Decepcion

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Bella despertó con el sonido del celular. Tanteo la mesa de noche y lo encontró. Tanteo los botones y lo apago. Se quedó un momento más y puso sus dedos en el reloj para ver la hora. 6:59. En unas horas estaría frente a él. Pidiéndole una oportunidad.

Se había enterado de las audiciones por medio de un maestro de la academia  de música en donde daba clases de piano. El piano la había salvado, la música la había salvado. Se levantó despacio. Caminando segura. Conocía el pequeño cuarto como la palma de su mano. Sabia exactamente donde estaba todo. Camino los 20 pasos hacia el pequeño baño y abrió la ducha, espero que el agua se entibiase porque en esa pensión jamás estaba caliente. A menos que fuera verano y el agua salía horriblemente caliente proviniendo de los tanques al sol permanentemente. Se bañó rápidamente y salió. Se secó el cabello con el secador de pelo. Uno de los pocos lujos que su trabajo le permitía.

Camino los cinco pasos hasta el pequeño armario. Encendió las luces y parpadeo. Los médicos le decían que era un reflejo pero ella estaba segura de distinguir luces y sombras y a veces hasta de ver algo borrosamente. Claro que no podía pagarse un estudio verdadero sobre su condición. Conocía toda su ropa al detalle, su mejor amiga la compraba con ella. No importaba lo que tomara todo combinaba con todo. Tomo una camiseta térmica de la pila, luego un suéter y unos pantalones. Bajo la mano y encontró las medias y la lado sus botas de piel. Se vistió y se peinó de nuevo. No usaba maquillaje, todos le decían que era muy bonita al natural.

Tomo su bolso, su abrigo y su bastón y salió. Su cuarto era el único en la planta baja de la pensión. Siguió por el pasillo 30 pasos hasta que se topó con el borde que anunciaba la cocina de la pensión. Lo bajo con cuidado y comenzó a tantear. La gente solía cambiar las cosas de lugar o dejar sillas

_ buenos días Bella _ dijo Maureen la dueña de la posada

_ Buenos días Mau_ dijo ella con cariño, ella era una buena mujer, amorosa y que cuidaba a sus inquilinos. Marureen le sirvió una taza de su café especial y le dejo algo al lado de su mano

_ es para que tengas fuerza hoy en la audición con el señor Rouge _ le dijo y Bella pudo notar la sonrisa en su voz. Toco suavemente para descubrir un trozo de pastel. Lo acerco a su nariz y olio las deliciosas manzanas recién orneadas.

_ Gracias Mau_ dijo ella sinceramente.

_ si ese hombre te escucha no podrá decirte que no_ dijo la mujer sentándose en la mesa con ella

_ él no toma alumnas mujeres, pero voy a poner mi empeño en que me escuche_ dijo ella decidida. Ya no le temía a nada en la vida, lo peor ya había pasado y como decía su madre "cuando lo peor ha pasado solo viene lo mejor". Se emocionó ante el recuerdo de su madre. La extrañaba demasiado.

_ Estas muy bonita hoy Bel_ le dijo Ronald el marido de Maureen

_ Gracias Ron_ susurro ella en su taza y sonrió ante el cariñoso apodo.

Desayunaron conversando tranquilos un largo rato.

_ el taxi está esperando linda, ¿seguro tienes dinero suficiente para ir y venir?- pregunto Maureen amorosamente

_ Si Mau pero gracias por preguntar_ dijo ella y se dirigió a la salida

_ ten cuidado con la nieve nena_ dijo Ron

Ella salió de la pensión y el frio viento la golpeo. Su abrigo no era demasiada ayuda. Camino hasta que el taxista dijo

_ Señorita permítame_ la tomo del codo suavemente y la guía dentro del taxi.

El hombre que se llamaba Edward tenia puesta una suave música en el radio. Ella solo cerro los ojos y disfruto de la melodía. Después de todo no podía hacer nada más.

_ señorita llegamos _ dijo el hombre sacándola de su ensoñación

_ ¿cuánto es?_ pregunto ella

_ 65 dólares_ dijo el y ella suspiro. Eso eran dos horas de clase en la academia. Saco el dinero de su bolso cuidadosamente separado. La tercera pila era de diez, conto 7

_ quédese con el cambio y gracias: _ dijo ella

_ Muy amable señorita_ dijo él y se bajó del taxi para ayudarla a bajar.

_ ¿ este edificio es el 1037 de la calle Conrad?_ pregunto ella

_ si señorita, solo camine derecho hasta encontrar el escalon y luego hay.... Cinco más allí esta la puerta_ dijo el hombre sintiendo lastima por una chica tan bonita.

_ gracias_

_ ¿ tardara mucho? Si lo desea la puedo esperar..._ dijo el amablemente

_ no sabría decirle Edward pero si consigue algún viaje hágalo yo lo llamare cuando salga_

_ Muy bien preciosa, hasta luego_ dijo el amablemente.

Ella camino tocando la vereda con cuidado. Llego al escalón y toco despacio subiendo los demás. Luego camino unos pasos y su bastón toco la puerta. Pudo divisar un tono dorado borrosamente.

Sintió que alguien abría

_ ¿ señorita puedo ayudarla?_

_ vengo a la audición con el señor Rouge _ dijo ella suavemente

_ Oh..._ dijo el hombre sorprendido_ es que solo han venido hombres..._

_ Por favor..._ susurro ella

_ está bien pero no diga que la deje pasar no quiero que me echen_ dijo el hombre tomándola del codo suavemente

_ Muchas gracias_

_ Cuando salga del ascensor de unos pasos y estará frente a una puerta a su derecha está el timbre_ dijo el hombre mientras la dejaba dentro del ascensor y tocaba el botón del ático.

_ Muchas gracias de verdad_

_ Suerte bonita_ le dijo el hombre con simpatía.

Ella sentía su estómago retorcerse mientras escuchaba el suave zumbido del ascensor. Toco su reloj eran las nueve en punto. Cuando llego al piso sintió la campanilla y salió con cuidado , camino suavemente hasta que el bastón se topó con algo y estiro la mano a la derecha. El timbre sonó melodiosamente.

La puerta se abrió de golpe y alguien dijo molesto

_ ESE TIPO ES UN DIOTA_ y lo sintió pasando a su lado bruscamente sin pedir disculpas. Estiro la mano y sintió la puerta abierta y entro. Cerro la puerta tras de sí.

_ NO RECIBO MÁS AUDICIONES_ la sobresalto una fuerte voz a un lado del lugar.



Melodia secretaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora