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Me dirigí a la puerta pensando quien podría ser tal vez algún funcionario del Hotel abrí la puerta y me congele solo pude ver a Justin quien evito mi mirada luego vi al resto de los chicos solo me limite a susurrar su nombre
—Justin —dije y suspire
—Lo siento sé que no quieres verme pero ellos me obligaron a venir —dijo con la cabeza abajo y las manos en los bolsillos
Suspire no podía seguir con esto lo tome de la mano y lo jale conmigo —Ven conmigo —lo lleve a la habitación mientras los demás se quedaban en la sala cerré la puerta con seguro detrás de mí y me dispuse a pedir disculpas
—Mi amor lo siento perdóname yo no quise decir eso —me aproxime un poco a el Justin seguía mirando sus zapatos —Justin mírame —le pedí
— ¿Para qué? —pregunto con frialdad
—Justin yo necesitaba acostumbrarme a no verte todos los días a no abrazarte todos los días a no besarte cuando quisiera y si tu venias no podría acostumbrarme y tu insistías en venir y no sabía cómo decirte sin que tu pensaras que es ridículo y bueno últimamente no pienso con cabeza fría me arrepentí en el instante en que lo dije pero tú no querías hablar conmigo Justin te extrañe mucho y que no me hables me duele más que ser expulsada puedo vivir con eso pero no con que tú me ignores con eso no puedo —lo abrace pero sus brazos seguían en sus bolsillos una lagrima bajo por mejilla al no ser correspondida —Justin yo...—dude en decirlo no sé si él estaba preparado para escucharlo pero 5 meses con él me bastaban para decirlo así lleváramos menos de un mes de novios yo me había enamorado de el hace mucho tiempo entonces me di cuenta que no podía dejarlo ir porque se había convertido en todo para mí en lo único que me importaba —Justin yo Te amo —suspire mientras me secaba algunas lagrimas me di la vuelta iba a salir corriendo no quería ser humillada cuando el dijera que el a mi no o algo parecido pero fui detenida por su brazos en un segundo mis labios se encontraron con los suyos era un beso dulce sentí a Justin sonreír entre el beso me estrecho contra sus brazos lo mas que pudo me beso con suavidad con todo el amor que podía imaginar en realidad disfrute del beso extrañaba sus labios y la sensualidad de ellos
—No sabes hace cuento tiempo yo quería decirte lo mismo pero tenía miedo de que no lo sintieras y te alejaras de mi lado yo también Te amo mi princesa —dijo uniendo nuestras frentes
—Perdóname —solloce un poco
—Shhh no digas nada eso ya quedo en el olvido —me dio un beso pequeño sobre los labios —Ahora solo importamos tú y yo bueno —asentí y sonreí mientras me abrazaba
—¿Como supieron donde estaba? —pregunte confundida
—A tu hermana no se le puede negar nada estuvo con tu abuelo dos horas hasta que el accedio a decirle donde estabas —sonrio y nego con la cabeza
—Bueno pues me alegra que se lo haya dicho —sonrei y le di un pequeño beso sobre los labios lo habia extraño demaciado y solo habia pasado una semana
—Vamos con los demás —dijo antes de tomarme de la mano y ambos salimos de la habitación
—Casi que no salen —dijo Alejandra burlona
— ¿Qué hacían? —pregunto Laura con picardía
—No somos tan rápidos —le respondí de la misma manera y luego me reí
—Bueno y ¿Qué vamos a hacer? —pregunto Ryan levantándose del sofá y los demás lo imitaron
—No sé, ¿Qué quieres hacer? —me pregunto Justin con una sonrisa
—En realidad no conozco muy bien Londres así que no sabría decirte que quiero hacer —hice una mueca y luego sonreí
—Vamos se me acaba de ocurrir algo —dijo Justin saliendo del apartamento yo volví a mi habitación tome un bolso y la cámara y volví a salir los demás ya estaban en el estacionamiento Justin estaba solo en su auto y los demás en el de Ryan subí junto a Justin mientras arrancaba

—Me contaron que el entrenador se peleo con el abuelo eso es cierto —le pregunte divertida
Justin rio tal vez acordándose de la escena —Bueno es que cuando el entrenador se entero que no estaría más en el equipo se puso como loco y el día de la competencia de tu hermana pues exploto y le empezó a decir que si no me devolvía el puesto pues el no llevaría al equipo al campeonato y otras cosas —se empezó a reír
—Entonces te devolvieron el puesto —lo mire y el asintió con una sonrisa — ¿Cómo te sientes? —le pregunte
—Normal en realidad no serlo al menos por unos días me ayudo mucho para ver quienes eran en realidad mis amigos y quienes querían solo un poco de diversión —levanto los hombros
—Hablando de eso Valeria volvió a buscarte —gire los ojos
—Mi vida hahahahaha porque te pones así con solo mencionar su nombre —se giro para mirarme — ¿Acaso no confías en mí? —me pregunto y pensé que la sola pregunta era ridículo él sabía que si lo hacia
—Tú sabes que si pero como te lo puedo decir —me quede pensando por un momento como decirle que tenía miedo de que el volviera a ser el mismo de antes como explicarle ese miedo
—Con palabras —me sonrió
Suspire y luego hable —Es solo que —dude por un segundo tal vez creería que era ridícula por decir eso pero al fin y al cabo necesitaba decirlo —No quiero que vuelvas a ser el mismo de antes y bueno Valeria tiene mucho que ver en esa parte
—Princesa la única persona sobre este mundo que logro cambiarme fuiste tú se a que te refieres con lo de "el mismo de antes" pero ten la seguridad de que eso no va a suceder —tomo mi mano entre las suyas y deposito varios besos en ella
— ¿Me lo prometes? —le pregunte
—Te lo prometo —me guiño el ojo
La carretera estaba libre no había mucho tráfico hacia un poco de frio como todas las mañanas en Londres pero era un frio le daba un toque de paz al ambiente todo se sentía más relajado como un dulce sueño en una noche de lluvia aun así la brisa era fuerte y golpeaba empecé a visualizar una gran rueda muy parecida a la rueda de la fortuna pero mucha más grande las cabinas eran mucho más grande para varias personas me pregunte si tal vez nos dirgiíamos allí tenia curiosidad de saberlo pero sabía que no me responderían así que solo me limite a esperar
—Llegamos —dijo Justin quitándose el cinturón y estacionándose
—Vamos a la gran rueda de la fortuna —pregunte emocionada mientras bajaba del auto
—No se llama así se llama London Eye y si halla vamos —dijo mientras tomaba mi cámara y me sacaba algunas fotos ante mi expresión maravillada de aquella estructura tan fascinante
Me gire para verlo su rostro estaba concentrado en la pantalla de mi cámara adivine lo que estaba viendo su rostro no mostraba expresión solo su mirada penetrante sobre aquella fotos me acerque un poco al notar mi cercanía levanto la mirada me entrego la cámara y fue a reunirse con los demás solo lo mire desconcertada no creí que actuara de esa manera por unas simples fotos suspire antes de seguirlo no llego hasta donde los demás solo se para enfrente de la gran estructura luego se cruzo de brazos aproveche me acerque más rápido lo abrace por la espalda y recargue mi mentón en su hombro
— ¿Estas enojado verdad? —le pregunte al no obtener respuesta alguna de su parte procedí con la explicación —Recuerdas a Emily —de nuevo solo obtuve silencio —Bueno se que la recuerdas el chico de las fotos es su hermano mayor se llama James es muy amable y bueno Emily prácticamente me obligo a conocer un poco Londres con el porqué estaba deprimida y bueno estaba tan emocionada por ese museo que por eso mi cara de pastel en las fotos pero no veo el motivo porque te enojes
—Yo quería llevarte quería ver tu expresión cuando lo vieras —bufo y suspiro
—Te enojaste por James o porque no fui contigo —le pregunte burlona
—Ambas cosas pero principalmente porque yo quería llevarte —se rio
—Justin...me asustaste —le di un golpe en la espalda y me aleje
—Hey ven acá —me jalo —Es que últimamente hacerme el dramático tiene sus beneficios —se rio de su propio comentario y me uní a su risa
—Solo te aprovechas —me reí —Bueno y que vamos a hacer aquí
—Pues nos subiremos al London eye —levanto los hombros
—Hahahahaha estas bromeando no —le pregunte viendo la altura de la estructura no le tenía miedo a las alturas pero esto era otra cosa
—No claro que no a eso vinimos —como acto de reflejo escondí mi rostro entre su cuello y me aferre a él un poco
— ¿Tienes miedo? —me pregunto mientras se reía a carcajadas
—No, no tengo miedo es solo que bueno es un poco alto no crees —hice una mueca
—Bueno si pero es divertido ya verás —dicho esto me tomo de la mano y fuimos con el resto de los chicos
Luego de una fila un poco agotadora subimos a las cabinas del London Eye se movían lento pero era divertido mire de reojo a Alejandra lo suyo no eran las alturas me pude dar cuenta que sudaba y su expresión era un poco graciosa pero a la vez preocupante me acerque a ella mientras tomábamos alturas y Alejandra suspiraba y mantenía la vista sobre sus zapatos
—Estas bien —le pregunte divertida mientras ella levantaba su vista
— ¿Tu qué crees? —me pregunto sarcástica —Pero no le digas a ninguno de los chicos estaré bien lo prometo bueno estoy tratando de omitir algunos pensamientos de mi cabeza
— ¿Cuáles? —pregunte
—Bueno el principal es que en cualquier momento habrá un terremoto y todos moriremos —me vio con una sonrisa
—No digas eso —le dije alterada
—Bueno ya no lo digo pero...—empezó a decir
—Pero nada solo cállate y disfruta de la vista —le pedí entonces empecé a visualizar algunos puntos de Londres —Oh por dios mira el Palacio de Buckingham —me emocione y me acerque más a la ventana —Es hermoso
—Espera a que lleguemos a la punta la vista es hermosa —me dijo Justin arrastrándome a su lado
Luego de un rato de recorrido por fin llegamos a la cima la vista era hermosa se podía ver todo Londres desde allí nunca había visto algo parecido y estar acompañada de las personas más importantes para mí lo hacía aun mas especial tome algunas fotografías rápidas desde la punta pues la rueda jamás se detiene pero gira muy lento por lo que no hay peligro de nada luego de media hora por fin estábamos abajo
—Bueno eso estuvo increíble pero tengo hambre —dije tomando mi estomago con ambas manos para luego recordar que no desayune nada antes de salir del hotel
—Si yo también vamos a comer —dijo Justin antes de tomarme la mano y guiarme hacia su auto
— ¿y a dónde iremos? —pregunte con curiosidad
—Depende ¿quieres algo fino o algo sencillo? —me pregunto mientras ponía en marcha el auto
—Sencillo —respondí sin vacilar
Luego de un rato llegamos a un restaurante un tanto sencillo tal y como lo había pedido ordenamos entre risas y bromas el silencio reino algunos minutos mientras calmábamos el hambre pero luego dio paso a las risas de todos los extrañaba mucho de eso me pude dar cuenta me contaron las buenas nuevas del internado pero nada importante solo chismes y nada mas luego fuimos al hotel llegamos un poco cansados pero a mi hermana se le ocurrió la idea de ver la película de el exorcismo de Dorothy Mills así que lo de descansar seria para después
—Bueno voy a ir a preparar palomitas —dije antes de entrar a la cocina mientras los demás se acomodaban en la sala, saque varios paquetes de palomitas para microondas y empecé a destaparlos cuando sentí a alguien rodear mi cintura con sus brazos
—Hoy no hemos tenido tiempo para nosotros —dijo Justin depositando pequeños besos en mis mejillas
—Mi amor no solo tú me extrañas —sonreí y seguí con mi tarea
—Pero tú eres solo mía —me dijo antes de girarme y tomarme el rostro con ambas manos —Mía —susurro lento y despacio enfatizando la palabra
—Yo no soy un objeto —dije un poco molesta por la autoridad que había tomado sobre mi
—Ya lo sé mi vida sabes que no me refería a eso —me vio con cara de arrepentimiento —A lo que me refiero es que bueno tú tienes una parte de mi corazón por eso eres mia —dicho esto me beso con mucha ternura como si tuviera miedo a perderme lo abrace lo más fuerte que pude tratando de aliviarlo y por fin el miedo desapareció dando paso a algo mucho más fuerte
—Te amo —susurro sobre mis labios
—Yo te amo mas —sonreí
—Eso no es posible —me dio pequeños besos
—Entonces empate —levante una ceja y sonreí
—No eso no me gusta yo siempre gano —dijo con orgullo
—Justin —reproche
—Está bien, está bien —ambos empezamos a reír a carcajadas como niños pequeños pero fuimos interrumpidos
—Lamento interrumpirlos pero de verdad queremos ver la película —Alejandra sonrió mientras tomábamos latas de gaseosa de la nevera y volvía a la sala con ellas en la mano
—Ok ya vamos —le dije antes de que saliera y puse las palomitas en el microondas luego de que salieron agarre una y le puse salsa rosada en una esquina
— ¿Qué haces? —me pregunto Justin confundido
—No las has probado así saben mucho mas rico o con salsa de piña delicioso —me lambi los dedos que me había untado de salsa
—No pero bueno ya veré a que saben —dijo siguiéndome hasta la sala
Me senté junto a Justin en medio del gran sofá a mi lado estaban Alejandra y Chris y junto a Justin Laura y Ryan le puse play a la película y esta empezó la historia se desarrollo lento al principio pero luego le di paso al miedo abrace un cojín en algunas partes de la película subí mis piernas al sofá y las abrace junto al cojín si yo estaba asustada Chris y Alejandra estaban peor sentía saltar a Alejandra a mi lado todo el tiempo en una parte de la película Laura grito y se tapo el rostro yo solo me quede con el corazón en la mano me había asustado mas su grito que la misma escena mi corazón latía a mil por hora y tuve que recostarme en el espaldar para recobrar el aliento mientras los demás le reprochaban a Laura por casi habernos matado del susto
—No quiero seguir viendo la película —le dije a Justin sobre su cuello mientras me abrazaba a el
—Mi amor ya casi se va a acabar —me sobo al espalda mientras reía
—No me gustan este tipo de películas —bufe mientras los demás me callaban
—No te preocupes no va a pasar nada —Justin susurro sobre mi oído
La película término un poco tarde di gracias al cielo que hubiera terminado para poder ir a dormir estaba demasiado cansada
—Bueno y cómo vamos a dormir —pregunto Alejandra levantándose y bostezando
—Pues mi cama es bastante grande podemos dormir nosotras tres hay y bueno no se cual de los niños va a dormir aquí y los otros dos en el cuarto —levante los hombros
—No pienso quedarme aquí solo —dijo Chris negando con al aveza
—Yo menos —dijeron Justin y Ryan al tiempo
—Pero en la cama del otro cuarto no creo que quepan los tres —hice una mueca
—Ale quédate aquí conmigo —le dijo Chris a Alejandra
—Claro que no, no pienso quedarme aquí —ale hizo una mueca
—Bueno tendremos que acomodarnos los tres entonces —dijo Ryan nosotras solo reímos y fuimos a dormir sin siquiera despedirnos de ellos
Al llegar al cuarto nos cambiamos rápido omitimos cualquier tipo de conversación y solo nos limitamos a acostarnos me acosté en el medio quede profundamente dormida pero en medio de la noche empecé a escuchar algunos ruidos unos provenían de afuero y otros de la misma habitación mi corazón empezó a latir a mil por hora y empecé a sudar decidí despertar a las chicas para ver si era solo mi imaginación
—¡¡¡despierten!!! —las moví a ambas
— ¿Qué paso? —pregunto enfadada Alejandra
—Shhh escuchen —les pedí a las dos entonces el ruido volvío esta vez provino desde adentro del armario
— ¿Qué fue eso? —pregunto Laura asustada
—No lo sé deberíamos mirar —les dije
—Estás loca no pienso bajarme de esta cama —dijo Alejandra tomando una cobija y tapándose la cara
—Bueno entonces esperen...Ryan...Ryan —empezó a llamar Laura —Justin...Chris maldición los tres están dormidos —dijo Laura
—Hay no otra vez —dije mientras las tres nos abrazábamos al escuchar de nuevo el ruido
— ¿Qué hacemos? —pregunto Alejandra asustada
—No lo sé —respondimos Laura y yo de la misma manera
Entonces el armario en frente de mi cama empezó a abrirse lentamente las tres abrimos los ojos como platos ante aquel movimiento

Si Tan Solo No fueras Tan EgocentricoWo Geschichten leben. Entdecke jetzt