ONE SHOTS GI - Edición Yandere GENSHIN IMPACT

⚡⚡Aether x Inazuma Pt2⚡⚡

Los días pasaban y Aether se había vuelto inseparable de Ayaka. Cada tarde, después de cumplir con sus deberes como guardia personal, la acompañaba en sus paseos por las calles tranquilas de Inazuma. Aether comenzaba a relajarse en su nuevo papel, y aunque la sombra de Yae Miko y su advertencia seguía pesando sobre él, la compañía de Ayaka lograba traerle una sensación de paz que tanto necesitaba.

Una de esas tardes, mientras caminaban juntos cerca del mercado, un fuerte estallido resonó en el aire. Aether, entrenado para reaccionar ante cualquier peligro, inmediatamente entró en alerta. Sin pensarlo dos veces, cargó a Ayaka en sus brazos, sujetándola con firmeza mientras su mirada se movía con rapidez, buscando el origen del sonido.

Aether (con una voz decidida, mirando a su alrededor): ¡Ayaka, no te preocupes! Te llevaré a un lugar seguro.

Ayaka, sorprendida por el repentino movimiento, se quedó en silencio por unos segundos, su rostro completamente sonrojado. Aether la sostenía con fuerza, como si quisiera protegerla de un peligro invisible. Sin embargo, al darse cuenta de lo que había ocurrido, una sonrisa juguetona apareció en sus labios, y pronto no pudo contener una suave risa.

Ayaka (intentando disimular su risa, aún sonrojada): Aether, por favor... déjame bajar. No es necesario...

Pero Aether, con la adrenalina aún corriendo por su cuerpo, negó con la cabeza, manteniéndola firmemente en sus brazos mientras comenzaba a caminar rápidamente hacia la Hacienda Kamisato.

Aether (con seriedad, pero su voz temblaba un poco): No, no puedo arriesgarme. No sé qué fue ese sonido, pero necesito asegurarme de que estés a salvo.

Ayaka, aún apoyada en su hombro, no dejaba de reírse suavemente, sus manos descansando sobre el pecho de Aether mientras lo miraba de reojo.

Ayaka (sonriendo dulcemente, mientras sus ojos brillaban con diversión): Aether... solo fue un fuego artificial. Estoy segura de que es algo organizado por la familia de Yoimiya. No hay ningún peligro.

Aether se detuvo en seco, procesando lo que Ayaka acababa de decir. Sintió cómo el calor subía rápidamente a su rostro, su mente quedando en blanco al darse cuenta de su error. El "peligro" que tanto temía no era más que uno de los famosos fuegos artificiales de Yoimiya, encendidos en alguna celebración local. Su rostro se volvió completamente rojo de vergüenza, algo que no podía ocultar, especialmente con Ayaka tan cerca.

Aether (con la voz vacilante, todavía cargando a Ayaka): Oh... ¿en serio? No me di cuenta...

Ayaka no pudo evitar soltar una carcajada genuina, encontrando adorable cómo Aether, a pesar de ser un guerrero experimentado y poderoso, podía ser tan protector y, a veces, tan despistado.

Ayaka (riendo con suavidad): Aether, no puedes cargarme cada vez que escuches un ruido fuerte. Estoy a salvo, te lo prometo. Ahora, por favor, déjame bajar.

Aether, aún ruborizado, miró a Ayaka y luego al suelo, dándose cuenta de lo innecesario de su reacción. Pero, a pesar de su vergüenza, había algo en la risa de Ayaka que lo hacía sonreír, incluso en medio de su torpeza.

Aether (con una risa nerviosa, finalmente cediendo): Lo siento, Ayaka... solo quería asegurarme de que estuvieras bien.

Con cuidado, bajó a Ayaka, quien todavía se reía suavemente mientras ajustaba su kimono y lo miraba con una mirada que mezclaba afecto y diversión. Aether se rascó la cabeza, claramente avergonzado por su reacción exagerada, pero al mismo tiempo aliviado de que Ayaka no se lo hubiera tomado mal.

Ayaka (mirándolo con dulzura): No tienes que disculparte, Aether. Es reconfortante saber que siempre estarás ahí para protegerme, incluso de los fuegos artificiales.