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- Dios me quiero morir - el pelinegro se dejó caer en el sofá de la casa apenas llegaron y ari abrió la puerta

Osvaldo no tardó en seguir sus pasos

- me matan los pies - se quejó el más alto

- como si hubieran caminado tanto - bufo ari

- ¡nos hicieron caminar mil calles! - siguió reclamando Felix

- ya cállate - habló Samantha desde la cocina mientras sacaba una botella de agua del refrigerador

Osvaldo y ari se miraron y cada uno reviro los ojos

Sabían que otra vez se había acabo La Paz en la casa por culpa de Samantha y Felix

- saben yo me iré a bañar - ari tomó su bolsa y subió hasta su cuarto

Osvaldo miró a los dos jóvenes que quedaban en la sala y sin mucho de explicación subió a su cuarto a dormir por el día tan aterrizado que le habían echo vivir

Felix también subió a su cuarto y atrás le
Siguió Samantha para darse un baño caliente

Samantha se encontraba en medio de la tina completamente relajada y disfrutando del aroma del jabón

El vapor envolvía la habitación dando una sensación de relajación y tranquilidad

De repente la puerta fue torpemente abierta sin prestar atención

Felix quien estaba con una hoodie,el pelo húmedo y sus pantalones de pijama entró sin darse cuenta que la tina estaba ocupada

- ¡Felix! - gritó Samantha completamente sobresaltada cubriéndose con las manos y resbalando un poco en el agua

Felix con los ojos y abiertos en par dio un paso atrás completamente sorprendido

- ¡lo siento! No sabía que estabas aquí - dijo mientras se giraba de inmediato pero no sin antes tropezar con la lágrima es y casi caer al suelo

El ambiente pasó de ser sereno a incomodantemente cómico en un instante

Samantha aunque un poco molesta no pudo evitar soltar una pequeña risa al ver la torpeza de Felix

- la próxima vez toca la puerta ¿si? - dijo ella aún sonriendo

- definitivamente lo haré - respondió Felix mientras se retiraba de la habitación con la cara roja de vergüenza

Felix cerró la puerta detrás de él con un ligero golpe aunque al cerrar se apoyó en ella un momento para recuperar la compostura

Podía sentir el calor  recorriendo cada rincón de su cuerpo y su corazón latiendo acelerado

No podía creer lo que acaba de pasar

En él interior Samantha se acomodó nuevamente en la tina aunque aún mantenía su sonrisa en sus labios

La situación fue inesperada pero no podía impedir notar lo cómico aunque sabía que Félix posiblemente se estaba muriendo de vergüenza

Después de unos minutos este mismo tocó la puerta con suavidad

- ¿Samantha? - preguntó Felix con timidez - ¿estás bien?

- si Felix no te preocupes - respondió con voz tranquila - fue un accidente puedes entrar ya me puse una toalla

Felix aún nervioso entreabrió la puerta un poco  y asomándose un milímetro

- ¿segura? No quiero...ya sabes...ser un idiota otra vez

Samantha soltó una risa ligera

- si estoy segura además ya nos conocemos bastante bien como para que esto sea un problema ¿no crees?

Felix asintió y entró al cuarto de baño un poco más relajado

- de verdad no sé cómo explicarte lo distraído que estaba - intento justificar su torpeza - estaba pensando mil cosas a la vez y...bueno ya vez

Samantha o lo pensó mucho y se inclinó hacia el acortando su distancia y Felix repitió la acción haciendo que ambos se unieran en un beso suave y casi tímido al principio como si ambos estuvieran probando el terreno Pero en cuestión de segundos la calidez del momento los envolvió y el beso se volvió más profundo más apasionado y el mundo exterior pareció desvanecerse dejando solo el sonido del agua de la tina y los latidos acelerados de sus corazones

...

Saturno |riverduccion|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora