Capitulo 6

309 23 12
                                    

Narra Pablo:

20 minutos para salir al escenario, tengo unos nervios que no son normales, ya he calentado la voz, ya he echo lo que siempre hacía para tranquilizarme pero no consigo hacerlo.

Lolo: eh, ¿qué te pasa?

Porty: ¿tan nervioso estás?

Yo: ya no solo son los nervios por el concierto de hoy, es que no puedo dejar de pensar que esto se acaba mañana, estos viajes tan largos mañana se acaban en México, tengo miedo a no saber vivir sin la música.

Antonio: venga pablito, anímate, precisamente porque son nuestros últimos conciertos deberíamos disfrutarlo al máximo.

Yo: tenéis razón, pues a disfrutar al máximo chicos.

Mamá: así se habla hijo.

Yo: ¡mama! Menos mal que te veo, no te he visto en todo el día.

Mamá: lo se, nos fuimos a conocer sitios y como tu tenias una reunión pues hemos aprovechado.

Yo: me parece genial.

Esperanza: Pablo, 10 minutos y entras.

Los nervios vuelven a mi, no sé porque estoy así de nervioso, nunca me había puesto así, y me resulta extraño.

Mamá: mucha suerte mi niño, disfruta muchísimo y relájate.

Yo: gracias mama.

Se va para su lugar asiento y los chicos y yo nos vamos detrás del escenario, oímos los gritos y los pelos se me ponen de punta, creo que aun estoy en una nube, no me creo que vaya a dar un concierto en los Ángeles con tanta gente gritándome para que salga.

Esperanza: Lolo, Porty, Antonio, salir ya.

Salen y se oyen muchísimos más gritos, empiezan a sonar las primeras notas de está permitido y sé que dentro de nada me va a tocar salir a mi, cierro los ojos e inevitablemente veo a Alina ¿por qué a ella?

Esperanza: ¡vamos Pablo!

Salgo corriendo mientras canto, intento mirar a muchas de las personas que están aquí, pero mi mirada se detiene al ver esos ojos que tanta confianza me transmiten, me quedo helado ¿Alina?, ella me sonríe y todas las preguntas me aprisionan la cabeza, ¿ella sabía quien era yo? ¿Por qué no me ha dicho nada? No lo entiendo.

Sigo cantando todas las canciones, me emociono en gracias, no puedo evitar llorar al darme cuenta en donde estoy cantando y el cariño que estoy recibiendo a pesar de estar a cientos de kilómetros de España, de mi país.

No dejo de mirarla, me mira con los ojos llorosos, supongo que también está emocionada, pero yo tengo que hablar con ella, tengo que saber porque si sabia quien era no me ha dicho nada.

Termino vívela y las lagrimas vuelven a mi, me despido de ellos casi sin palabras, estoy agotado, sudado y con muchas dudas en la cabeza. Salgo directamente al camerino necesito verla, pero no se como voy ha hacer eso.

Lolo: ¿¡esa no era Alina!?

Yo: si, era ella.

Porty: ¿que hacia aquí? No entiendo nada.

Yo: me dijo que no sabia quien era.

Alina: creía que era lo que necesitabas.

Oigo su voz detrás de Lolo, el se aparta y puedo verla, con cara de preocupación pero a la vez con su hermosa sonrisa.

Lolo: bueno, pues nosotros nos vamos.

Antonio: ¿que nos vamos? ¿Por qué?

Lolo: ¡he dicho que nos vamos Antonio!

Cree en ti (Pablo Alborán)Where stories live. Discover now