Capitulo 4: Vago al cuadrado

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Siendo honesto en un comienzo era divertido hablarle y me servía como desahogo hablarle a mi reflejo, pero solo duro unas semanas así, ya que cuando caí en cuentas de que no estaba bien (no era normal) y trate de hacerlo desaparecer sin tener éxito alguno y empeorando las cosas, al principio el solo aparecía en mi casa, pero luego empezó a aparecer en todos lados que hubiera un espejo o se viera mi reflejo y a veces solo me habla desde mi cabeza, me molestaba y hablaba en múltiples ocasiones dejándome al borde de la locura y sin saber qué hacer, pero luego de un tiempo me acostumbre a la locura y comencé a confrontar a mi reflejo, y un día como un demente total discutí con él y perdí el control al punto de que mi espejo pago el precio. Y así llegamos a esto, para simplificar mencionarlo llamémosle Sigfrido, como me nombraron en la red hace tiempo.

Tobi: Solo me pondré los audífonos y te ignorare.

Sigfrido: No es tan fácil, estoy en tu cabeza recuerdas puedes oírme aun con ellos puestos.

Tobi: así, entonces porque no hablabas mucho desde que rompí el espejo.

Sigfrido: Tome unas pequeñas vacaciones ¿sabes?, es agotador molestarte todo el día.

Tobi: Esta será una larga noche, ¿Podrías no hablar como has hecho todo este tiempo?

Sigfrido: No creo que pueda ya que veo que sigues como un ermitaño y necesitas compañía, aunque si me respondes algo puede ser que haga silencio.

Tobi: ¿Qué quieres? Saber si en serio volví a jugar, la respuesta es no, solo jugué una vez y fue todo.

Sigfrido: ¿Volviste a jugar? Ok eso si es interesante, solo quería saber si tú y Laura volvieron. -nunca lo había visto sonreír por algo que me beneficiara

Tobi: ¿Qué clase de alucinación eres? No deberías saber lo que hice todo este tiempo.

Sigfrido: Bueno, bueno pero ¿Volviste con Laura? Y si fue así ¿ya lo hicieron?- me di la vuelta para tomar una silla y encender el ordenador

Tobi: no hemos vuelto y debes saber la respuesta a lo segundo.

Sigfrido: Bueno, solo tenía curiosidad.

Tobi: ya te respondí, así que cállate.

Sigfrido: Ok, pero en realidad quería saber de la chica nueva.

Tobi: No, que no sabías nada...

Cuando mire hacia el espejo ya no estaba ahí, lo que me inquieto un poco más que si se hubiese quedado, pero no podía hacerlo volver ni siquiera sabía cómo lo había hecho volver. Esa noche no fue tan larga como lo que pensaba, pero al día siguiente no tendría tanta suerte.

A la mañana siguiente me dispuse a no dejarme ver por nadie, lo que no se me dio tan bien por culpa del tipo de mi Sigfrido y algunas fans que había en la escuela.

Sigfrido: ¿Qué te parece si vamos por algunas fans y...?

Tobi: no, eso es arriesgado. Es mi regla nunca te ligues a una lunática.

Sigfrido: Siempre tan cuidadoso, no quieres que la vecina se entere.

Tobi: .... (Como lo sabe este maldito)

Sigfrido: (Recuerda estoy en tu cabeza)

Tobi: ¡sal de ahí y háblame de frente!

En ese momento de unos arbustos salieron Carla y las gemelas.

Carla: ok, pero no tenías que molestarte.

Amy: sabes que hay muchas locas en los alrededores, cierto?

Ultimo CuartoWhere stories live. Discover now