CAPITULO 57

71 15 3
                                    

Alastor recorrió los oscuros callejones de la ciudad, sus pensamientos atrapados entre las últimas palabras de sus padres y la presión de revelar la verdad a lucifer y ver  quién era realmente era. "Díselo a Lucifer", repetían sus voces en su mente. Sin embargo, la realidad de su naturaleza angélica lo invadía de dudas. ¿Podría, de verdad, revelarle toda la verdad a quien gobernaba aquel inframundo?

Cuando finalmente llegó al Hotel Hazbin, el ambiente cargado de energía se sentía como una ola de vida que le envolvía. Charlie, radiante como siempre, fue la primera en notar su presencia. Sus ojos brillaban de preocupación, Manos se aferró a su abrigo con fuerza. "¡Alastor! ¡Qué bueno verte! Estaba tan preocupada por ti. No has regresado en tos estos dias ."

Alastor intentó sonreír,  Vaggie se mantuvo al margen, murmurando palabras de consuelo. "Lo importante es que ha vuelto, Charlie", agregó, mirando a Alastor con un leve esbozo de preocupación en su mirada.

"¡Oh! ¿Qué te tuvo tanto tiempo fuera?" preguntó Ángel Dust, sin poder contener su tono coqueto. Husk, el bartender, le lanzó una mirada desaprobadora. "No le hagas caso, jefe. Desde que te fuiste, este lugar ha estado un poco más aburrido."

A pesar de la charla, Alastor apenas escuchaba. Su mente giraba en torno a Lucifer, su ausencia pertinente. La mirada escurridiza de Charlie, que de alguna manera intentaba contener una risa al referirse a su 'papa', lo atormentaba de la risa se armaba de valor, ignorando cómo se sentía.

"Lucifer no está ahora", dijo Charlie, intentando parecer casual. "Está en una reunión con otros monarcas. Estoy segura de que volverá pronto". Con cada palabra, Alastor sintió que un peso se deslizaba de su pecho, y una punzada de alivio agudizaba su incertidumbre.

Como si el tiempo estuviera en su contra, Alastor se despidió de los demás y se retiró a su habitación. El silencio lo envolvió, la familiaridad de su refugio le ofrecía un consuelo momentáneo. Sus ojos se posaron en el collar que colgaba de su cuello: un regalo de sus padres, un recuerdo de lo que había sido. Este collar no solo ocultaba su verdadera energía, sino que también lo arropaba con un disfraz demoníaco, camuflándolo entre las sombras.

Con un gesto tembloroso, Alastor acarició el collar y la imagen de sus padres apareció ante él. Recordó el momento que cerraron el portal, el grito de desesperación y las promesas que le hicieron: "Prueba a Lucifer, hijo. Él no es lo que parece".

Alastor cerró los ojos, intentando dejar a un lado su miedo. Tenía que hacerlo. En su pecho, un fuego comenzaba a formarse; la verdad debía ser conocida. Iba a encontrar la forma de enfrentar a Lucifer sin importar qué. Era el momento de poner a prueba su valentía.

En ese instante, una voz resonó en su mente: "¿Estás listo para enfrentar tu destino?"

El eco de la pregunta flotó en el aire, mientras Alastor, por primera vez, sonrió con determinación. Sus padres estaban en algún lugar, guiándolo en este camino incierto. Y con ello, decidió que la próxima vez que viera a Lucifer, la verdad saldría por fin a la luz, sin miedo y sin reservas.

Alastor, en su viaje emocional, salió de su habitación con el corazón acelerado, decidido a buscar a Lucifer. Caminó por los pasillos del Hotel Hazbin, sus pensamientos tambaleándose entre la ansiedad y la determinación. Finalmente llegó a la habitación de Lucifer, y al abrir la puerta, sus ojos se posaron sobre un pato de goma en forma de demonio, una curiosa representación de su amado. Aquella imagen le trajo recuerdos de como  su padre había destruido en un arrebato de furia hacia todo lo que representaba la existencia de Lucifer.

Alastor sonrió mientras acariciaba el pato, sintiendo una conexión nostálgica. Pero el momento de calma se desvaneció con un fuerte portazo que resonó en la estancia. La puerta se abrió de golpe y apareció Lucifer, visiblemente alterado. Antes de que pudiera procesar lo que sucedía, Lucifer corrió y lo abrazó con fuerza, disculpándose entre lágrimas.

divinidad y pecado : el amor imposible de alastor y luciferDonde viven las historias. Descúbrelo ahora