Capítulo 26

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Ya estaba todo listo para irnos al Aeropuerto, cuando papá recibió una llamada telefónica.
-¿Que pasó Amalia? –Así se llamaba su secretaria –¿Qué? ¿No lo pueden hacer sin mi? Estoy resolviendo un problema familiar... dame un segundo. Samir, puedes llevar a Shai al aeropuerto y esperar que se vaya, tengo un problema en la empresa.
-Si, si yo me encargo, vete sin pendiente –respondió el Sr Edwards
-Amalia, prepara todo estaré allá en la noche, estoy en Estados Unidos–dijo y colgó para ahora hablar con Theo–Tu, te dejaré el departamento, pero conste que lo hago por tu madre, porque la amo.
Theo no dijo nada y solo miró el suelo.
-Te amo –le dije con voz muda y salí con el Sr. Edwards del departamento.
Este le dio una mirada cómplice a Theo y el asintió.
Que estaban planeando esos dos? –me pregunte en mi interior.

Estando en el auto con el Sr. Edwards escuché que hablaba por teléfono:
-Esta tarde llegaran dos chicos, quiero que los atiendan como si fueran mis hijos entendido, no los molesten mucho pues son pareja pero trátenlos como reyes.
Luego que colgó me preguntó:
-¿Te gusta el campo?
-Mas o menos ¿Por? –respondí confundida.
-Por nada –sonrió.

No volvimos a decir nada en todo el trayecto hasta el aeropuerto. Cada vez faltaba menos para alejarme de Theo, varias veces le supliqué a papá por que me dejara irme lejos y nunca me hizo caso, pero luego que era feliz decidió separarme de lo que más amo en el mundo.

Cuando llegamos, el Sr. Edwards me dejó sentada en una banca y volvió a hablar por teléfono esta vez impidiéndome escuchar lo que decía.
Escuché que estaban llamando mi vuelo, me puse de pie, vi todo mi alrededor y las lágrimas empezaron a bajar por mi rostro, estaba a punto de dejar mi país, mis amigos y lo mas importante al amor de mi vida.
-¿A dónde vas niña? –preguntó el Sr. Edwards.
-Acaban de llamar mi vuelo, todo está perdido. Gracias por todo –dije y no pude evitar abrazarlo, necesitaba el abrazo de alguien y el era el único que estaba allí.
-No todo está perdido –escuché su voz.
Me separé rápido del Sr. Edwards y me di la vuelta, no podía creer lo que mis oídos escuchaban era esa voz de niño que tanto me enamoraba, pero menos pude creer lo que veía, ahí estaba él y su mirada divertida. Corrí hasta él como si no hubiese un mañana para aferrarme a su pecho y no salir de ahí nunca.
-¿Creíste que te iba a dejar ir tan fácilmente? –preguntó en mi oído.
Yo solo lloraba, no sabía de felicidad o de tristeza al tener que dejarlo.
-Están llamando mi vuelo –dije entre sollozos.
-Déjalos que llamen, hasta que se les canse la garganta. Yo te amo y vine por ti, no te vas al menos no sin mi –dijo tomando mi cara entre sus manos.
-Pero... –y me interrumpió besando mis labios.

El Sr. Edwards y Theo se habían puesto de acuerdo en aparentar que iban a dejar que me fuera delante de papá para que pudiera dejarme a solas con el Sr. Edwards y este me dejaría escapar con Theo. Él tenía una casa en Oxford, donde permitiría que Theo y yo nos quedáramos por un tiempo hasta que arregláramos las cosas con papá.
-Y bien chicos. No tengo nada mas que desearles suerte. Yo también voy a hacer lo posible por que Lonnie entienda razones. Theo, te llevas una joya muy preciada, cuídala con tu vida. Pórtense bien –fueron los deseos del Sr. Edwards.
-No voy a tener con que pagarle lo que ha hecho por nosotros –le agradeció Theo.
-Aménse y eso es todo –sonrió –ahora váyanse y aprovechen el tiempo al máximo.

Theo y yo emprendimos marcha hasta Oxford y por ende en busca de nuestra felicidad.

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¡Hey Sheo's shipper! :) Sólo quedan 10 capítulos :O

Olvidar que eres tu. #SheoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora