Capitulo 1

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Lydia había desempaquetado y guardado todas sus cosas en un satisfactorio periodo de una hora, había metido su maleta en una esquina de la habitación y sus libros estaban cuidadosamente apilados sobre el escritorio. No había nada personal a la vista. El espacio estaba libre de imágenes o recuerdos, sin embargo, a ella no le importaba. Nunca fue del tipo sentimental.

Era casi mediodía, ya que Lydia había llegado un poco antes para lograr acostumbrarse a su nuevo entorno antes de que el Campus se llenase de confundidos estudiantes de primer año y, si debía ser totalmente honesta consigo misma, quería también liberarse un poco de el drama inevitable que acompaña el proceso de divorcio. Sus padres tenían buenas intenciones, pero si debía ir a otras vacaciones tropicales sólo porque se sentían mal por haberla puesta entre dicho drama, su piel realmente se podría desprender por la excesiva exposición al sol.

Si fuera por ella, ella saltaría orientación completamente. Ya había terminado con su intento de mantenerse en lo más alto de la escala social. La universidad era un juego completamente diferente a la secundaria. No, su agenda de los próximos años consiste en tomar los cursos más difíciles que pueda, graduarse lo más pronto posible e ir directamente a obtener su doctorado por sus teorías matemáticas antes de finalmente ganar la medalla Fields por sus logros. Ese es el plan.

A Lydia le gusta ese plan.

Toma asiento en el limitado espacio del escritorio y resopla. Realmente hubiera preferido una habitación sola, pero entonces había recordado que podría usar a alguien para ayudarle a sobrevivir con algo más que fideos instantáneos y tartas. La cafetería prometía decepciones hasta el momento, por lo que el sustentarse estaba en sus propias. Lydia Martin tenía muchos talentos, pero lamentablemente la cocina no era uno de ellos. En este punto le rezaba a Dios que esta nueva compañera de piso no fuera una de esas que pasan todas sus noches con su descuidado novio que la distraería de estudiar.

¿Y si es mala en la cocina?

Lydia recogió uno de sus libros de texto que había traído desde su casa como lectura complementaria para sus clases. En las vacaciones ya había terminado de leer todos los libros para su curso de nivel superior. Sólo estaba un poco decepcionada de que aparentemente nada había cambiado desde la secundaria.

A mitad de capítulo once, la puerta de la habitación se abre violentamente, golpeando la pared detrás de él con un golpe sordo que le provoca a Lydia una mueca de dolor. Se pueden ver pequeños trozos de yeso en en suelo de la pared ahora dañada y así como así, cualquier esperanza que le quedaba sobre su situación de vida se había esfumado.


Una chica de pelo oscuro entra en su campo de visión, cargando con dificultad una maleta con obvio sobrepeso y múltiples bolsas de lona cuelgan de sus brazos. Lydia considera brevemente levantarse para ayudar, pero luego el desconocido tiene éxito en entrar todas sus cosas, aunque la fuerza hace que la chica caiga de espaldas sobre su trasero.

Lydia se quedó momentáneamente sin habla.

Entonces salió del trance y se apresuró al lanzar el libro a un lado para pasar así sobre el gran desastre sobre la chica. 

-¿Estás bien?.

La otra chica se sienta rápidamente, sus mejillas ya estaban teñidas de un rosa intenso cuando mira con ojos alarmados a Lydia 

-Oh, Dios mío, no tenía idea de que ya estabas aquí, siento mucho este lío.- se disculpó con urgencia, poniéndose de pie y tomándose un segundo para recobrar la compostura antes de darle a Lydia una sonrisa que hace sentir a Lydia conocerla de toda la vida.- Soy Allison, encantada de conocerte.- Estiró su mano hacia Lydia- No soy tan rara, te lo prometo. Es sólo que mi papá estaba nervioso sobre el envío del equipaje, por eso todas estas... cosas.- Gesticuló hacia la montaña de bolsas tendidas en el piso de su dormitorio.

-Lydia.- le dijo la pelirroja, estrechando su mano y tomando notas mentales sobre lo alta que es Allison.- ¿Necesitas ayuda?


-Honestamente, no tengo la energía para desempacar toda esta mierda ahora mismo, pero me muero de hambre. ¿Quieres ir a un café o algo así?

Una hora más tarde, Lydia había aprendido que Allison es hija única que vive con su padre soltero (a quien quiere mucho) en San Francisco y que cuenta con una extensa colección de armas de fuego con licencia en una de sus múltiples bolsas de lona. También se enteró que  su compañera de cuarto era una cocinera medianamente decente (¡Si!). Y que quiere especializarse en la educación para poder enseñar a los niños de primaria. No le gusta el champiñon pero siempre ordena pizza con piña.

Lydia podría decir que serán ser grandes amigas.





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⏰ Última actualización: Dec 07, 2015 ⏰

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