CAPITULO 24

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Mónica se da cuenta ahora. La desea, quiere poseerla. Pero... ella está muy dañada. Incluso todavía se notan algunos moretones. También hay demasiados cabos sueltos. Esta ese novio invisible, y... Luis. Le da un beso en la mejilla apenas.

- buenas noches.

Sofía entra a la casa. Ciertamente afectada por los acontecimientos. Es un hombre muy atractivo, y al parecer también divertido. Un enigma. Pero... solo eso... Quizás, solo deseo.

Antes de acostarse, mira de reojo la esquina donde está la muñeca que resguarda las esencias. Una mueca de disgusto empaña su rostro. Pero hoy fue un buen día para ella.

...

Mónica llega a su casa. Cierra la puerta tras de sí. Con la cabeza más fría se siente avergonzado. Se tira a la cama ciertamente confundido. Sofía es una situación muy confusa. La desea, pero su relación ha sido inexistente hasta que encontraron a las esencias. Saca de su mesa de noche el brazalete de ópalo rojo. Mira cómo se ilumina con la luz de luna que entra por la ventana. Poco a poco cierra los ojos hasta quedarse dormido.

Entonces la esencia de Rebia que vive en el ópalo decide visitar al cantante. Cuando entra se encuentra en una ciudad vieja. Hay gente caminando y haciendo cosas cotidianas. Mónica se encuentra más adelante. Va caminando con una figura que reconoce bien. Camina con Sofía tomándola de la cintura. Ella es apenas una marioneta. Sus rasgos son tiesos y borrosos.

Se acerca lentamente a la imagen del músico. En la mira con esos ojos oscuros, muestra de la presencia de Rebia en él.

-Rebia, ¿Que necesitas?- por primera vez el músico se siente invadido. Es un momento que hubiera preferido guardar para sí.

- No, dime tú ¿Qué haces?

- Nada- suelta a la imagen de Sofía que se va caminando- solo sueño.

- Mira a tu alrededor- dice Rebia mostrándole como muchos de los rostros de la gente de sus sueños se asemejan mucho a Iris. De hecho, en la mesa de una cafetería se encuentra ella. Esta imagen es suave, nítida y natural.

- Ella es solo una niña -menciona Mónica, ahogando cierta nostalgia. Cierto dolor.

Rebia se da la vuelta y lo mira decidida, su cabello malva aumenta la manera en como levita. Sus ojos hablan de reproche. Pero ella no es quien para decirle lo que es correcto. Ya es un hombre. Y en parte tiene razón. Aunque Iris en unos meses cumpla la mayoría de edad, sigue siendo una niña. Mónica no tiene garantía de que los sentimientos de un ella perduren, que no cambie su opinión de él conforme vaya madurando. Y él...

- Solo cuida lo que haces- Se acerca más a él, rozando su oído con los labios, casi como si alguien pudiera escucharlos-, y a quien lastimas...

...

Al día siguiente, todos se presentan puntualmente en la disquera. El día transcurre normalmente. Las prácticas y grabaciones de voz y sonido son todas individuales, así que no se ven entre ellos durante todo el día. Esto tranquiliza a la cantante, ya que aunque el día de ayer fue lindo, los acontecimientos la hacen querer evadir al tecladista. Y con más razón estando Luis ahí. Ella sabe que Luis es alguien que no está a su alcance por ahora pero... No quiere que piense que ella es una cualquiera. Sobre todo sabiendo que esta Marco de por medio. Marco...

Hay muchas cosas que hacer, que replantear. Pero su carrera es demasiado importante. No puede dejarla de lado, es su sueño. Y por mucho que las cosas hayan cambiado debe darlo todo para convertirse en la extraordinaria cantante que desea ser. Dentro de la cabina de grabación, se pone de pie frente al micrófono y se coloca los audífonos con la pista:

LA RAZON DE REBIAWhere stories live. Discover now