El diario de Cacerin

1 de mayo 1892-Miercoles

Ese fantasma parece que me acosa,ya no es como los anteriores días que me asustaba muy de vez en cuando y solo era para avisarme, parece que desde esta mañana se ha enfadado(aun más)
con migo.
Todo ha empezado nada más despertarme :

Me he levantado porque me sentía como si me hubiera meado encima(mojada) y llevo mi mirada cansada y adormecida a mi camisón blanco,no antes sin quitar la manta, y veo que yo y toda mi cama estamos manchados de sangre no mía porque no me dolía nada. Pegué tal salto de la cama que termine en el suelo empotrada contra la puerta,
me volví a mirar el camisón mientras me levantaba con la mano en la cabeza por el golpe y ya no estaba ni la sangre de mi camisón ni la de la cama, el caso es que me había parecido tan real... Estuve como ausente a la hora del desayuno maquinando cosas, ideas, simples pensamientos... Un poco de todo, pero mis padres no lo notaron, casi nunca me prestan atención.

Hoy si he ido a la escuela pero he hecho caso omiso a las explicaciones de los maestros, igual que ante ayer nadie se me acerco se me paso rápido.

Al llegar ha casa me tuve que aclarar la garganta porque llevaba sin hablar varias horas, aunque tampoco es que hablara mucho en mi casa.
Hice la tarea que me habían mandado los profesores y fui a la cocina con mi madre me daba demasiado miedo estar sola, estaba pensando si dormir con ellos. Cenamos todos juntos y pregunte a mis padres si podía dormir con ellos mi padre me dijo que no pero mi madre me dijo que si aunque las dos fuéramos bastante mayores todavía nos gusta dormir las dos juntas.
Asi que ahora mismo mi madre me esta observando desde mi cama arropada hasta el cuello y metiéndome prisa para que me acueste con ella de una vez.