Unsettling Level of Chemistry (#Lukola)

Capítulo 16: Deseo, Sexo, Lujuria... Coraje Milán parte II

Advertencia: Alto contenido sexual a continuación

Tenía a Nic sobre mi cama, y la pasión que nos envolvía era irrefrenable. No podía dejar de besarla, mis labios recorrían cada rincón de su rostro y cuello, mientras mis manos buscaban desesperadamente el contacto directo con su piel. Sentía sus uñas arañando mi espalda bajo mi camisa, provocando un torrente de sensaciones que me hacían desearla aún más.

"Luke..." murmuró Nic, su voz cargada de deseo. "No pares, por favor."

"Ni se me pasaría por la cabeza," respondí, con una sonrisa mientras me abalanzaba sobre ella, y con un movimiento rápido, me quité la camisa. La manera en que me miró, con sus pupilas dilatadas y su respiración agitada, fue increíblemente excitante.
Sus ojos brillaban con deseo, y su mirada parecía devorarme.

Me incliné hacia adelante, hundiendo mi cabeza en su cuello, llenándolo de besos y pequeñas mordidas que arrancaban gemidos de sus labios.

"Luke... me vuelves loca," jadeó, arqueando su espalda para acercarse más a mis caricias.

El vestido que llevaba facilitó mi acceso a su cuerpo. Podía sentir el calor y la humedad que emanaban de ella a través de sus bragas. Sin dudarlo, comencé a rozar mis dedos contra la delicada tela, arrancándole un gemido de placer que resonó en mis oídos como música.

"Sí... sí," jadeó, moviendo sus caderas contra mi mano.

El vestido ya me tenía harto, así que con un movimiento decidido se lo quité, dejando expuestos sus hermosos pechos. La visión de sus tetas, firmes y generosas, me dejó sin aliento. Cada centímetro de su piel parecía llamarme, y no pude resistir la tentación de chupar, lamer y morder sus pezones.

"Mmmm... sí, justo así," murmuraba, sus manos aferrándose a mi cabello, empujándome contra su cuerpo.

"Te sientes increíble," le dije, mirándola con admiración. "Quiero llevarte al límite, Nic. Quiero que me pidas más."

Formé una línea de besos desde sus pechos hasta sus muslos, separando sus piernas para dejar mi boca explorar cada rincón de su intimidad. Definitivamente sabía espectacular. Mi lengua se movía con precisión sobre su clítoris, asegurándome de no dejar una sola parte sin explorar.

"Oh, Luke..." gritó, su cuerpo temblando bajo mi atención. "¡No pares, por favor!"

Nic estaba vuelta loca de placer, y sus gemidos se hicieron más fuertes y desesperados hasta que su cuerpo comenzó a temblar incontrolablemente.
Su primer orgasmo de la mañana llegó con una intensidad que me llenó de satisfacción, y sentí su jugo deslizarse por mi boca.

"Por favor,," me rogó entre jadeos, su voz apenas audible. "No te detengas."

Me saboreé cada gota, y subí de nuevo hasta sus labios, compartiendo con ella el delicioso sabor de su deseo.

"Sabes increíble," le susurré antes de besarla profundamente.

"Quiero más," murmuró contra mis labios, sus ojos brillando con una mezcla de lujuria y amor.

Jugué con mi pene en la entrada de su cuerpo, disfrutando de la mezcla de su humedad y mi saliva. Ella estaba desesperada por más, y con un movimiento decidido, tomó mi pene en sus manos y lo guió dentro de ella, era algo que no me esperaba, sin duda alguna me necesitaba. El estrecho calor de su interior me hizo gemir de placer.

"Oh, Nic..." gemí, comenzando a embestirla con fuerza. "Eres tan estrecha... se siente increíble."

"Luke... más fuerte," jadeó, moviendo sus caderas para encontrarse con cada una de mis embestidas. "No pares, por favor."