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Cuando llego mi amiga, entramos para el patio.

< Que te toca ahora?

- Pues no lo sé, lo voy a mirar.

Saque la agenda de la mochila.

- Pues me toca mates.

< Te toca con la Gemma!

- Es verdad, no había caído, pues vaya, ya de buena mañana... voy a estar feliz todo el día.

< Si, jajaja, se van a acabar dando cuenta la genta jajaja, por que la miras mucho, y te pones roja.

- Ya, pero la gente también sabe que soy vergonzosa, y entonces se piensan que me pongo roja por eso...

< Ya, pero si también la miras... Bueno yo no te digo nada.

Sonó la alarma, y subimos las escaleras para llegar al primer rellano, ahí estaba Gemma esperando el ascensor, me vio, y me sonrió.

Subimos rápidas las escaleras y cuando lleguemos arriba, éramos las primeras, y al momento, se abrió la puerta del ascensor, y salió ella. Abrió mi clase, y entro ella y yo entre tras ella, y me dijo.

+ Que guapa que vas hoy.

- Tú sí que vas guapa.

Miramos para fuera y como no venía nadie, nos dimos dos besos.

- Bueno me voy a sentar en la mesa, porque si no como entre gente, y me vea hablando contigo, van a empezar a decir cosas..

+ Si, Jejeje.

- Pero, una cosa durante la clase, no me mires tanto, porfa, pro que me haces poner roja, y me entra la risa.

+ Es que no puedo evitar mirarte.

Me senté en mi silla, y saque las cosas de matemáticas.

Empezó la clase, de momento todo iba bien, no nos mirábamos mucho, y por hoy nadie me había dicho nada, hasta que se giró mi compañera de delante.

· Holi.

- Hola. :)

· Me han dicho, que te mola una personita...

- Si...., me mola un chico que conozco hace mucho tiempo.

· Ah..., es que a mí me han dicho, que no es ese chico...

- Y entonces, que te han dicho? Por qué, yo es con el único chico que hablo más, y que me junto más con él.

· No, es que precisamente, no me han dicho que es un chico, me han dicho que es una chica.

Gemma escucho lo que Laura decía, y me miró, yo le evite la mirada...

- Em... , es imposible... , a mí me gusta ese chico....

· Pues a mí no me han dicho lo mismo.

- Y vas a creer más lo que te diga la gente, que lo que te diga yo?

· No, pero es que me lo ha dicho una persona que confío mucho en ella, y jamás me engañaría...

- Me podrías decir quién es?

Noté como ella, miraba a Alba, que se sentaba detrás de mí.

· Bueno, no...

- No hace falta que me lo digas, ya se quien ha sido, no soy ciega.

Gemma vio que Laura no paraba de hacerme preguntas, y ella le llamó la atención.

La clase siguió, sin ninguna interrupción más.

Al sonar la alarma, me fui para la puerta de mi clase, a esperar al siguiente profesor. Gemma salió de clase y al salir me llamo. Cerró la puerta de mi clase (para que la gente no escuchara lo que me decía) y me dijo.

+ Porque la gente te pregunta tanto?

- No tengo ni idea, la gente se está montando historias en sus cabezas, y ya llevan días preguntándome cosas de este estilo.

+ Pero es que no entiendo por qué te tienen que decir que si a ti te gustan las chicas, cuando tú les estas diciendo que te gustan los chicos.

- Ya, pero la gente es así, cuanto más les dices que no es verdad, más historia se les construye en sus cabeza, y al final acaban por contárselo a un monto de gente, y luego a ti te van llegando cosas de diferentes personas...

+ Ya, me lo imagino, no creo que sea muy agradable que todo el mundo te vaya preguntando lo mismo, y luego que te digan que no saben si creerte.

- No, pero bueno es que a mí, si te digo la verdad, me da un poco igual que me pregunten. Ah, una cosa, hoy comes por aquí?

+ Si, tengo la mochila abajo con la comida.

- Bueno pues guarda bien tu mochila, que no hará falta que la cojas.

+ Por qué?

- Pues porque hoy, no comes por ahí, hoy comes en mi casa, que estoy sola, y me hace ilusión invitarte a comer, y más que hoy es miércoles, y no hay instituto por la tarde, y no hay tanta prisa para hacer las cosas.

+ Vale, y donde te espero?
- Mmm... Espérame en la calle donde me viste el otro día con mi amiga hablando.

+ Si.

- Pues ahí, espérame ahí, que yo no tardare en bajar, porque no quiero hacerte esperar demasiado.

+ No, tú tranquila, yo espero lo que haga falta...



ALGO INESPERADOUnde poveștirile trăiesc. Descoperă acum