sieben.

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Me senté en la barra y me tomé el chocolate caliente y después me comí el croissant. Luego me subí a mi Mercedes negro, conduje hasta el campo de entrenamiento del Bayern Múnich, me estacioné en el mismo lugar de siempre, junto a mi lugar de estacionamiento estaba el lugar de Bastian, ocupado por su Mercedes. Ya estaba aquí, casi corrí hasta los vestidores ahí estaba él ya cambiado sentado con los codos apoyados en las piernas y la cabeza entre las manos.

No podía dormir –dijo con voz triste- así que decidí venir antes, pero cuando llegué aun no estabas, así que pensé que por primera vez llegarías a la hora que es el entrenamiento.

Bastian, yo siempre llego a las 9 –dije en voz baja mientras me cambiaba.

¿Puedo preguntar por que? –dijo él levantando la cabeza e irguiendo la espalda.

Tengo muchas cosas que explicarte –dije mientras me abrochaba los tacos.

Salimos al campo a correr, estaba comenzando a asomarse el sol de entre las nubes cuando comencé a decirle como me sentía cuando comenzamos a cambiar el estilo de juego y después cuando Pep me dijo que me mandaría a la banca por Thiago y después como comencé a sentirme cuando amanecía sin ganas de entrenar y hasta fastidiado y aburrido.

Luego de media hora corriendo, hicimos los estiramientos juntos. Y fue entonces cuando terminé de explicarle todo.

¿Por qué nunca me contaste a mí? –dijo él visiblemente triste.

Hermano, te lo quería decir pero nunca parecía un buen momento –le dije casi desesperado- por favor Bastian perdóname, yo no sabía cómo ni cuándo, ayer cuando te fuiste me sentí como el imbécil más grande de la tierra por no haberte dicho. Espero y puedas perdonarme.

No sabes como la pasé yo también ayer, cuando llegue a casa Sarah me preguntó que tenía, no pude soportarlo y se me salieron las lagrimas, le conté todo lo que escuché y ella me dijo que tenía que dejar que me lo explicaras, que somos mejores amigos y debería de haber una explicación lógica para todo –dijo él- hermano ahora sé lo que sintió Woodinho cuando Mario se fue del Dortmund.

Perdóname por tanto hermano –dije mientras rodaban lagrimas por mis mejillas.

No te preocupes hermano –dijo el pasando su brazo por mis hombros- yo solo quiero que seas feliz, y mira no es como si nunca vayamos a jugar juntos de nuevo, nos queda media temporada juntos y la selección, el mundial en el verano. Nos queda tanto hermano.

Hay que aprovechar esta temporada al máximo –dije sonriendo y limpiando mis mejillas- ganar cosas y en el Mundial bueno, hacer lo que sabemos.

Lucirnos –dijimos los dos a unísono.

Bueno no sé porque sospecho que Bastian ya sabe –dijo Manu entrando al campo.

Si, ya le conté todo –dije asintiendo.

Bueno ahora tenemos que hacer que este chico se luzca más que nunca para que lo compre un buen club y pueda hacernos competencia –dijo Bastian dándome unas palmaditas en los hombros.

Cuando mi futuro equipo te gane no quiero que estés llorando Schweinsteiger –dije riendo.

Oye y ¿Cuándo hablaras con los directivos? –preguntó Manu.

Hoy después del entrenamiento, Karl me llamó ayer para pedirme que me quedara después a ver lo de mi renovación –dije pasándome una mano por el cabello.

No saben lo que les espera –dijo Bastian.- te daré un consejo hermano, diles que te irás si no ellos van a sentir que los excluyes.

Bueno pues mínimo Thomas ya sabe que algo te traes –dijo Manu encogiéndose de hombros- pero Mario ni lo huele.

Se los diré hoy, lo prometo –dije levantando mi mano derecha.

Hoy el entrenamiento fue algo raro, cuando llegaron Mario y Thomas, los junte a todos, mis cuatro fantásticos. Y les dije que me iría al final de la temporada, que ya no renovaría. Ellos no reaccionaron mal pero se sacaron mucho de onda. Estuvieron muy pensativos durante los primeros cinco minutos y luego todo volvió a la normalidad, luego del entrenamiento nos metimos a las duchas y me puse mi misma ropa de la mañana, me despedí de mis amigos y ellos me desearon suerte. Caminé al edificio de las oficinas con mi mochila en el hombro y mis manos en los bolsillos.

Buenos días Sr. Kroos –dijo la recepcionista- el Sr. Hopfner lo esta esperando en la sala de juntas.

Seguí a la rubia por todo el pasillo hasta llegar a una puerta doble de madera, era la tercera vez que venía a este lugar  y las otras dos veces venía muy emocionado. La chica tocó la puerta dos veces.

Adelante –dijo la voz de Karl dentro.

Buenas tardes señores –dije entrando y saludando a cada uno.

Buenas tardes Toni –dijo Karl estrechando mi mano.

Había seis hombres en la sala, uno Karl, otro Pep, Volker mi representante y otros tres que no sabía sus nombres pero ya lo había visto. Yo me senté junto a Volker.

Toni ya sabes para que te queremos aquí, queremos extender tu estadía en el Bayern Múnich –dijo Karl con una carpeta de piel bajo las manos- queremos que juegues para esta institución más tiempo.

Te tenemos una gran propuesta en este contrato que tenemos aquí –dijo un hombre de cabello blanco- denle un vistazo los dos.

Nos pasó una carpeta y comencé a leerlo, me ofrecían un sueldo mejor que el que pedía, mas porcentaje de imagen, y bueno una cantidad de mejores muy buenas. Yo solo miré a Volkery el asintió.

Karl, Pep, señores directivos tengo que decirles que no quiero renovar –dije serio y poniéndome de pie- de hecho, quiero salir del club esta temporada.

¿QUE ESTAS DICIENDO KROOS? –Gritó Pep enseguida.- no puedes hacer eso.

Lo siento mucho, Karl no tienes idea de lo agradecido que estoy por todo lo que has hecho por mí, yo aquí he crecido, mi adolescencia y juventud la pase en estos campos defendiendo este escudo –dije mirando al presidente del club que me miraba con ternura, como un padre ve a su hijo cuando este le dice que se va de la casa- este lugar es más que mi hogar, pero ha llegado la hora de salir y conocer nuevos lugares, nuevas ciudades, nuevos clubes, ustedes me dieron mi primera oportunidad, la oportunidad de mi vida y por eso quiero ofrecerles el poder ganar dinero con mi venta este verano, no quiero tener que irme como agente libre.

El no puede hacer eso –dijo Pep hablándole a uno de los hombres que no conocía y este solo levanto la mano en señal que se callara. Casi me dieron ganas de reír.

Toni, hijo. Te he visto crecer más que tus padres, has estado aquí desde los once años te quedaste en la residencia hasta que cumpliste los dieciocho y pudiste mudarte solo y no hay cosa que me gustaría más que seguir disfrutando de calidad de jugadores como tú, pero entiendo tu punto y quieres salir y descubrir de que tanto eres capaz –dijo con una sonrisa melancólica mirando con sus ojos azules- me duele tu despedida pero me encantaría hacerte feliz y si quieres salir este verano, saldrás este verano. Espero algún día volver a verte  vestido de rojo con el escudo del Bayern pegado al corazón. Te quiero mucho Toni.

Mil gracias por todo Karl –dije acercándome a abrazarlo- me diste la oportunidad de mi vida.

Y tú no la desaprovechaste –dijo correspondiendo mi abrazo.

Me colgué la mochila al hombro de nuevo y camine a la puerta.

Que pasen buenas tardes caballeros –dije en modo de despedida.

Me encamine a mi coche, ahora a esperar que llagaran ofertas, cuanto desearía que el Madrid ofertara pero para eso tengo que hacer un buen papel esta temporada y en genial papel en el Mundial de Brasil.

Something Better. | Toni KroosWhere stories live. Discover now