Elena
Mientras esperaba aburrida en la cocina el timbre sonó y me levanté para ir hacia la puerta, al abrirla me encontré a un Jhon trajeado con un ramo de rosas rojas en sus manos. Un detalle muy bonito de su parte.
-Estas preciosa...-dijo Jhon sensualmente, aunque no sabría decir si eso fue un intento de ser sensual-
-Tu también estás muy guapo-
Los dos nos quedamos mirándonos hasta que yo tome mi bolso y salimos por la puerta. Claro sin antes tomar las rosas y ponerlas en agua.
-¿A dónde iremos?-dije cuando él estaba a punto de encender el auto -
-Es una sorpresa...ah se me olvidaba, ponte esto-
Jhon me pasó una venda y yo me quedé extrañada, lo mire y el me hizo una señal para que me la pusiera me la puse y el auto comenzó a moverse.
Todo el camino fue silencioso, yo no creo que sea lo correcto que la primera cita el me lleve vendada. Puede ser que me vaya a hacer algo malo como violarme o matarme y lanzarme por el bosque, el auto se detuvo y escuche como se desabrochaba el cinturón.
-¿Puedo quitarme la venda?
-Si, claro-
Me quite la venda y había un restaurante italiano, se veía acogedor.
-¿Porque tuve que ponerme una venda para esto?-
-Solo quería joderte-dijo con una sonrisa y lo fulmine con la mirada-
-Señor bienvenido.¿Ha reservado usted?-dijo un camarero con aire de irlandés que de italiano-
-Si.
Jhon dijo el nombre de la reserva pero yo estaba tan distraída admirando el restaurante que no me di cuenta de lo que dijo.
-¿Estás bien?...te noto muy distraída-dijo Jhon sacándome de mi mundo de fantasías-
-Si, claro...solo estaba pensando un poco en algunas cosas-el asintió y el camarero nos guió hasta nuestra mesa-
Era una mesa en una esquina del restaurante bastante privada. El nos pasó el menú y yo ya sabía perfectamente lo que iba a pedir. Lasaña a la boloñesa, mi favorita.
-¿Ya sabes lo que vas a pedir?-dijo Jhon sin levantar la mirada de la carta-
-Si...¿Tú?-el dejo la carta sobre la mesa y el camarero se acercó a nosotros-
-¿Que les apetece tomar?-dijo sacando el papelito donde apuntaba sus notas-
-A mí me gustaría una limonada-tomó mi orden y se dirigió hacia Jhon-
-Yo quiero un jugo de naranja-el camarero tomó su bebida-
-¿Ya saben que van a comer?-los dos asentimos-
-Yo quiero lasaña a la boloñesa por favor-el camarero asintió con una sonrisa...la verdad era lindo-
-Yo quiero pasta a la boloñesa-el camarero asintió y se fue-
-¿Te gusta la lasaña?-asentí-
Hablamos de cosas triviales hasta que llegó el camarero con las bebidas. Después de 20 minutos llegaron nuestros platillos y no podía negar que se veía muy apetecible. Mi lasaña se veía deliciosa, se me hacía agua la boca...parecía una niña cuando admiraba dulces desde el escaparate, adentre el tenedor para probar y estaba como me la imagine, deliciosa. Jhon y yo hablamos sobre nuestras metas, deportes y cosas así, aunque siendo sincera estaba más concentrada en mi lasaña que en el.
El camino hacia el coche fue muy rápido, hasta pareciera como si no quisiera estar más tiempo conmigo. Fuimos todo el camino en silencio excepto por la música que resonaba en el auto. Cuando llegamos a mi casa mire a Jhon esperando que siga algo o me cuente que le sucede. Me beso.
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Deseos prohibidos
Romance-¿Me podría dar un poco de leche?-pregunté acercándome hacia el- -Con gusto, pero para eso tendrías que ponerte de rodillas y buscarla por ti misma-dijo arqueando una ceja-