Caos (2# Incandescente) #PGP2016 #STA2016 #Wattys2016 #TBAwards #PRAwards

Capítulo 4

Siento la tardanza!!!! Las vacaciones han sido intensas, pero espero poder actualizar amenudo a partir de ahora. Gracias a l@s que leeis, comentar que os parece.

¿Qué tal el verano?

Por cierto, ¿alguien que me recomiende alguna historia de wattpad? Ultimamente me he aficionado a las de hombres lobo, pero estoy abierta a sugerencias, aunque no me van las romanticonas.

En fin, gracias por leer!!!! :)

Zafir

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Capítulo 4

Miré por la ventana nada más levantarme de la cama, eran las siete en punto, como cada mañana desde que me presenté a la entrevista en Arette, la cartera se retrasaba, bufé despotricando mentalmente de los funcionarios impuntuales.

-Ahí está. -Murmuré. Apreté mis dedos contra el borde del alfeizar con la mirada fija en el par de cartas que sacaba de su bolsa. Sin esperar a que cerrara el buzón me lancé hacia las escaleras lo más rápido que mis piernas me permitían. Abrí el buzón y miré el destinatario de las cartas, suspiré decepcionada al comprobar que ninguna iba dirigida a mi persona. Fui a la cocina a desayunar, mi padre ya estaba ahí leyendo el periódico. La tía Aqua estaba haciendo tortitas para sus pequeños y glotones retoños.

-Últimamente madrugas mucho. -Señaló mi padre mientras bajaba el periódico para observarme con detalle. Me encogí de hombros a modo de respuesta y cogí una manzana roja del frutero con desgana.

-Y ya no devoras el desayuno de tus primos. -Gruñó Aqua, aunque en su caso por supuesto, ese gesto no se señalaría como un gruñido, ella era una "dama", no gruñía, simplemente lanzaba venenosos dardos plagados de reproche.

-Y mi tránsito intestinal ha descendido en movimiento. -Mi padre no pudo reprimir una sonrisa que tía Aqua eliminó con una dura mirada. Murmuró algún reproche más mientras acababa de preparar el desayuno. Justo a tiempo el sonido del estómago de Gabriel se escuchó desde el final del pasillo.

-¡Tortitas, genial! -Su fantástico humor era desquiciante. -Últimamente nos haces grandes desayunos mamá.

-Siempre los he hecho, pero cierta bestia salvaje -la mirada que me dedicó me perforó la frente, me toqué entre las cejas por si me había dejado un orificio-arrasaba con vuestros desayunos. -Rodé los ojos, afortunadamente mi tía no vio aquel gesto que habría clasificado como de mal gusto.

-Déjala, algunas aún tienen que seguir envejeciendo. -La pulla de la recién llegada Laila dio pistoletazo de salida a lo que se predecía como un "fantástico" día. Bufé y me fui al jardín a por algo de intimidad.

Volví a suspirar, un hábito que últimamente forjaba demasiado mi personalidad, le pegué el último mordisco a mi manzana y la lancé contra el tronco del árbol más próximo que encontré. Le di justo en el centro con toda la velocidad que mi frustración alimentaba. Una punzante energía me hizo darme la vuelta completamente en guardia.

-No quería interrumpir tu clase de tiro. -Electro apareció con las palmas de las manos izadas en son de paz. Me crucé de brazos mientras lo evaluaba desconfiada. Al ver que no pensaba aportar nada siguió con su propósito. -Solo quería disculparme por lo que sucedió cuando me encontrasteis.-Retorció sus dedos en un claro gesto de nerviosismo que podría haberse considerado como adorable, no fue mi caso, simplemente lo anoté como un posible punto a mi favor si se desencadenaba una futura disputa.

-¿No era tu intención? -Ante mi afilada pregunta abrió los ojos horrorizado.

-Por supuesto que no. -Asentí sin dejar de evaluarlo.