La Casa del Lago : Un Verano Inolvidable

Capitulo 1

🐰🌳

¿Tienes hermanos? Sabes, esos seres odiosos que te sacan de tus casillas.

A mis 19 años me he repetido lo mismo, soy una chica buena, amable y bien educada.

Mis padres me dieron la mejor educación, pero esos hermanos de sangre te sacan los demonios ocultos que hay en tu interior. Son las 6 de la mañana y escucho la voz más irritante llamándome.

—¡JENNA!

Me paro de la cama al oir como la voz de mi hermana poco a poco se va quedando rendida.

—¿¡QUÉ!? —le respondo para que deje de gritar

—¡Baja el desayuno está servido! —la escucho como si la tuviera gritándome al oído

—Te maldigo, estaba soñando que me casaba con Luca Vitale —paso mi mano por el cabello suelto

Soñaba que estaba en la playa de Italia, escuchando música y tomando un delicioso vino blanco, a mi lado estaba Luca con sus bonitos abdominales alumbrados por el sol, en un bóxer negro que no dejaba nada a la imaginación.

Me pongo de pie estirando mi cuerpo entumecido, me doy una ducha rápida, me acosté bien tarde anoche leyendo Belleza Oscura y ahora los ojos se me cierran solos.

Pero necesito ir a la universidad, ya quiero que acabe este mes lleno de exámenes. Después viene el verano, mis padres siempre nos llevan a algúna playa o casa de verano.

Abro el armario, dónde tengo una cantidad de vestidos bonitos, el día hoy esta bastante fresco y soleado, así que voy a elegir un bonito vestido de princesa sencillo sin mangas en forma de corazón es de color azul claro con florecitas, un par de converse. Agarro la mochila echo dentro mi laptop y mis útiles escolares.

Llegó al comedor, dónde todos ya están desayunando, ni siquiera me esperaron.

—Buenos días —saludo sentándome en la mesa

—Buenos días Jenna Collins —me saluda mi hermana con un tono sarcástico

Lleva puesta un falda de secretaria por las rodillas que se le pega a su cuerpo curvilíneo, una camisa mangas largas blancas de botones, es su uniforme de trabajo aunque es de un tono gris bastante feo, no entiendo como es que le queda bien, yo prefiero los colores claros y agradables.

Pero siempre le he envidiado ese cuerpazo que tiene. Pero nunca se lo diré o si ego aumentará.

—Lo siento hermana, anoche me acosté tarde —le digo echándole queso en unos panes doraditos con forma de corazón.

—Claro —responde en lo que se sirve el jugo de banana —Tu sabes que hoy tienes exámen y te acuestas tarde. Ya cambia de una vez y toma un poco de responsabilidad

—Hermanita, se que hoy tengo examen, no tengo Alzheimer —le contesto llevándome el pan a la boca

Y está delicioso, me encanta el pan con queso derretido.

—Por ahora no tienes alzheimer, pero me vuelves a contestar así y te juro que irás a la escuela como la última vez —me señala con ese maldito dedo, tiene unas uñas demasiado largas, aún estoy buscando la forma de como ella se limpia el trasero