S a k u r a ⇥ Taehyung

⇥ Capítulo único.

Mi nombre es Kim Taehyung

Esta primavera empecé la secundaria.

Ser un estudiante de secundaria significa dos cambios para mí:

Primero, voy a pasar por Sakurazaka de camino a la escuela.

Y segundo..., en las mañanas me cruzo con una chica especial en la calle.

Camino a la escuela por Sakurasaka, Tae siempre veía a esa chica caminar hacia el lado contrario a él. Esa mañana él vio su rostro nuevamente.

—«Otro mal día, huh.» —pensé al mirar la expresión en su rostro.— «Ah. Hay una sakura en su cabello.»

—¡Emma! —gritó una chica a la distancia.

Emma voltea y saluda a la chica, al parecer eran cercanas.

—Hey. —dice Emma sin ánimos en forma de saludo.

—¡Pfff! ¿Como llegó esa flor a tu cabeza?

Si escuche bien, su nombre es Emma.

Ella usa un uniforme de una escuela secundaria cercana.

Siempre lleva el mismo peinado, una trenza.

Esas son las únicas cosas que sé sobre ella.

—«Ah. Hace tanto calor» —pensaba.

El verano este año es horrible.

—«Cuando hace calor es mejor atar tu cabello en un moño, si tan solo fuera una chica.»

Tae levanta la mirada logrando ver a la distancia nuevamente esa mañana a Emma.

—«Emma. ¿Oh? Su cabello está más corto.» —pensé.

Al pasar junto a ella, los dos cruzan las miradas y continúan caminando.

Nuestros ojos... se encontraron.

—«Bueno... Probablemente fue una coincidencia» —pensaba sonrojado.

Otro día más camino a la escuela por Sakurazaka, ya en otoño.

—«Esta mucho más fresco ahora. El viento se siente bien. Ah. Emma.»

Tae pasa junto a ella pero esta vez no cruzan miradas.

—«Tch. Ella no volvió a mirar hacia acá. ¡Ah! Tiene una hoja en su cabello.»

Tae empieza a hacer muecas pero finalmente se decide a acercarse.

—Disculpa. Tiene una hoja... en su cabello. —dice nervioso.

—¿Que? ¿Donde? —pregunta Emma.

—¡Ah! En el lado derecho. Aquí.

Tae se acerca lo suficiente para sacarla de su cabello. Saca la hoja y sonríe.

—Ahí. La tengo. —se la enseña.

—Gracias —responde sonrojada.

Ella se va, dejando a Tae allí sin palabras, sonrojado, mirándola como un tonto.

Ella estaba sonrojada.

Un par de días después vuelve a cruzarse con Emma, se arma de valor para saludarle.

—«¡Esta bien!» B- Buenos días.

—Buenos días. —corresponde.

Y continúan con su camino.

¿Qué es esta sensación?

Como las sakuras están a punto de florecer.

—«Solo decía. Las sakuras no están en temporada. Ya está nevando»

En todo caso, no la he visto... por tres días seguidos.

—«¿Que ocurrió contigo, Emma?» —pensaba agobiado.

Unos días después Tae nuevamente caminaba por allí bien abrigado.

—«No tengo ganas de practicar esta mañana. Tampoco tuve tiempo de peinarme» —bosteza.— «¿Eh? ¡Ah! Emm-»

—¡Emma! Buenos días. —exclamó un chico a la distancia.

El chico se acercó a Emma y tomó su mano.

En ese momento, lo supe... porque nuestros ojos se encontraban.

El chico lucía igual a Tae. Cuando ellos pasaban junto a él, ella lo saludo igualmente.

—Buenos días.

—Buenos días... —corresponde.

Después de eso, casi nunca volví a ver a Emma en esta calle.

Lo haré mejor la próxima vez... y apreciaré mis sentimientos florecientes.