Al Final (NaruSasu//The Last)

Recuerdos lejanos

_"Es suficiente"

_"¿Que quieres decir?"

_"¡Estoy arto de ti!

..Naruto.

_"¡¿Como puedes decir eso?!"

_"¿Como no decirlo? ..."

... Naruto!

_"Me das asco... Te odio".

_"No.."

_Despierta!

_¡No!

_...

_-Habrió de golpe los ojos al notar que estaba en un lugar diferente, al de su sueño, claro, el que había estado teniendo hasta hace apenas cinco segundos- Sa.. ¿Sakura-chan?

_Tienes el sueño muy pesado Naruto. -Decía con un deje de irritación- Te he estado llamando hace horas, estabas sudando mucho y ya empezaba a preocuparme -Cambio a un deje de tristeza-

Fue cuando Naruto se dio cuenta que tenia algo en la cabeza, un paño mojado.

_Yo amm.. Lo-lo siento Sakura.

_No lo sientas.. ¿Estas bien?

_Emm.. -De repente un flash back se hizo presente dentro de su cabeza..
"Me das asco..."

_Por supuesto -sonrisa- Estoy mas que bien, sólo es como tu dices, tengo el sueño pesado, dattebayo.

_Pues.. -hablo la pelirosa- Apresurate entonces. Tienes que ir a trabajar.

_Mh!

esde que empezó a ejercer el puesto de Hokage, Sakura solía cuidarlo cuando Hinata no estaba. Ya que, sin un asesoramiento debido, el rubio no se despertaría solo ni con un despertador o el sonido de la naturaleza en la mañana. No. Naruto debía ser gritado y hasta aveces zarandeado para habrir los ojos. No entendian como podía dormir tan profundo. Tal vez el puesto de Hokage le estaba estresando... Lo mas raro era cuando en sueños hablaba y esas cosas, nadie sabia que pasaba por esa subconsciencia.

En estos momentos Hinata había sido asignada a una misión de varios días, dejando a Sakura en su lugar, siendo tanto amiga como asistente del rubio, tenia la plena confianza en ella para hacerse cargo de su esposo en su ausencia.

La misión que él le había asignado era de bajo rango, claro, ya que a su propia esposa no la dejaría a merced del peligro.

Esposa... Claro. Se había casado con ella sólo porque no le había quedado mas que aceptar que no había otra solución, además, Hinata era una mujer maravillosa. Atenta, hermosa, femenina y una mujer que podría criar de la mejor forma a sus hijos. Todo lo que alguien podría desear...

Excepto él.

Su corazón aun anhelaba a alguien que no era su esposa. Alguien que había amado bastante tiempo en el que había tratado de reprimir ese sentimiento. Sin lograrlo.

La consciencia aun le carcomía, diciéndole cosas como "¿eres feliz? ¿Estas seguro de que fue la mejor decisión? ¿Aun piensas que podrás alvidarlo acostándote con alguien que no amas? Aun hay tiempo... Aun puedes".
Pero él mismo se lo volvía a repetir.

"Ya es tarde para siquiera intentar"

Aún recordaba él día en que se dio cuenta de sus sentimientos.. Si hubiera sabido que en ese entonces tenia oportunidad, no estaría pasando todo esto ahora... Seria feliz.

Ese día, la conmoción lo lleno tan de pronto que casi se lanza de un puente... Si tuviera uno cerca, claro.

///Flash Back///