación de Bosco para una videollamada, se levanta con cuidado de su casa sin despertar a su hermano ni a nadie y sube a la azotea para más tranquilo, se sienta

Bosco; Hola

Pepa; Hola ¿Tampoco puedes dormir?

Bosco: No, así que ya somos dos, estoy algo nervioso  - el otro suspira  -

Pepa: Yo también estoy nervioso, es la primera vez que confieso algo así

Bosco: Si, yo también. Pero si estas decidido a decir, yo también lo estoy no estás solo en esto

Pepa; Yo también estoy decidido, solo que hemos pasado mucho, lo de Ginebra y Mauro que ya por fin terminó

Bosco; Si, quedamos que se los diríamos pasando todo esto

Pepa: Si, pero si siento  algo de nervios, pero ya no me pienso esconder más

Bosco: Todo estará bien

Pepa: ¿Pero tus abuelos?

Bosco; Se tendrán que a ser a la idea, mi abuela pues ya cambio con esto de que esta con Fobo y así, y pues, dudo que mi abuelo suelte un comentario fuera de lugar. Menos si está doña Lupita

Pepa: Si  - suspira  -

Bosco: ¿Ya estas un poco mejor?

Pepa: Si, realmente necesitaba esa motivación mutua

Bosco: Yo también, ya no tengo miedo a nada  - sonríen  -

Después de unos minutos dándose motivación, colgaron la llamada volviendo a dormir, mañana tenían un gran y excelente día. Ya no hay nada que esconder, ni temer.








































Toda la familia, estaba en momento armonioso, contando anécdotas, ya eran felices después de tanta malicia. Bosco miró a Pedro Pablo para hacerle señal, este suspira

Pepa: Familia, Bosco y yo queremos hablar con ustedes

Mireya: ¿Qué pasa mijo?

Bosco: Esto planeabamos decirles mucho antes, pero con todo lo de Ginebra pues, no había chance

Esteban: Bueno, pues, este es un momento para que nos digan

Pepa: Bosco y yo  - Bosco toma la mano de Pedro Pablo  -

Bosco: Somos novios  - hubo un silencio en ambas familias y luego sonrieron  -

Salomón: Ay carnal, díganos algo que no sepamos, si eran bien obvios no manchen

Gala: Si, yo siempre notaba ese gran amor entre ustedes

Mireya: Si

Nandy: Si, yo ya lo sabía desde uuuh pues si, cuando lo sabes lo sabes si ojo de loca no se equivoca

Paz: Pepa, Bosco, nosotros tuvimos su edad conocemos cada mirada, que con solo mirarse se dicen todo, siempre notabamos esos brillos en ambos cuando se miraban

Salomón: Simon, y pues yo no me creía ese cuento de la vez que tenían los labios bien inchados de tanto, beso que seguramente se daban

Esteban: Merecen ser felices hijo

Elvira: Mira mi amor, yo probablemente antes hubiera reaccionado mal, pero te veo feliz, y ahora comprendo el verdadero amor, y el que tu seas feliz con Pedro Pablo, yo también soy feliz  - Bosco y Pedro Pablo sonrieron  -

Porfirio: Ay mijos pues que les digo  - suspira  - yo crecí en otros tiempos, pero, creo que ya es momento de que yo tenga otra mentalidad, el ser tolarante

Lupita: El amor es para gritarlo y demostrarlo hijos, y aquí los aceptamos y los impulsaremos a que no tienen que esconder nada, solo son dos personas que se aman

Pepa: Gracias familia, realmente necesitábamos ese apoyo

Salomón: ¿Y bueno se van a besar o Neh?

Niños: Si, que se besen, que se besen

María: beso, beso  - Pedro Pablo y Bosco se miraron juntaron sus labios en un beso lento y con sonrisas de por medio -

Salomón: Ehhh, se quieren y son novios

Monito: Se quieren y son novios

Todos: Se quieren y son novios

Salomón: Ihhh   - aquellos chicos sonrieron  -

No había nada que temer, ahora son más que libres

One-shots Donde viven las historias. Descúbrelo ahora