Sangre y garras

La dulce reconciliación

-Van a cruzar las montañas dentro de 3 días, como dijo Carlisle anteriormente, calculamos que serán entre 20 y 30, pero seguramente disminuirán en el trayecto, los neófitos tienden a pelear entre ellos

-Cual es la diferencia entre los neófitos y ustedes? -dije traduciendo la pregunta de Sam-

-Los Neófitos son vampiros que tienen menos de un año de haber sido creados, son inestables, salvajes y casi imposibles de controlar, actúan según sus instintos. Los neófitos al haber sido convertidos recientemente, tienen mas fuerza que los vampiros viejos, su fuerza superior dura aproximadamente un año, durante el cual son increíblemente fuertes físicamente, debido a que su cuerpo va consumiendo la sangre que tenían cuando eran humanos. 

-Y también son diferentes a nosotros porque nosotros somos mucho mas apuestos, o al menos yo -fanfarroneo Emmet, ya se me hacía raro que se estaba tardando mucho en soltar una tontería, pero escuche una risita mental de el lobo mas pequeño junto a Jacob-

-Disculpen a mi hermano, creemos que el pobre se cayo de su cuna cuando era bebe, y el daño se amplió cuando se convirtió en vampiro -soltó Jasper, ganando un gritito enojado de Emmet y risitas de la manada- bueno, lo que deben saber para poder pelear con neófitos es que no deben atacarlos de frente, es lo que ellos esperan que hagan, y les pondrán fácil que los sujeten del cuello para rompérselos y matarlos, traten de atacar por los costados o por detrás, estando en continuo movimiento, para no darles la oportunidad de reaccionar, ellos no usan estrategias, ellos solo utilizan su fuerza bruta. Ahora les daremos un ejemplo, Emmet actuara como un neófito, ya que él es un ejemplo muy cercano de ellos.

-Ahora si te voy a cerrar la boca, rubio sufrido 

Emmet y Jasper se posicionaron entre nosotros y la manada, fue bastante divertido de ver, y se notaba que los lobos estaban emocionados por la batalla, al menos a los que vi, Jacob seguía con Leah, ambos sentados hablando por el enlace mental de la manada, de vez en cuando se frotaban el hocico en el cuello del otro en forma de apoyo, por la distancia no pude leer sus pensamientos para saber que decían, pero sabía que no me gustaba ver eso, ahora ya no eran celos, al menos no tanto, mas que todo me sentía como un idiota porque sabía que yo lo había puesto de ese estado de animo. La batalla de Jasper y Emmet termino, Emmet tenía una gran fuerza, su fuerza era mayor a la de Jasper, pero Jasper era mas ágil y tenía mas estrategia, así que la batalla termino con la derrota de Emmet.

-Otra vez, no estaba listo -escupió Emmet levantándose del piso-

-Puedes volver a intentar luego, ahora, Edward... 

Jasper volteó a verme para indicarme que me tocaba, utilizando mi velocidad, me puse frente a Jasper, dando la espalda a los lobos y él dando la espalda a mi familia, estábamos a punto de iniciar cuando sentí un muy fuerte tirón en mi camiseta por atrás, voltee y era Jacob, había mordido mi camiseta por atrás  y me jaló junto a él, posicionándose frente a mi de manera protectora, realmente tendría que haberme enfadado porque podría haberme arrancado medio cuerpo al jalarme de la camiseta con los colmillos, pero no podía enojarme con él, esta era la primera interacción que tenemos desde que arruine todo con él, además sabia el motivo por el cual me había jalado, por mas que sea solo un entrenamiento y luche contra Jasper que es mi hermano, para él es una gran amenaza, una situación en la que podría salir lastimado.

-Jacob.... 

Me acerque a él para tocar su pelaje y calmarlo pero se alejó, aunque siguió parado frente a mi cubriéndome para que Jasper no se acercara, por el enlace mental le dijo a Quil que tomara su posición mientras el salía de fase, Quil miro a Sam y este asintió dándole autorización a hacerlo. Quil tomó el lugar de Jacob, y él se fue atrás de un árbol, donde salió de fase y se puso unos vaqueros rotos y de milagro, también una camiseta. Cuando ya estuvo listo volvió con nosotros, palmeo el lomo de Quil para que volviera a donde estaba tras de Sam, y él se volvió a poner frente a mi, pero con cierta distancia de por medio y dándome la espalda.