Padres adolescentes Louis y tu

Capítulo 8.

-¿Volverás a casa?- se levantó y tomó mi cara entre sus manos
-No.- respondí fríamente
-Pero ______... creí que tu
-Louis no todo se olvida con unas simples palabras- le dije molesta y dolida
-¿Pero donde dormirás? Me preocupo por ustedes...
-¿Te preocupas por nosotros?- pregunté irónicamente- no sabes más que decir idioteces Louis- escupí en su cara. En realidad me dolió mucho que haya desconfiado en mí.
-Me preocupo por ti y lo sabes. E agarró un ataque de celos ¡Sabes que no puedo vivir sin ti! Confía en mi ______
-¿Confiar en ti? ¿Cómo tu lo hiciste conmigo cuando te dije que el bebé era tuyo? Que ironía, ahora que tu lo necesitas es mi obligación estar ahí para ti

(...)

Le pedí a Jay que fuera por mí, por nada del mundo me iría con Louis. Jay me dejaría en su casa, y eso por que no tengo otro lugar donde dormir, pero obviamente no compartiría habitación con Louis. Me llamarán dramática, pero si estuvieran en mi lugar, con una persona lejos de que fuera Louis ¿Lo perdonarían tan fácil?

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-Pues algo haz de haber hecho mal.- reprocho mi madre- las embarazadas somos muy sensibles, pero no es para tanto que ya no quiera dormir contigo
-Dude que ese bebé fuera mío. Y le pedí una prueba de paternidad- explique a mi madre. Ella se quedó boquiabierta y me dio un golpe, justo en la mejilla.
-Por más que seas mi hijo, Louis- dijo con dolor- eso no se le hace
-Lo sé mamá. Fui un imbécil, pero estoy arrepentido
-Es obvio que tienes que estar arrepentido. Ve a la florería y compra dos ramos de flores y una caja de chocolates- me pasó un fajo de dinero
-¿Para que?- fruncí mi ceño- ¿Tan grande fue mi error que debo comprar dos ramos de flores?
-No. unas son para mí. Ve ya- me mandó y asentí... las mujeres son raras. ¡Todas!

Viernes. (Sigue narrando Louis)

Luego de bañarme miré mi mejilla, me ardía. Ayer después de darle el ramo de rosas a ______ e dio una cachetada, pero debo admitir que la merecía, así serán todos los días hasta conquistar de nuevo a ______. Bajé y la vi en la cocina... tan perfecta como siempre () me miró, sus ojos rojos y por debajo unas bolsas de ojeras. Sentí mi pecho apachurrarse
-Llegarán tarde- apresuró mi madre luego de que tomará el desayuno. Traté de hablar con ______, pero no había palabras, un simple "lo siento" no bastaba.

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Era hora del partido, Carol me obligó a ir, pero no quería al ver a Louis con cara de tristeza... simplemente me partía el corazón. Incluso me dolía más estar separado de el, que lo que me dijo ayer.
Estaban a mitad del juego, Louis tenía la pelota, como siempre. No es por presumir pero el era el mejor. Una molestia se sintió en mi vientre, Niall tenía unos nachos en sus manos, relamí mis labios, parecía un lobo viendo un pedazo de carne jugosa... necesitaba una hamburguesa.

Un grito seguido de una gran bulla me hizo salir de mis pensamientos
-¿Qué paso?- Pregunté a Carol. Mi estatura no ayudaba en nada. No podía ver la gran cosa
-Parece que han lastimado a Louis- frunció su ceño tratando de ver entre la gente
-¿Louis?- me exalté. Corrí entre la gente bajando las gradas para llegar al campo de futbol, empujé a varias personas y recibí muchas quejas para verlo a él. Recostado en el piso quejándose ¿Podía ser tan tierno? ¡Pero mierda! Ya no podía estar enojada con él.