¿Hasta el final? [Everlark]

2: La captura

POV Peeta:

-Mis ojos tantean alrededor para ver si distinguen a Katniss. Estamos aquí en la arena. Todo es un caos y solo se escuchan disparos, explosiones, gritos, llantos, gemidos de dolor y eso es todo.

Aún no se qué va a pasar o qué me depará el futuro en estos Juegos, solo estoy al tanto de lo que ya sucedió. Mi chica en llamas incendió literalmente este sitio tras darle con una de sus flechas -gracias a su buena puntería- al campo de fuerza "magnético" que rodea el área donde se desarrolla el entretenimiento para Snow.

Yo solo me preocupo por encontrarla, encontrarla bien, encontrarla viva.

No puedo creer que si quiera piense que hay una posibilidad de que esté muerta. Aunque se que es remota se que está presente esa opción.

Trato de ocultar la preocupación que me invade aunque seguro que los gestos que esboza mi cara en este momento me delatan. Sitúo la vista por sobre la multitud pero nada. No hay rastros de Katniss.

Mi corazón comienza a latir aceleradamente al pensar que quizá no la vuelva a ver; jamás pude decirle lo que verdaderamente pienso acerde ella, acerca de nosotros.

Nosotros. Me ecanta pensa en Katniss y en mí como uno solo.

Una bomba cae a mi lado y me saca de mis cavilaciones. El impacto que ejerció la explosión  hizo que cayera a unos metros de allí.

Mis ojos celestes como los de la pequeña Prim se ponen vidriosos cuando miro hacia abajo.

Cada vez siento más cerca la posibilidad de tener que guardarme para mí el te amo que quiero decirle a Katniss.

Me levanto y tomo entre mis manos lo que encontré en la tierra.

Lo que jamás eperaba presenciar acababa de pasar.

Flashback.

Era el primer día de entrenamiento para prepararnos para los juegos. Katniss entrenó su puntería con flechas y cuchillos y yo practiqué como camuflarme con pinturas hechas de plantas que pudiera encontrar fácilmente en la arena.

Claramente el potencial de Katniss era mucho mayor y podría desarrollar sus habilidades más fácilmente puesto que al menos tenía habilidades.

La vi a Katniss en un rincón afilando las puntas de las flechas y noto que juguetea con algo que tiene entre sus dedos.

Es algo de metal porque noto el brillo que emana cuando la luz fosforecente que se posa sobre Katniss choca contra él.

Me acerco lentamente para poder darle un buen susto pero cuando estoy a punto de tocarla me dice con voz burlona:-¿Qué quieres Peeta?, se que estas ahí.

Admito que no soy bueno asustando a las personas, lo que es más que obvio y reitera su pregunta acerca de qué necesito.

Le digo que solo quería ver la pequeña cosa que tenia entre sus dedos y ella con un tono gentil me lo da y me explica que una señora humilde se lo dio cuando pasaba por el mercado y preguntaba acerca de su precio.

Es un pequeño pájaro de metal revestido en pintura color cobre. Ella me dice que es un sisajo al notar la confusión en mi rostro frente a ese peculiar ave del que no había oído.

Fin del flashback.

Era el sinsajo de Katniss. Lo reconozco casi al instante. La pintura está algo saltada en algunas partes por todo lo que tuvo que pasar.

Simplemente lo contemplo y lo guardo.  Es lo único que me queda de ella. Y al parecer lo único que me quedará.

POV Katniss:

Estoy demasiado concentrada buscando a Peeta como para notar que todo es un caos. Y es por mi culpa.

Solo hay gritos y bombas caen por todas partes, pero eso sigue sin importarme demasiado.

Peeta es mi prioridad o al menos la de mis ojos entumecidos por las lagrimas que resbalan tras no encontrarlo.

De pronto veo que alguien me pide ayuda a unos pocos pasos de mi, una parte del campo que he destruido está sobre ella.

No puedo evitar sentirme responsable así que me acerco a ella.

Según se es Johanna Manson, la única vencedora del Distrito 7 que aún está con vida. Su brazo está ahora teñido de un color rojo intenso a causa de la sangre que emana de sus heridas.

Sin importar las ganas que tengo de ayudarla, no puedo distraerme.

Simplemente le digo que lo siento y comienzo a correr.

Fue muy descortés de mi parte pero Peeta está por sobre ella. Y por sobre cualquiera de esta arena, inclusive yo.

Tropiezo con una persona que creo está muerta, y termino a unos metros con una herida en mi pierna; técnicamente solo me doblé el tobillo, lo que no puede considerarse una herida así que me paro y corro. Por Peeta.

Yo corro. Y continúo corriendo.

Hasta que recibo una pequeña bala, en mi antebrazo, luego otra en mi pecho y otra en mi pierna.

Es entonces cuando asumo que es el fin. Que todo acabó para mí y que mi muerte solo conllelvará el sonido del cañón y la imagen de mi cara en el "cielo".

Pero luego recuerdo que yo destruí el campo magnético y que ya no hay más cañón.

Ahora solo hay caos y gritos.

Pierdo la conciencia luego de see víctima de alguien con ansias de ganar, aunque ya no haya algo en lo que vencer.

...

Despierto me encuentro en la cama de una habitación sobria, pintada de blanco, simple y que solo tiene la cama en la que yace mi cuerpo ahora mismo. Y una pequeña mesita a mi lado en la que hay una rosa blanca.

Mis ojos se centran en la delicada flor que solo crece en los jardines del capitolio. Sus pétalos ya se están cerrando nuevamente, tras haber sido cortados hace quién sabe cuánto.

Es en ese momento cuando comprendo todo.

Estoy en el Capitolio. Bajo el techo de Snow y eso significa que debo cumplir las artimañas que -seguro- tiene planeadas para mí.

Su techo, sus reglas.

Snow me capturó y me había llevado lejos de Peeta. Mejor dicho, me llevó al infierno.

...

Noto que aun llevo mi ropa de la "batalla", pero algo me falta.

Tanteo mi cuerpo hasta que noto la ausencia de la única cosa que me había dado fuerza.

Mi sinsajo.