Una historia de amigos- Mario Ruiz y Zayn Malik

|Capitulo 1| Segunda Temporada

-Hahaha Mario, basta- dije corriendo por toda la sala de la casa, nos acabábamos de despertar, Mario y yo nos encontrábamos en nuestras cómodas pijamas de batman, pero Mario ya no tenia la camiseta gris con el logo de la caricatura, ahora su torso bien marcado estaba libre. Estábamos preparando pancakes, apenas comenzábamos, estaba abriendo el sobre de pancakes cuando Mario coloco sus manos en mi cintura y me empezó a hacer cosquillas, accidentalmente la bolsa se abrió soltando su contenido hacia arriba, Mario quedo con toda la harina en su rostro, yo exploté en risa, el tomó la bolsa que contenía la mezcla y intento tirarla en mi rostro, esta era la razón por la cual corría.

Al final los dos terminamos llenos de harina.

-Amor no estaría nada mal meternos en la piscina - Dijo mirándome, yo asentí.

-El ultimo que llegue limpia el desastre en la cocina - Dije corriendo, Mario corrió inmediatamente, era obvio el corría mas que yo, pero ya tenia mi truco.
Vi que el estaba por llegar a la piscina, hací coloque mi plan en acción.

-Mario,Mario,Mario, me duele mucho- Dije quedándome y tambaleandome, Mario obviamente se devolvió rapidamente.

-¿Que? ¿Que te pasa? ¿Donde te duele? - Pregunto angustiado.

Iba a salir corriendo para tirarme en la piscina, pero al parecer Mario se percato de que solo era una broma para que yo pudiera llegar primero.

Apreto mi cintura hacia su cuerpo, quedando un poco en el aire, el se limito a reír, mientras yo me esforzaba por tocar el verdoso césped.

-Te amo mi enana - dijo y beso mi cabello.

-yo mas mi amor, pero ya bajame -
Dije, acaricie su rostro y luego trate de soltarme pero era inútil.

Llegamos a uno de los bordes de la piscina y luego se aventó conmigo a la piscina.

-El agua esta fría - Chillé

-De que hablas esta calentita- dijo mirándome y acomodando su cabello que ahora se encontraba todo hacia atrás, colocándolo en su posición normal.

-Hoy iré a ver a mi sobrino ¿Vienes?- Pregunte peinando algunos de sus cabellos rebeldes.

-Bueno ¿Paso por ti? - Pregunto

-Si- Sonreí.

Mario se acerco a mí, me tomo de las caderas y me alzó al aire, Dios mio, no debo pesar nada, con la facilites que me alzó esta comprobado que soy como una hoja de papel.

Me bajo a la piscina nuevamente, pero dejo sus manos en mis caderas, yo coloque las mías en su cuello.

-No te imaginas lo feliz que soy a tu lado- me dijo, yo le sonreí.

-Yo mas,bebe, gracias por estar siempre a mi lado, por siempre juntos- dije y escondí mi cabeza en el espacio que hay entre su hombro y su cuello.

-Por siempre y para siempre- dio un beso en mi cabeza.

Recordé el trabajo - Mario apurate, tenemos que ir a trabajar - grite

-Mierda, hoy tengo que firmar el convenio de publicidad con un cliente- dijo exaltado.

-Que esperas vamos, ducha policial- dije salimos de la piscina corriendo, a la pobre rosario le tocaria un trabajo duro gracias a nosotros por mojar los pisos de la casa, nos dimos un rápido baño y nos vestimos rápidamente.
Luego fuimos al garaje por el auto y nos fuimos hacia mi empresa que quedaba cerca a la de Mario hací que no había tanta demora.
Cuando llegue entre a la empresa, no sin antes despedirme de Mario, camine rápidamente por los pasillos deseando buenos días a los trabajadores, tomé el ascensor y subí al ultimo piso donde era mi oficina.