Dɪᴠᴇʀɢᴇɴᴛ [Tobías Eaton]

→ ᴄʜᴀᴘᴛᴇʀ ᴛᴇɴ

ᴄʜᴀᴘᴛᴇʀ ᴛᴇɴ
╔══════════╗
Sʜᴏᴏᴛɪɴɢ ʙᴀsᴛᴀʀᴅs
╚══════════╝

“Eɴᴛᴏɴᴄᴇs ᴍᴇ ᴅᴏʏ ᴄᴜᴇɴᴛᴀ ᴅᴇ ʟᴏ ϙᴜᴇ ᴇs﹕ ᴇs ᴇ́ʟ”

   Me arrojo en el colchón y suspiro. La noche anterior he dormido muy poco, y hoy he vuelto a luchar. Como si fuera una broma, hoy me tocó contre Myra, que no puede dar un buen puñetazo ni con alguien moviéndole el brazo. La derribé antes del minuto y medio. Cayó y estaba muy mareada para volver a levantarse.
   En cuanto mi cabeza toca la almohada, la puerta del dormitorio se abre y un grupo de personas entra corriendo en la habitación con linternas. Me siento y fuerzo la vista a oscuras para enterarme de lo que sucede.

   —¡Todos arriba! —ruge alguien.

   Una linterna se enciende detrás de su cabeza y se refleja en los anillos de las orejas: Eric. A su alrededor hay otros osados, algunos los conozco del Pozo, otros no los había visto nunca. Cuatro está entre ellos.
   Me mira a los ojos y no los mueve de ahí. Le devuelvo la mirada y se me olvida que, a mi alrededor, el resto de traslado salen de la cama.

   —¿Te has quedado sorda, cordial? —pregunta Eric. Entrecierro los ojos y salto de la cama.

   Agradezco a la _____ del pasado haber tenido demasiada flojera y no ponerse el pijama.

   —Tenéis cinco minutos para vestiros y reuniros con nosotros junto a las vías —dice Eric—. Vamos a hacer otra excursión.

   Me meto en los zapatos y salgo corriendo, poniendo muecas, camino al tren. Una gota de sudor resbala por mi sien mientras subimos por los senderos que recorren las paredes del Pozo, apartando a los miembros a nuestro paso. Sus rostros siguen exactamente igual a pesar de vernos correr frenéticamente. ¿A cuántas personas a la semana verán del mismo modo?
   Llego a la vías justo detrás de los iniciados nacidos en Osadía, liderando el grupo de trasladados. Al lado de las vías hay una pila negra; distingo un grupo de cañones largos y seguros de arma. Al lado de la pila hay cajas de lo que parecen ser municiones. Entrecierro un poco los ojos para leer una; en la caja pone: "balas de pintura".
   Sinceramente, el nombre me suena, aunque se explique por si solo.