Era sábado hoy era un gran día, iba a la audición de la SM, así es que tenia que viajar a Seúl ese mismo día. Estaba dormida y sonó el despertador, me levanté de un brinco, me quite las sabanas y cobijas de encima y me lave los dientes, me cepille el cabello, me puse unos pantalones rojos, una blusa y mis converse negros con brillos de color plateado, me pongo brillo en los labios y bajo a desayunar.
–¿Lista hija? –decía mi padre. –Más que lista. –Muy bien, ahora desayuna, porque el vuelo para Seúl sale a las 10:00 am y son las 8:30. –De acuerdo.
Termine de desayunar y ayude a mi padre a subir mis maletas y algunas cosas al auto.
–¡Hija, ya vámonos, son las 9:00! –grito mi madre. –¡Ya voy mamá!
Tome por ultimo mi celular y antes de salir de mi cuarto, dije "hoy cambiara mi destino" y salí lanzándole un beso a mi cuarto, cerré mi cuarto y salí corriendo al auto y mi papa arranco el auto, llegamos al aeropuerto y bajamos las maletas y todo y nos sentamos para esperar nuestro vuelo ya eran las 9:45, en eso suena nuestro vuelo. «Los pasajeros del vuelo 123 pasen por aquí, repito, los pasajeros del vuelo 123 por aquí.»
–Mamá, papá, ¡ya vamos! –Ya, tranquila, ya vamos.
Nos subimos al avión y nos sentamos, yo estaba emocionada, mi padre se recostó y se tapo los ojos, como siempre, dormía, mi mama solo veía a todos lados. ¡WOW! No lo puedo creer durante unas horas estaré en Seúl y adicionare en la SM estoy muy nerviosa! Aah! Debo de tranquilizarme! Esperamos varias horas y a cada rato pedía algo de comer, yo no podía dejar de comer. Y por fin paso, llegamos a Seúl! Mire por la ventana y era increíble.
–¡Mira mama! ¡Es hermoso! –Si, una vida nueva nos guarda.
El avión aterrizo y bajamos de él. Había un señor con con un traje y un papel que decía "familia Jepsen" cuando nos acercamos a él, note que tenia un gafet de "SM Entertaiment" habían varios con esos. El señor nos llevo primero a un hotel para dejar nuestras cosas, después de ahí nos llevo a SM, cuando entramos, estaba aun mas nerviosa, había una fila de unas 500 personas. Una señorita llego a darme unos gafetes.
–Buenas tardes, ¿nombre y edad? –Buenas tardes, me llamo __(tn) Jepsen y tengo 16 años. –Okey, espera a que te llamen, eres la numero 25. –Pero, hay mas gente adelante ¿porque soy la 25? –Lo escogemos al azar, solo pasan 100 personas hoy, por suerte tu pasas hoy. –Aaah, gracias.
Esperamos una media hora afuera esperando hasta que dicen mi nombre, me hicieron pasar a un camerino para que me arreglara. me puse rímel, me pinte los labios con un brillo, me cambie y me peine. Estaba lista.
–Lista. –Muy bien, ahora van a pasar 10 personas mas y pasas tu ¿okey? mientras siéntate aquí –me mostró un asiento. –Claro. –¿Lista hija? –decía mi padre. –Más que nunca. –Muy bien, ahora nosotros iremos a sentarnos por haya. Por cierto, vino tu abuela, ya ves que vive aquí Seúl. –¿Enserio? Increíble.
No lo podia creer, estaba a 1O personas de pasar y que mi vida cambie, yo prometí que si esta vez me rechazaban, acabaría todo, no volvería a buscar la música ¿porque? Porque ya me han rechazado en varios lugares, eso le molestaba a mi mama por eso nunca le gusto la música, pero se que nada acabara porque ya no me rechazaran aqui! Pero ahora... tengo muchísima sed. Voltee a mi derecha y vi un garrafón de agua y me dirigí hacia el garrafón. Me pare y tome un cono que estaba ahí, lo llene de agua y cuando voltee choqué con alguien y le tire toda el agua encima.
–Aaah! Esta fría! –Lo siento tanto, yo –empece a talla su playera con mi mano. –Déjalo así –rió. –Es que estoy muy distraída, perdóname –entonces levante mi cara y ahí estaba, él tan hermoso con esos ojos marrones, esa sonrisa encantadora, ese cabello castaño, con esa playera roja a cuadros que lo hacia verse tan guapo, todo el era como mágico– Hmm... lo siento... no me fije. –Si no te preocupes, todos aquí venimos nerviosos y distraídos, yo casi tropiezo cuando llegue –dijo y yo reí– Hmm... creo que ya puedes dejar de tallarme. –Oh, lo lamento. –Me llamo Lee Donghae –dijo extendiendo su mano. –Yo soy __(tn) Jepsen –al tomar su mano sentí un choque eléctrico increíble, sentí como paso por todo mi cuerpo. –Jajaja, bueno ¿que numero eres? –25 ¿y tu? –Genial, yo soy el 24 vas después de mi. –así, jaja, estoy nerviosa. –Si, yo también –sonrió.
Pasaron unos 2O minutos y Donghae y yo estuvimos hablando, su playera ya se había secado, era increíble estar con el, me reía tanto, aunque lo acababa de conocer hace 2O minutos.
Paso Donghae e hizo la audición, cantó hermoso y... pasó la audición, salió de ahí y se dirigió a su familia y los abrazo, luego se dirigió a mi y me abrazo, yo me quede quiera, apenas lo acabo de conocer y el ya me abraza.
–Felicidades, Donghae, cantas hermoso. –Gracias, __(tn), lo mismo diré cuando salgas de ahí. –NÚMERO 25 PASE NÚMERO 25! –Es hora.
Me presente y dije mi edad, dije que cantaria y era hora la música ya había empezado. Al finalizar de cantar los jueces empezaron con sus criticas. Para mi desgracia... no me aceptaron... en ese momento lo único que hice fue dar las gracias y salir de ahí, no quería estar ahí donde mis sueños ya se habían acabado, ya no quería buscar mas la música me sentía horrible; salí y Donghae me abrazo poco después empezaron a llegar las lagrimas y con ellas mi familia.
–No les hagas caso, __(tn), tu voz es increíble. –Vamos, Donghae, lo dices para que no llore. –Vez hija, por eso odio la música para ti, ven vamos a sentarnos –decía mi mamá llegando a mi. –¡NO! Quiero ir a casa. –¿Que? Pero acabamos de llegar. –No me importa! QUIERO IRME DE AQUÍ!
-NARRA DONGHAE-
En verdad lo decía en serio, su voz era perfecta, no se como los estúpidos jueces no la aceptaron, su voz era una que jamas podre olvidar...
-DOS AÑOS DESPUÉS-
Desperté como todos los días, me duche, y me vestí así Después baje las escaleras y vi a mi papá desayunando.
- Hola papá -la salude y me dio mi desayuno. - Hola bella durmiente -Dijo bromeando, los dos reímos y mi padre paró, me quería decir algo- hija te tengo que decir algo -ya sabía. - Claro, dime -se acerco a mi y me dijo-. - Hija me hablaron del trabajo... -Hizo una pausa- ... me cambiaron a Corea del Sur, a Seúl y tendremos que irnos a vivir ahí -Abrí mis ojos como platos-. - ¿¡¡QUEEEEEEE!!?¿COMO QUE TE CAMBIARON?¿CÓMO QUE NOS IREMOS A VIVIR A COREA DEL SUR? -Dije casi gritando, mi madre quedo paralizada, después me relaje y hablo-. - Si, hija nos tenemos que ir a vivir allá en una semana. –¿Qué? - Lo siento ___(TN) pero así son las cosas, hija no te pongas triste, son cosas del trabajo.
-UNA SEMANA DESPUÉS-
Ya estaba en el aeropuerto, de pronto se escucho una voz - PASAJEROS DEL VUELO A SEÚL, FAVOR DE ABORDAR HACIA LA SALIDA 2- subimos al avión, este despego...
Llegamos a Seúl, Corea, nadie habla español eso me irrita. Después había un señor con un cartel que decía "Jepsen" y nos guió hacia un taxi que nos dirigía a la casa, el señor nos dejo ahí y se fue, mi padre y yo nos pusimos a desempacar la ropa y todo eso... entonces me hablo.
- Hija te tendré que poner en una escuela, no la puedes dejar -dijo y yo rodé los ojos- Se qué será un gran cambio... Pero se puede solucionar ¿De acuerdo? -Dijo sonriendo-. - De acuerdo -Dije con una sonrisa fingida-. - Mañana entras a la escuela, esta a cinco cuadras, tu sabrás -dijo yéndose a su habitación-. - Mmm... Ok -Dije seca-.
...
Desperté como todos los días, solo que en otro país, me duche me cepille los dientes y me vestí así
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me dirigí hacia la cocina y había una nota que decía:"Hija tuve que salir al trabajo, tu ya sabes la dirección de la escuela, en la tarde te veo adiós-___(TP)" deje la nota y me dirigí hacia la escuela.
