Capitulo 1

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El mundo es un concepto, tan sólo es una palabra para esconder nuestra incapacidad de captar lo que hay en el vacío, más allá de las galaxias...
Pero, en este concepto, grande de por sí, viajando a millones de años luz llegamos a una circunferencia con unas características poco usuales en el cosmos, es el planeta al que llamamos tierra, allí de manera inherente hay una raza muy peculiar, al analizarla, podemos notar su diferencia con las demás, caminan en dos piernas, poseen sentimientos de manera mucho más notable que en las otras razas y más aún, viven separados y en conflicto, como si no fueran hermanos. Cualquiera se percata que se habla de los hijos de los humanos.
Personas que desde su nacimiento son aparentemente indescifrables, por más que se eduque, o provenga de una noble familia, los hijos de los humanos, siempre querrán hacer lo que quieran, marcando una trayectoria de vida. O por lo menos eso es lo que aparenta a los ojos de los demás humanos.
Pero en medio de tantas personas conviviendo, existe alguien, el cual puede saber a ciencia cierta que será de la vida de una persona, incluso antes de que ésta vea la luz del mundo.
Se trata de Margaret, un ser que posee hermosos sentimientos, bellos ojos y un cuerpo esbelto, ella sin lugar a dudas en un humano similar a todos los demás. Su madre, la señora Rosa, era una mujer muy peculiar, dormía durante el día, poco se preocupaba por comer, y en las noches salía a trabajar, o esa era lo que ella decía cuando alguien le preguntaba, un jueves muy tarde de la noche salía de su casa y se dirigía a la calle las florecitas, allí conoció a alguien que le cambiaría la vida por siempre, Ricardo, un viejo de 65 años con arrugas ya marcadas en la cara.
Margaret ahora recuerda la descripción que su madre daba de aquel hombre, persona a la cual ella no pudo conocer, pero que según su madre aquel hombre era su padre, ese señor apareció un día cualquiera en la ciudad, nadie sabía nada acerca de su familia o donde vivía, era muy misterioso, algunos niños curiosos intentaron seguirle en varias ocasiones, pero siempre terminaban viendo una pelota o un pájaro y terminaban jugando con el objeto a tal punto de olvidarse de perseguir al viejo.
Nadie sabía cómo se las arreglaba el viejo por vivir, lo único cierto es que estaba allí en la ciudad, y fue así como por casualidad pasó ese jueves por las florecitas, calle donde frecuentaban mujeres que ganaban unos cuantos billetes a cambio de una aventura momentánea con algún hombre que pasara por allí.
-El viejo misterioso - susurraron varias mujeres mientras iba pasando por la calle, a él parecía no importarle, y de pronto voltea su cabeza y ve a una mujer con el pelo largo, ojos oscuros y tal cuerpo, que dijo: "Pero si eres perfecta", Rosa no se percató que era a ella a quien habían lanzado esa frase, dado que era muy común escuchar halagos a todas las mujeres de por allí. Así estando descuidada, sintió que alguien la tomó del brazo y al voltear, allí estaba él, el viejo misterioso...
Aquel viejo con un leve movimiento de la mano, sacó de su bolsillo derecho una cantidad considerable de dinero, que al verlo, se dibujó una sonrisa en el rostro de rosa, lo cual significaba un sí a la propuesta del viejo.
Ahora Rosa está en el Hospital San Francisco, han pasado 3 meses después del incidente con el viejo, tuvo retrasos en su período menstrual, lo cual la llevó a dirigirse al hospital en busca de ayuda, ella temía lo peor. Cuando era una pequeña juró por lo más sagrado que nunca tendría un hijo, le temía miedo al hecho de pensar que su hijos resultaran igual que su padre, un borracho y drogadicto.
Mientras recordaba cómo había su pasado, los incontables hombres con los que había estado, se preguntaba si realmente estaría embarazada y si así era quien sería el padre.
-La señora Rosa Sepúlveda- dijo una enfermera que salía de la sala de exámenes, Rosa se paró de su silla, contando los pasos como aquel criminal que camina derecho a la horca. -Señora Rosa - Repitió la enfermera. - Sí, diga Dr- Respondió Rosa.
-Felicitaciones, tiene 3 meses de emb...-
-Señora Rosa, Señora Rosa, por favor vuelva con nosotros
-¿Dónde estoy?
-Se ha desmayado usted- dijo un doctor
Ahora Rosa hacía memoria, ella había estado en el hospital y le habían dicho que estaba embarazada. Cuando recordó la palabra embarazo, se puso histérica y comenzó a gritar "No es posible, no es posible, no es posible..." lágrimas salían de sus ojos.
-Señora por favor cálmese- Le comunicó el doctor.
Al cabo de unas horas, Rosa salió del hospital muy angustiada, se dirigió a su casa, pensando en cuantos meses tendría de embarazo, contemplando la posibilidad de si aún podía detener ese embarazo. Contaba las horas para que llegara el día siguiente para realizar otro examen en el que determinarían cuantos meses de embarazo tenía.
Esa noche la pasó en vela, allí en su cama, miraba para arriba, se volteaba, se colocaba a leer una biblia que su abuela le había regalado, y así pasó hasta que en un momento en el que no se dio cuenta cayó dormida.
De pronto, despertó y miró el reloj y eran las 9 de la mañana, se bañó muy de prisa y salió para el hospital, minutos después se entera que tiene tres meses de embarazo.
Al oír esto fue como melodía para los oídos de Rosa. -Tan solo 3 meses- se dijo a sí misma. Salió del hospital y se dirigió a una farmacia cercana donde compró unas pastillas que le permitirían expulsar a la criatura de su cuerpo.
Una vez en su casa las consumió y esperó ansiosa abortar a su bebe. Pasaron las horas y no ocurría nada, Rosa pensó que de pronto con los días haría efecto, así que esperó un día, dos días, pasó la semana y no ocurría nada, fue entonces cuando se decidió asistir a un centro clandestino de abortos, después de pagar un dinero, la sometieron a una operación casera en la que extraerían el cuerpo del bebé, Rosa estaba consciente, y cuál fue su sorpresa al sentir en su vientre que dos manitos se agarraban fuertemente de su útero.
-Lo sentimos, no podemos extraer el cuerpo- Le comentaron 2 señoras que la atendían.
Rosa salió con una tristeza profunda en su corazón por no poder evitar aquel embarazo, más su preocupación era mayor al recordar aquellas dos manos que la habían agarrado. Tal era su desespero, que pasó 3 días sin probar bocado, tomaba agua y jugo de maracuyá que licuaba en la mañana.
Después de una semana, dio por entendido que tenía que encarar su situación, aunque estaba enfadada con ella misma, porque así no podía trabajar, ningún hombre se le acercaba. Sólo vivía con el resto de dinero que había ganado hacía tres meses con el viejo misterioso, y fue allí donde se acordó. Hace tres meses gané este dinero y este niño tiene tres meses.
-Ese viejo es muy misterioso, y este niño así lo es- Pensaba dentro de sí.
Después de 5 meses nació una preciosa niña a la cual decidió poner por nombre Margaret que significa hermosa como la perla.
Nació sin un defecto, ojos café, cabello negro, y un cuerpecito hermoso, los médicos dijeron que no había problemas con la niña, en sólo 2 horas dieron de alta a la madre con su niña.

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⏰ Last updated: Nov 09, 2015 ⏰

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El Cordon VioletaWhere stories live. Discover now