Llegué al rancho y estaba Flavio. -Cómo te ha ido en ese negocio? Pregunto Flavio.
-Bien muy bien-dije sonriendo.
-Me alegro enano y alguna mujer por ahí?
-No ,por ahora no.
-Samuel, tienes que buscar a una mujer buena, qué te quiera y qué te haga olvidar a esa cantante.
-Flavio tranquilo ,por Patricia ni he sentido ni siento nada.
Subi a mi habitación y pensé cómo últimamente en mi brujita.
(Hermano me habría encantado decirte qué amo a una mujer buena y qué me ama cómo yo a ella,pero tengo qué esperar a qué este preparada para contarles lo nuestro. Sólo estoy seguro de una cosa Andrea es la mujer de mi vida,nunca me había sentido tan feliz con nadie)
Llego un nuevo día, me fui a trabajar al rancho. Tenia ganas de llegar,queria verlo antes de quee se fuera al banco.
-Buenos dias-dije,estaban Samuel, Flavio,Irina y Soledad.
-Buenos dias-me dijeron todos.
-Siéntate cuñadita y cuéntanos como te fue en el spa.
Me senté y les conté lo bien que lo pasamos Rebeca y yo. Samuel no paraba de mirarme y yo a el.
-Bueno y ustedes en la playa?
-Bien-dijo Irina.
-Bueno me voy a trabajar-me levanté.
-Andrea antes pasa por mi despacho necesito que rebises unas cuentas-dijo Samuel.
Fui a su despacho y cerró con llave.
-Que haces,mi mugrosito?-dije dándole un beso .
-Te he extrañado-dijo abrazandome por la cintura y pegandome a el.
-Y yo a ti-dije cogiendolo a el también por la cintura.
-Te he dicho que te amo?
-No lo suficiente.
-Te amo,te amo,te amo,te amo.-dijo dándome besitos.
-Y yo a ti pero para qué nos pueden ver.
-Andrea vamos a contarlo.
-Samuel un poquito más,porfavor.
Se separó de mi y abrió la puerta.
-Nos vemos luego-dijo enfadado. Se fue y me dejo allí, me sentí fatal,me salieron unas lágrimas.
(Samuel yo quiero contarlo pero es qué tengo la sensación qué mi mamá no le va a gustar)
Llegué al banco,no tenia ganas de ver a nadie asi qué le dije a Valeria qué anulara todas las citas.
(Andrea no te entiendo y no se qué te pasa,después del fin de semana qué hemos pasado pensé que cambiarias de opinión)
Terminé de trabajar y Samuel no habia llegado. Lo llamé pero no me cogía el móvil. Me fui a mi casa muy triste.Me duche y me puse el pijama,me tire en el sofa con SAMU y un bote de helado,puse la televisión pero no veía nada,sólo hacía que pensar en el.Llamaron a la puerta,abrí y allí estaba Samuel con una pizza.
-Puedo pasar?-preguntó Samuel. -No-me giré y lwe di la espalda. -Andrea necesito hablar contigo.
-Me giré y lo abracé-perdóname Samuel.
-Mi brujita te amo y voy a esperar el tiempo que digas,no quiero estar enfadado contigo-me agarró y me beso pasionalmente.
Tanto que caímos en el sofa y SAMU se asustó y ladro.Nos miramos y nos reímos.
-He pensado qué igual tenias hambre? -dijo Samuel.
-Ya estaba cenando-señale el bote de helado.
-Eso no es cena-dijo serio.
-Es mi cena cuándo estoy triste-dije haciendo pucheros.
-Estás triste por mi?-dijo acariciando la cara y dándome un beso.
-Si.
-Eso lo arreglo yo.
Me agarró y empezó a besarme,me cogió en sus brazos y me llevó a la habitación. Hicimos el amor,y nos dormimos.
Sonó el despertador y abrí mis ojos,mi sorpresa fue ver a mi mugrosito a mi lado.
-Samuel nos dormimos,levantate.
-Mi brujita-dijo dándome un beso.
-Samuel ahora que vas a decir de donde has pasado la noche.
-Puedo decir que pase la noche con una bruja qué me embrujo-dijo sonriendo.
-Ya Samuel,no seas tonto y levantate que yo llego tarde a trabajar-hice la intención pero el me agarró y volvimos hacer al amor.
Llegué tarde,sólo estaba Soledad y estaba muy preocupada por Samuel, porqué no habia ido a dormir. En éso entró el y dijo que tuvo una cena con un empresario y como bebió se quedó a dormir en un hotel.
Subí me duche y me cambié pero antes de irme al banco pase a saludar a mi brujita.
-Brujita ha sido una noche espectacular,podemos repetir está noche?-dijo acercándose a mi.
-No,muy buena escusa, pero ya,puedes venir y cenar pero dormir no. Aunque me encantaría despertarme todos los dias en tus brazos-dije besandolo.
-Sólo a cenar?-dijo con voz picara.
-Ya Samuel pueden entrar-dije dándole un beso.
-Te veo está noche mi amor-dijo dándome un beso qué me dejo sin respiración.
Pasamos todas las noches cenando y amandonos. Era el hombre más maravilloso del mundo y era sólo mio.Era muy feliz.
Un dia vino Irina que mi mamá salía con un hombre.
-Qué dices loquita?-pregunté.
-Si Andrea mamá últimamente se arregla mucho y sale a cenar,me lo contó Sofía.
-Ira a cenar con Miranda.
-No Andrea ,le envian flores.
-Bueno, mamá es muy bella y todavia es joven.
-Si y desde qué papa murió esta muy sola,sólo nos tiene a nosotras y al abuelo.
-Mientras ella sea feliz, me alegro-dije sonriendo.
-Andrea tu últimamente estás muy feliz-dijo Irina sonriendo.
-Feliz de la vida.
-Ahora la loquita eres tu -nos reímos.
Mientras en el rancho del Junco,Cayetana se arregló porqué tenia una cena.Sofía y el abuelo le preguntaron.
-Mamá a dónde vas?-preguntó Sofía.
-A cenar.
-Se puede saber con quien? -preguntó el abuelo.
-Ya se lo diré, pero me tengo qué ir qué se me hace tarde.
Cayetana salió y dejo con la palabra a Sofía y a Don Felipe.
-Abuelo ,mamá está muy rara-dijo Sofia.
-Sólo espero qué no se junte con mala gente-dijo el abuelo.
Cayetana llegó a un restaurante y entró, se acercó a una mesa y un hombre se levantó
-Hola Cayetana,tenia como caballero haber ido a por ti.
-No tranquilo,no quiero todavia qué sepan mis hijas y mi papá qué nos estamos viendo.
El hombre se acercó y beso su boca.
-Me alegro qué estés a mi lado-dijo dándole un beso en su mana.
-Y yo contigo, Emilio Valverde.
