|Capítulo 6|WIMB?

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― Nos vemos a la salida ― Me despido de Abril y tomo rumbo hacia mi clase con el fin de hablar con Ángel sobre la cita.

Ángel está sentado en su lugar hablando con Steven. Supongo que es un tema serio ya que parece que mi amigo está discutiendo y el otro chico solo se dedica a reír.

― ¿Qué pasa? ―Pregunto en cuanto llego frente a ellos. Steven me sonríe mostrándome una hilera de dientes y se marcha a su lugar sin decirme nada.

― Él está detrás de todo esto ― Gruñe Ángel. Yo lo miro con el ceño fruncido y comienza a explicarme.

Es imposible que Steven sea un brujo o utilice magia negra. Es ILÓGICO.

― Estás loco ― Le digo en cuanto deja de hablar sentándome después en mi lugar.

― Ya sabía que no me creerías.

―Él no pudo haber hecho eso― Niego sacando mis libretas tomando una pluma esperando que el profesor llegue.

― Es cierto. Ya una vez lo ha hech... ¿Sabes qué? Olvídalo.

Me encojo de hombros despreocupado y comienzo a apuntar en la clase rogándole unas cuantas veces a Ángel que haga lo mismo.

Después de refunfuñar un rato, acepta.

En cuanto las primeras clases terminan mi amigo sale en dirección al comedor de la escuela. Yo me quedo recogiendo mis cosas hasta que levanto la vista encontrándome con una chica de cabello lacio café claro, algo delgada y baja que me mira tímidamente. Es linda, pero no tanto como Abril.

― Soy Jessica ― Me estira su mano en forma de saludo y yo se la estrecho sin saber qué más hacer.

― Ángel― Me presento. Sonrío y guardo lo último que ha quedado en mi banca.

― Bueno, yo, Mmm... ― Se muerde el labio nerviosa mirando hacia todos lados.

― Aja ― Le indico que prosiga.

― ¿Quieres salir conmigo?

Ángel P.O.V.

Corro por los pasillos buscando con la mirada a Steven pero en vez de él me he encontrado a Jake que si mal no recuerdo, quería un consejo mío o algo así.

― Y bien ¿Qué sucede? ― Le pregunto cuando está a un lado de mí.

― Bueno, me gusta una chica ― Suelta de la nada, tardo un poco en procesar las palabras.

No soy bueno dando consejos, Ian es el que los da pero como Jake piensa que soy mi mejor amigo ahora quiere un consejo mío.

He terminado por convencerme de que Steven está detrás de todo.

Me ha mandado mensaje al celular de Ian dirigiéndose a mí como Ángel. Es suficiente prueba para asegurar que él planeó todo.

Después de la confesión de Jake me quedo callado unos segundos pensando que diría Ian ahora. Opto por lo más fácil.

― Díselo ― Tomo de su hombro, tal como lo hace Ian cuando nos da un consejo.

― ¿Crees? ― Me pregunta no muy seguro. Asiento y le sonrió. Jake me sonríe de vuelta.

― Claro.

― Es que... ― Rasca su nuca ― . La chica es muy diferente a las demás.

― ¿Quién es? ― Le pregunto curioso. Debe ser una chica bastante buena para traer así al chico que tengo a mi lado.

― Va a clases con Abril. Se llama Hanna.

Y me congelo en mi lugar.

Hanna... La chica de la cual me enamoré por primera vez, por la cual yo estaba decidido a tener una relación formal, por la cual dejaría de ser como soy.

Ella no era para mi, claro está, pero si mi amigo es feliz, entonces yo también lo soy.

Decido darle un consejo sobre mi parte.

― Acércate e invítala a salir, como amigos. No vayas rápido con la chica, o se irá asustada.

Jake sonríe satisfecho para después abrazarme y dirigirse al comedor a lo que supongo, hablar con Hanna.

Un escalofrío recorre mi cuerpo deteniéndose en mi cabeza.

Me dirijo al baño de hombres un tanto preocupado. Mis ojos se abren de par en par en cuando descubro un pequeño mechón rubio entre mi cabello.

¿Qué está pasando conmigo?

Ian P.O.V.

― Yo bue-bueno ― Tartamudeo sin saber qué contestar.

La decisión que estoy a punto de tomar podría afectar o beneficiar en un futuro a Ángel. La chica es linda, tiene unas cuantas cosas que el rubio busca en una mujer y se ve buena persona pero... No sé que hacer.

Si acepto salir con ella, en cuanto se lo cuente a Ángel podría matarme. Pero si no acepto, la chica se iría con el corazón roto y en realidad no quiero romper el corazón de nadie. Nunca.

― Está bien.

Jessica se sonroja dejando un beso en mi mejilla para después darme su número y quedar un día.

Van a matarme. Y aún soy joven para morir.

― ¡Hey! ― Me llama lo que me parece la voz de Steven por el pasillo.

Me giro hacia él y lo saludo con un gesto de cabeza.

― ¿Qué tal Ian? ― Me dice en cuanto llega hasta mi.

― Hola Steven ― Le regreso el saludo con una sonrisa para después fruncir el ceño.

Un momento.... ¿Cómo me ha llamado?

― ¿Cómo me has llamado?

― Ian ― Se encoge de hombros sonriendo como lo ha hecho en la primera clase.

Ángel tenía razón. Steven está detrás de todo ésto.

― Por Dios. ¿cómo? ¿Cuándo? ¿Por qué?

Estoy hablando demasiado rápido. La adrenalina comienza a recorrer mi cuerpo y no creo que sea algo bueno.

― Necesitaban ayuda.

― ¿Por qué? ― Vuelvo a preguntarle.

― Ángel es un egocéntrico sin razón alguna y tu... Pues, necesitaba una persona nueva.

― ¿Cómo? ― Frunzo el ceño confundido.

― Nada.

― ¿Puedes remediarlo? ― Le miro suplicante. Steven ríe y niega con la cabeza.

― Tienen que arreglarlo ustedes solos.

― ¿Cómo? ― Mi voz toma un tono desesperado.

Suspira.

― Ese es el chiste de todo ésto pero te diré.

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SIBLINGS | WIMB? © EDITANDOWhere stories live. Discover now