Capítulo 6

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Resolvía por décima vez el mismo problema de Física, aunque poco sentido había en memorizarme el resultado y no saberlo contestar por mi cuenta en el examen

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Resolvía por décima vez el mismo problema de Física, aunque poco sentido había en memorizarme el resultado y no saberlo contestar por mi cuenta en el examen.

Mamá planchaba ropa en la sala de estar mientras mi padre leía el periódico. Había un silencio aséptico en nuestro hogar desde hacía semanas y nadie se dignaba a solucionarlo.

A veces me sentía culpable por haberlo provocado.

Si yo hubiese elegido estudiar de doctor o alguna variante, tal vez Eric me dirigiría la palabra más que para darme los buenos días. Quizás, él presumiría a sus amigos que su hijo sería un prodigioso médico, en lugar de negarse a asumir que tendría a un escritor fracasado.

Tomé una larga bocanada de aire.

No soportaba más la tensión que nos asfixiaba, por lo que busqué en cada recoveco de mi mente la combinación perfecta de palabras que nos haría conversar como si mi padre y yo no nos tuviésemos tirria.

—¿Sabían que Carla y Víctor ya se mudaron a su propio departamento? —Me avergoncé de mí mismo, cerré con fuerza el cuaderno y tamborileé en la mesa.

Papá bajó el periódico y Vanessa apagó la plancha.

—Al fin el vago ese se puso a trabajar —masculló el hombre—, ¿y dónde se mudaron?

—¡Eric! —expresó mamá, sacudió las manos en el mandil y se sentó junto a su esposo—. Dijimos que no nos meteríamos en su vida.

Quise azotar la cara contra la madera de la mesa. Si había un tópico que generaba incomodidad en casa, era el de Carla y Víctor; lo gracioso del asunto era que nuestra negativa opinión sobre el novio de la muchacha era lo único que mi progenitor y yo teníamos en común.

—Por Zaragoza —respondí con la voz hecha un hilo.

—Le va a quedar bastante lejos del trabajo —Mi padre colocó una mano bajo su barbilla—. ¿Por qué no eligieron algo más al sur?

La respuesta era simple: Carla quería mudarse a un lugar aledaño a Seis luceros y a la universidad, no obstante, el idiota de su novio insistió para que se trasladaran a un sitio cercano a su trabajo.

Nos queda su dulce locura | NUEVA VERSIÓN | ✅Where stories live. Discover now