alexis iba perdido.
después de haber terminado de rendir, horas después, sentía que sus ojos iban a rendirse en cualquier momento.
terminó llamando a paulo, pidiéndole muchos perdones por haber cancelado la salida, pero que estaba hecho mierda, y lo único que quería hacer era dormir. el de ojos claros le respondió diciendo que no había problema, y alexis agradeció mucho aquello.
ahora, no podía esperar a llegar a su casa. todavía le quedaba manejar hasta allá, y él no iba a aguantar quince kilometros manejando, no iba a llegar, de eso estaba seguro.
no sin haber por lo menos descansado diez minutos. a la vez, necesitaba tomar algo para despertarse.
entonces desvió su camino hacía el mcdonald's cerca de la facultad. estaba a apenas tres cuadras, y al lado había un starbucks, cosa que le daba más catálogo para elegir.
pero parecía que el universo no estaba de su lado aquel día, y todas las desgracias le pasaban a él cuando comenzó a llover. puteó internamente, se subió la capucha y terminó por caminar hacía el starbucks.
bueno, mejor dicho, no llegó al starbucks.
jamás llegó.
¿conocen violetta, cápitulo uno, temporada uno? bueno, fue algo así.
salvó que alexis esta vez sí se estampó contra el piso después de una buena resbalada, y nadie, absolutamente nadie lo salvó de esa—ni un tomás lo podría haber salvado.
una vez su cabeza rebotó contra el concreto, su mente se puso en negro y perdió la consciencia. y bueno... alguien quizás si lo terminó salvando, muchísimos segundos después.
pero el podía estar agradecido por eso, ¿no?
quizás no.
°CARREFOUR°
se despertó un rato después, sus ojos siendo atacados con mini explosiones en lo oscuro de su cabeza. parpadeó un poco y entre la vista borrosa encontró una luz sobre él.
dios.
no seguía bajó la lluvia.
ESTABA EN LA CASA DE ALGUIEN.
LO HABÍAN SECUESTRADO.
su cabeza empezó a entrar en pánico. pero le dolía, le dolía simplemente pensar y abrir los ojos. estaba agotado, y seguro terminó durmiendo después de haberse desmayado.
es más, quería seguir durmiendo. pero la idea de estar secuestrado le daba miedo, y, como decía joaquín en una de esas, siempre había que hacer algo antes de que te lleven a una segunda localización.
o algo así aprendió de los documentales que veía con su amigo cada tanto.
terminó por abrir los ojos e incorporarse de a poco. se levantó hasta estar sentado, y se dió cuenta que estaba en un sillón.
el sillón, estaba en un departamento—bastante desordenado y con un olor que no reconocía como el suyo. definitivamente, no sabía donde estaba.
tampoco había nadie a su alrededor, su mochila estaba colgada en un perchero, y la puerta estaba cerca de él, así que podría irse si quisiera.
pero después, apareció un pibe desde el corto pasillo del departamento. pronto sus miradas se encontraron, y alexis no pudo ni levantarse completamente, porque un dolor se presentó en su nuca, y se llevó una mano ahí.