El Yokai de la Torre y la Luna de la Caza

Capítulo 22

Había pasado tres meses desde que se había roto el juramento de Artemisa. Estaban arreglando varios detalles de la boda. La cual seria en cuatro meses.

En estos momentos Artemisa estaba en la biblioteca de su casa leyendo varios libros, mientras sus mejillas tienen un toque dorado.

En ese instante alguien entro por la puerta.

Samantha: Oh, aquí está. ¿Qué está haciendo?_curiosa al notar la actitud de su señora.

Samantha una joven cazadora que se había unido hace un mes y medio, una semidiosa de progenitor divino desconocido.

Artemisa: Hola Samantha, estoy leyendo algo que es para mí matrimonio_alzando un poco la mirada y volviendo a su libro.

Samantha por la curiosidad se acercó para ver qué era lo que la tenía de esa manera, vio unas imágenes que hicieron que su rostro obtenga un tono colorado.

Samantha: ¿Por qué lee este tipo de cosas?_nerviosa.

Artemisa: Estos libros son de ayuda para la vida sexual en el matrimonio. Las imágenes y los detalles son muy explícitos.

Samantha: ¿Cuándo se case hará todas esas cosas?_nerviosa viendo el libro.

Artemisa: Estás posiciones son más avanzadas, talvez en un futuro_un poco nerviosa.

Samantha: Todo esto es muy complicado, siempre viví con mi madre sin saber quien es mi padre. Mi hogar destruido por un monstruo, enterarme que soy una semidiosa y todas las cosas que suceden en esta casa_soltando un gran suspiro.

Artemisa: No es fácil, todas pasan por lo mismo. Saber que el mundo es mucho más grande de lo que creían. Que tu progenitor que nunca conociste te abandono antes de que nacieras o al nacer, si llegas a sentir odio es normal te sugiero que dejes salir todo ese odio en un grito o en una pelea_recomendo ya habiendo pasado por esto varias veces con sus cazadoras.

Samantha: Muchas gracias por el consejo. Desde que tomé la decisión de unirme han sido muy amables.

Artemisa: Eso hacen las familias, pero debes apurarte con tu entrenamiento para que puedas acompañar a las demás en las cacerías.

Samantha: Lo haré.

De repente empezaron a escuchar ruidos fuera de la habitación.

Artemisa: Esas dos deben estar peleando de nuevo_soltando un suspiro y dejando su libro para ir a solucionar el problema.

Ambas salieron de la habitación y cerca se encontraron a dos semihumanas de aproximadamente 10 años peleando, jalandose las orejas y mordiendose las colas.

La primera siendo una semihumana loba de cabello negro y la segunda una semihumana gato de cabello rubio algo pálido.

Artemisa: *Cof* *Cof*_llamando la atención del duo.

Ambas se separaron y señalaron a la otra.

Sarah/Lilian: ¡Es su culpa!.

Artemisa: ¿Qué les dije sobre pelear en los pasillos?_cruzandose de brazos mientras tiene una expresión molesta.

Al notar la mirada ambas niñas se deprimieron, sus orejas y colas cayeron en señal de tristeza.

Ninguna sabía que decir.

Artemisa se arrodilló para estar a la altura de ambas.

Artemisa: Se que no se llegan bien del todo, puede ser por sus especies o sus personalidades tan diferentes. Pero no deben pelear por todo, ahora son familia, hermanas por eso deben de llevarse bien_acariciendo las cabezas de las niñas.