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La Despedida

La oscuridad de la noche abrazaba la fortaleza, pero en su interior, un brillo cálido emanaba de la Sala del Oso, donde Beko y sus amigos se reunían con los capitanes de los clanes aliados. El aire estaba cargado de una mezcla de solemnidad y esperanza, una extraña combinación que se sentía en cada rincón del antiguo bastión. Las murallas de piedra maciza parecían respirar con vida propia, como si reconocieran la importancia de aquel momento.

El Oráculo, aunque debilitado, permanecía en el centro de la sala, rodeado por los capitanes de los clanes del Lobo, la Ballena, el León, el Búho y el Águila, junto al anfitrión, el capitán del Clan del Oso. Los capitanes, guerreros curtidos por innumerables batallas, se mostraban solemnes y atentos, sabiendo que estaban al borde de un cambio trascendental.

El Oráculo
—Ha llegado la hora de la unión— dijo su voz resonando como un eco antiguo en las paredes de la sala. —El destino de nuestro mundo depende de la fuerza que podamos reunir aquí, en esta fortaleza.

El capitán del Clan del Oso asintió, tomando la palabra con una voz grave y autoritaria.

Capitán del Clan del Oso
—Durante siglos, hemos protegido nuestros propios territorios, luchando por mantener nuestras tierras y nuestras gentes a salvo. Pero este conflicto es diferente. Los Clanes legendarios villanos no se detendrán hasta haber destruido todo lo que amamos. Es hora de unir nuestras fuerzas y enfrentarlos juntos.

El capitán del Clan del Lobo dio un paso adelante, colocando su mano sobre el hombro de Beko.

Capitán del Clan del Lobo
—Beko, hoy no solo te reconocemos como un caballero, sino como un símbolo de la esperanza y la unidad que necesitamos. Has demostrado valor, sabiduría y lealtad, y por eso te confiamos la tarea de guiar a nuestros pueblos en esta hora oscura.

Beko, conmovido por las palabras del capitán, sintió una mezcla de orgullo y responsabilidad. Miró a sus amigos, Julia, Uldru y Jess, y supo que no podría haber llegado hasta allí sin ellos.

Beko
—No lo habría logrado sin mis amigos— respondió con humildad. —Somos un equipo, y sé que juntos podemos enfrentar cualquier desafío.

Julia, siempre la más pragmática, habló con un tono firme.

Julia
—No podemos perder tiempo. Los Clanes legendarios villanos se reagrupan, y si no estamos preparados, nos destruirán uno por uno.

Uldru, quien conocía la fortaleza mejor que nadie, añadió:

Uldru
—Hay pasadizos y cámaras ocultas en esta fortaleza, llenas de conocimientos antiguos y armas poderosas. Debemos aprovechar todo lo que podamos para tener una oportunidad.

El capitán del Clan del Búho, conocido por su sabiduría y previsión, se acercó al Oráculo y a los demás capitanes.

Capitán del Clan del Búho
—Es cierto. Sin embargo, no debemos subestimar la importancia del conocimiento. En la Biblioteca del Oso se encuentran textos que podrían revelar la clave para derrotar a nuestros enemigos. Debemos estudiarlos, mientras fortalecemos nuestras defensas.

El Oráculo, quien había permanecido en silencio, observando la interacción, habló nuevamente, esta vez con una intensidad que atrajo la atención de todos.

Oráculo
—El poder de los Clanes legendarios villanos proviene de fuentes oscuras, antiguas y prohibidas. Solo aquellos que entiendan estos poderes pueden desafiarlos y salir victoriosos. Pero cuidado, buscar este conocimiento puede ser peligroso. Algunos secretos deberían permanecer ocultos.

El capitán del Clan del León, un guerrero imponente con una melena dorada como su emblema, golpeó el suelo con su lanza.

Capitán del Clan del León
—Nosotros, los guerreros, estamos listos para cualquier desafío. Pero necesitamos saber a qué nos enfrentamos. Oráculo, dinos cómo podemos prepararnos para la batalla final.

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