Mátame (FIC DE G-DRAGON)

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Era tarde pero el calor no me dejaba dormir, me levanté somnolienta, me puse un buzo azul, peiné un poco mi cabello porfiado con las manos y tomé el libro que estuve leyendo esa semana. Saqué las llaves, los lentes y nada más. Salí de casa y me dirigí al parque más cercano, es un lugar tranquilo, por donde vivo en Seúl no hay mucha delincuencia y estoy lejos de los barrios con bares y pubs. Después de encontrar una banca cerca de un poste de luz, comencé a leer en la página que había marcado con un pinche de cabello, al rato estaba tan concentrada que podía haber aparecido un ovni sobre mi cabeza y no lo hubiera visto.

Pero a pesar de mi inmersión en la historia, algo llamó mi atención. Un chico corría en círculos por la periferia del parque, llevaba la capucha de su polerón cubriendo toda su cabeza. Era curioso, además a esa hora o era algún famoso o era un delincuente y quería estar lista para correr si resultaba ser lo último. Seguí leyendo tratando de no perder de vista al chico, después que dio unas 2 vueltas más, comenzó a sonar su celular y era una canción que yo conocía "R.O.D" de G-Dragon. "Rayos, amo esa canción" me dije. Lo miré tratando de se disimulada (aunque todos lo sabemos que eso no funciona mucho). Al momento que el chico bajó su capucha casi grito y tiro el libro por los cielos. Tomó su celular y contestó. Se veía algo acongojado, tal vez eran malas noticias. Cuando terminó la llamada, metió el celular a su bolsillo con sus temblorosas manos y corrió raudo a una Van que estaba estacionada en la esquina.

Cuando vi que el auto se perdía en la distancia, salí de mi shock.

- ¡OMG! ¡Oh my fucking God! ¡¿ESE TIPO ERA GD?! - me auto-pregunté.

Aún sin creer a quien había visto, miré hacia donde él había estado. Vi algo brillar en el piso. Caminé hacia ahí curiosa, fuera lo que fuera, si era de GD, sería genial. mi sorpresa fue mayor cuando descubrí lo que se le había caído. Su celular.

- OH MY GOOOOSHHHHH... ¡tengo en mis manos, el santo grial! - exclamé sollozando.

Aunque después de analizarlo un segundo (y darme cuenta que no tenía contraseña) pensé que lo más correcto sería devolverlo... Aunque me doliera en el alma... Debía devolverlo.

Mientras discutía con mi lado bueno y con el malo, los beneficios y los contras, el celular volvió a sonar.

- ¡AHHHHH! ¡¿QUÉ HAGO?!

Respiré profundo y contesté.

- ¡¿Ji Yong?! ¿A qué hora vas a llegar? ¿No ves que le queda poco? ¡Por favor llega! ¡Quiere verte! - suplicó una voz que creí reconocer como Seungri.

- Ehhh... lo siento, pero Ji Yong perdió este celular - dije lo más calmada que pude - Pero lo vi subir a una van, supongo que va en camino...

-¡¿QUÉ?! - gritó en mi oreja - ¿Quién eres?

- Eso no importa mucho... pero puedo devolver el celular donde me digan... yo solo lo encontré.

- Bueno, ahora estamos... en una situación complicada... mañana te llamaré para que lo devuelvas ¿OK?

- Sí, no hay problema.

- Espero que no hagas nada inapropiado con el celular...

- ¿AH' ¡Claro que no! No soy de esas chicas - dije ofendida.

- Bueno, entonces hablamos... bye.

- Bye.

Colgué.

"OMG ¡HABLÉ CON SEUNGRI!" grité a punto de sobreoxigernarme.

Aunque después de esa conversación, estaba segura que sucedió algo malo. Pero ¿qué podría ser?. Recordé la expresión de GD, se veía tan preocupado.

Volví a casa y me senté en un sofá. Me quedé hipnotizada un rato, mirando el celular de GD en mis manos. Se veía tan costoso. Rayos, le prometí a Seungri que no haría nada con él... Pero... PERO. ¡Maldición! tenía el celular de GDragon en mis manos, era como tener los secretos del universo en las manos y no poder mirarlos por el bien de la humanidad.

- ¡Que se pudra la humanidad! y ¡Que se pudra mi palabra! - exclamé antes de decidirme a mirar.

"Aunque sea un poquito" me repetía. Mis dedos fueron directo a las fotos. OH sí, malditas fotos que abrirían un mundo nuevo y desconocido para mi vida.

Ok, lo primero que vi fuero selcas que se había sacado, él solo, con Seungri, con Tae, él solo de nuevo, algunas que había subido a Instagram. Oh, una de CL. Sus selcas eran tan tiernas, que empecé a reírme con una sonrisita estúpida. Y de pronto, como un rayo fugaz que Zeus había mandado, decidido en arruinar mi vida para siempre, una foto de una mujer, una mujer que conocía, una que fue ligada a él varias veces, pero que todo había terminado en rumores... Estaban abrazados muy románticamente, ella le daba un beso en a mejilla y él tenía una feliz sonrisa en el rostro. Maldita fotografía que hace que casi se me cayera el celular como agua entre mis dedos. Era Kiko, Mizuhara Kiko. Esa delgaducha modelo, de dientes grandes y melena negra, a la que tanto había maldecido en mis días de fanatismo extremo. ¡Ella! Abrazando a MI Ji Yong (bueno, es algo que todas decimos ¿no?). ¡¿Cómo podía ser esto?!

Con mi mandíbula casi desencajada, dejé el celular en a mesita frente a mi. No lo podía creer; después de tanto tiempo... ¿Cómo lograron engañarnos tanto tiempo?

Aunque ... pensándolo bien, tal vez eran amigo y esa foto era solo de amistad. Para poder sacarme de mis dudas, volví a tomar el celular. Aunque ahora, pienso que hubiera sido mejor no haberlo hecho. Ese acto, solo ese pequeño acto, hizo que mi vida se volviera un caos por las siguientes semanas.


Panditas, espero le den amor a esta historia.... comenten con alguna duda o algo más ♥♥

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