Cap.47

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Capítulo 47*CAPÍTULO FINAL*
Narra Mario:
—Me estas destrozando _____(tn). Si lo que quieres es romper mi corazón, continúa, lo estás haciendo bien.
Su mirada furiosa se posó sobre mí, y en dos pasos estaba su mano golpeando fuertemente mi mejilla.
—¿Cómo carajos tienes el descaro de hacer esa pregunta Mario?, me has hecho pasar por cosas horrendas. Me has dejado inmovilizada en una cama, sin poder sentir mi estómago. Has llegado a casa con perfume de mujer – su voz se quebró, y comenzó a sollozar- me has culpado de tener un puto amante cuando sabes que no puedo dejar que otro me toque. ¡Y tienes la poca cara de decir que te estoy lastimando cuando yo aborté a mi propio hijo en el baño de la casa! -quedé sin respiración hasta que ella continuó hablando- Si tu estas muriéndote de tristeza, ¿Qué me queda a mí, Mario? Todo lo que eh amado lo eh perdido, ¡por tu culpa! No me dejas vivir, no me das la posibilidad de volver a empezar mi vida, de tener una verdadera familia. Me has dejado sin esperanza, y sin ganas de vivir. Y ¿sabes qué?, ya casi no siento mi corazón de tan hecho mierda que lo has dejado. ¡Quiero que te largues de mi vida!, ¡Que hagas lo que se te dé la gana!
Me tomó por la camisa, y fijó su mirada en una lágrima que corría sigilosa por mi mejilla. Posó su mano en ella, e hizo una leve caricia. Ante tal gesto de ternura, mis labios se curvaron hacia abajo, dando índice a mí llanto.


—¡Quiero que te largues....!
—...Basta por favor....
—...¡Que salgas de mi vida!.
—No, no sigas.
—Pero, ¿Cómo pedirte eso si cada vez que te siento cerca me muero de amor, Mario?
Mis ojos volaron desde el suelo hacia los de ella. Un brillo especial resplandecía en ellos, y mis ojos maricas seguían derramando lágrimas.
—...¿Qué?
—Te amo tanto, que me cuesta caminar.
Mi mirada ilusionista, se convirtió en grata sorpresa. ¡Ella me amaba!. Estaba tan contento, tan lleno de felicidad que tenía ganas de salir corriendo como en la primaria gritando ''ella me ama''.
Sabía que ella me amaba, pero escucharlo de sus labios era...
—Pero tengo miedo. –afirmó.
—Si te hace sentir mejor, yo también.
—¿Qué haremos Mario?
—¿En el mañana?, no me importa. ¿En el ahora?, solo bésame.

Narración Normal.
Y así fue.
En una eterna promesa de amor, se besaron.
Sus labios hacían su propia historia mientras sus corazones se juntaban....como almas gemelas.

Richard.:
—¡Me está saliendo todo mal, y es tu maldita culpa!- dijo Richard alterado.
—¡Yo hice lo que pude!. Bien sabes que los quiero separados.- contestaron al otro lado del teléfono.
—Tenemos que encontrar una manera de destrozarlos.
—Ya intentamos todo Richard. Fotos y videos falsos, claramente su amor es mucho más fuerte.
—¡Su amor y una mierda!, los voy a destruir. Voy a recuperar lo que es mío, y me vengaré por los años de burlas. Van a conocer quién soy yo, y tú me vas a ayudar.
—¿Por qué diablos no te rindes?, acéptalo. Ellos se aman, y nada de lo que inventes tú o Luke los va a separar.
—¡Cierra la maldita boca!. Ya basta de niñeras. Estoy segura que la adorable ________(tn) hará lo que le digamos, si su amado Mario, está en peligro de muerte.- Sonrió malévolamente.
—¿A qué te refieres Richard?
—Ya lo verás Cecilia...ya lo verás.

Narra Mario.
Sus suaves labios. Mi dulce perdición. Alejaba el dolor, quitaba preocupaciones, y por un segundo me transportaba a alguna especie de palacio feliz.
Si, tonto. Pero era lo que sentía al besarla.
La manera en que me había enamorado de ella. La manera en que desde que la conocí solo existió su hermosa cara, sus sinceros ojos y su fresca sonrisa.
Cómo esas maripositas se sentían muy extrañas, y después totalmente normales.
Cómo con el pasar los días, sentía que era algo aburrido el amanecer con la misma mujer, hacer lo mismo...todos los días, y aun así seguir amándola.
Me había vuelto un maldito sentimentalista, cuando, al levantarme la veía toda despeinada, usando mis camisetas. Me quedaba horas y horas como un estúpido observando su cara al respirar, y cuando la molestaba, tocándole suavemente la punta de la nariz, y ella adormilada me la corría con la mano.
Estaba perdido. En todos los sentidos. Estaba cagado hasta la punta de los pies, no quería perderla, y al mismo tiempo, me sentía más enamorado que nunca.
— Hazme un favor...— susurró, sacándome de mi hechizo al besarla.
— No me pidas que pare. No de nuevo...No ahora.
— No. No, solo... Quiero que iniciemos terapia de pareja.
— ¿Qué? — su petición me descolocó por completo, y me alejé un poco de ella, para mirarle los ojos.
Sonreí. Los labios hinchados. Esta era mi chica. Solo mía. Hinchada por mis labios, desesperada por mis caricias. Loca, paciente, honesta y humilde. Y era afortunado de tenerla. A de más de ser bella, hermosa e incomparable...era la mujer más noble y confiable del mundo.
— Bueno...,a raíz de lo que ha pasado yo...eh pensado, que necesitamos terapia Mario. Definitivamente algo está mal...tengo...tengo miedo de que ocurra otra vez y yo...— su voz se quebró, y antes de que le diera tiempo de nada, la abracé.
— Estoy muy arrepentido — tragué en seco— Yo sé que te hice daño, y no solo físicamente. Pero también se, que me amas, que te amo, y que no podemos estar separados _________(tn). Yo te necesito, como nunca eh necesitado a nadie. Te amo. La única mujer que eh amado para toda la vida. Si, cometí errores imperdonables, pero te juro, desde el rincón más sincero de mi corazón, que estoy arrepentido. Y que nada de lo que hice, lo hice consiente. — ella acarició mi cabello, mientras sus ojos se cargaban de lágrimas...y los míos los imitaban.
— Yo sé que estás arrepentido...pero, mi miedo es no poder olvidar.
— No sé cómo pude...— largué un sollozo, y me enteré en su cuello, mientras volvía a llorar en sus brazos. Ella me consoló...me acarició la cara, el pelo, y nos acurrucamos en la cama, ella sobre mi.
— ¿Confías en mi Mario? — dijo en un susurro casi inaudible. Levanté la mirada, y ella me tomó la cara, me acarició el mentón con el pulgar. Y secó mis ojos con el otro.
— No entiendo...— murmuré sin comprender su pregunta.
— ¿Me crees que nunca te eh engañado? — explicó, sollozando ante los recuerdos que seguramente indagaban en su mente.
— Estaba cegado _______(tn). Me parece que si estoy aquí, es porque me di cuenta que fui un completo idiota en no confiar en tu palabra.
— ¿Entonces...?
— Por supuesto que confío en ti, mi reina. — juntamos narices, y en una silenciosa promesa susurró.
— Entonces hagamos el amor.

~~~~~
Narra Mario.
Se preguntarán que paso después ¿cierto? bueno pues como ya habíamos quedado ______(tn) y yo asistimos a terapia de pareja, creo que en estos meses hemos evolucionado mucho, somos más felices ahora, _____(tn) siempre está sonriendo, y eso me encanta, desde que la conocí su sonrisa me cautivo. En cuando a Richard ¡ja! no pudo continuar con sus estúpidos planes de volver a separarnos, sólo supe que mudo su empresa a otro lugar, la verdad no sé dónde y ni me interesa, a Cecilia obviamente la despedí y ahora les confieso algo que me puso muy feliz... Esta mañana ______(tn) se hizo una prueba de embarazo ¡y dio positivo! pueden creerlo ¡seré padre! aún no lo puedo creer, no puedo esperar a tener a ese pequeño o pequeña entre mis brazos. Al fin el sueño de _______(tn) se hizo realidad, y me alegra saber que formo parte de ello...
''Somos dueños de nuestro destino. Somos capitanes de nuestra alma.'' (Winston Churchill)
FIN.

________________________________________________________-

QUE HERMOSO....

MARIO LOGRO CAMIAR POR ELLA......

ESPERO QUE LES AYA GUSTADO Y GRACIAS POR LO 11.6K DE LECTORE LA VERDAD NO ME LO ESPERABA

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⏰ Last updated: Jan 21, 2016 ⏰

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Marido Golpeador [Mario Bautista]Where stories live. Discover now