13 | FIESTA CON LOS HOMBRES LOBO

4.8K 353 83
                                    







Con la ayuda de Klaus, me senté en el banco de la iglesia. En medio de él, y Marcel. Apoyé la espalda en el respaldo del banco, e hice una mueca de dolor.

Suspiré intentando controlar el dolor, y me crucé de piernas, apoyando las manos en el regazo. Mi mirada se dirigió a mis manos, que tenían pequeñas heridas producidas por los cristales rotos, y luego a la venda que me cubría la muñeca.

Las heridas más importantes eran las de la espalda, y la del brazo, por lo demás, estaba perfectamente bien. Quitando el hecho de que ayer, Klaus y yo casi nos besamos. Casi.

Alcé la mirada, y empecé a inspeccionar la iglesia, que estaba llena de gente, a pesar de la gran masacre que había sucedido. Mi mirada se encontró con la de una chica pelirroja, que me sonrió simpáticamente. La miré durante varios segundos, antes de prestar atención al padre Kieran, que ya había empezado a hablar.

—Gracias a todos por venir, significa más de lo que imagináis. Nuestra iglesia reabre hoy sus puertas para celebrar su primer servicio. Por fin Seinan vuelve a ser el corazón de nuestra comunidad. Un punto de congregación y unidad. Aquí, y a esta.—De reojo vi como Klaus miraba hacia Camille, que ya le estaba mirando.  Segundos después apartó la mirada mientras yo fruncía el ceño.—Ahora nos reunimos para rezar a Dios, y dar gracias. Los sucesos que ocurrieron en nuestra iglesia fueron trágicos.

Vi como Marcel desviaba la mirada hacia atrás, y fruncía el ceño. Yo también miré, y de refilón pude ver a la chica pelirroja, otra vez.

—Y es esa esperanza en nuestros corazones junto con el apoyo de muchos benefactores lo que nos permite estar hoy aquí. Y nos reunimos con espíritus renovados, y un firme compromiso con los ideales de paz y amor. Amén.

El sermón del padre Kieran acabó, y todos dijeron "Amén".

Poco a poco, todo el mundo se fue levantado de su sitio, y fue saliendo de la iglesia. Cuando ya estaba vacía, nosotros tres también salimos, encontrándonos con el Padre Kieran.

—Precioso sermón el suyo, padre.—Dijo Klaus. —Muy inspirador.

—No pensé que nos ibais a acompañar.—Respondió él.

Me quedé detrás de Marcel y Klaus, contemplando a las personas charlar animadamente. Cerré los ojos, y alcé la cabeza, sintiendo el sol en mi piel. Cuando los volví a abrir, le sonreír a Cami que se acercaba a nosotros.

—Bonito sermón. Me alegro de que hayas reabierto.—Dijo Cami dándole la mano al Padre Kieran, éste le sonrió.—Allison, Marcel.—Camille nos sonrió, y se fue sin dedicar una mirada a Klaus. Sonreí con cierta gracia viendo como Klaus era mirando por los dos hombres.

—Ni me miréis. Yo le dije que se fuese.—Dije Klaus. Sacó su móvil del bolsillo, ya que había empezado a sonar, y cogió la llamada.—Dime, Diego.

⚜️⚜️⚜️

Observé el cuerpo de Papa Tunde en el suelo, rodeado por un circulo blanco, y me crucé de brazos. Debería estar contenta, pero esto podía ser el principio de algo malo, es decir, Papa Tunde era realmente poderoso, había canalizado a los vampiros que Marcel tenía sepultados, ¿Cómo es posible que alguien lo hubiese matado?

—Menudas caras tan largas, chicos.—Dijo Rebekah entrando al complejo.—Escuchad esto; Mientras Sabine hacia su típica visita por el cementerio, una chica ha salido disparada de la tumba. Y esa chica es Monique Devereaux. Los turistas pensaron que era parte de la visita, pero las brujas lo están celebrando como si fuese un milagro.

—Quizá lo sea.—Dijo Marcel. —Habían perdido toda esperanza y a resucitado una joven de la cosecha.—Marcel se quedó callado varios segundos, pensando.— Así recuperaremos a Davina, matando a la bruja que la reemplazó.

THRONE  ⟡  THE ORIGINALSWhere stories live. Discover now