Goodbye「BillDip」「Two-Shot」

{Goodbye}

El rubio suspiró con dolor y melancolía, con la mirada perdida en algun punto fijó de la habitación estaba muerto por dentro, tantos pensamientos lo perturbaban una y otra sín fin o descanso alguno, el silenció era tan deprimente. Solo volteo su mirada hacía aquella carta que escrita con un marcador estaba perfectamente entendible "Adiós" se estaba preparando mentalmente para lo que leería, era malo y eso era seguro, pero aun sín leerlo ya sabía lo que pasaría, jamás volvería a ver a su niño y eso le dolía como nada en el mundo. Tomó una gran bocana de aíre y tomó aquella carta entre sus manos, desdoblandola con una gran delicadeza.

>En mi mente siempre conservare aquellos recuerdos, momentos que pasé junto a ti que en mi poco tiempo han sido los mejores que he tenido, pero no puedo evitarlo, perdóname pero esto nos dañaba a ambos, tenía que dejarte ir, esto me dolía mucho, enamorarme de un demonio ¿Vaya locura no?

No pudo contener algunas lágrimas saladas que resbalaban de su rostro manteniendo esa sonrisa de lado.

-Vaya, sí que fué una locura...

Sigo lamentandome el día que salimos juntos por primera vez, recuerdo que se te había caído la sopa encima, también aquella vez que caí sobre tí y te golpeé bastante fuerte en la cabeza

Una melancólica sonrisa se asomo en sus labios, mientras observaba aquella pequeña y casi invisible quemadura de su brazo.

-Aun conservó la quemadura...

Lamentó mucho haberte ocultado de mis tíos, tal vez fue el miedo de lo que ellos dirían sobre tí lo que me impulso a ello, también recuerdo que por error te había lanzado una cubeta de agua, se disculpó, y luego al enterarse de que eras aquel demonio que de pequeños nos hizó la vida imposible volvió a lanzarte la cubeta, pero esta vez en la cabeza, perdona por reírme mucho, era tan inevitable. Pero te defendí y agradecía mucho que ellos lo habían aceptado, fue difícil pero lo superamos, juntos ¿No? Y cuando Mabel te conoció, aun siento vergüenza de cada cosa que te dijó Mabel sobre mi, sigo pensando del porque no me dejaste tu primero sí por mi culpa recibias infinidad de golpes y de amenazas, pero aún seguías conmigo a pesar de todo, no entiendo porque te enamoraste de mi, cada día pensaba el porque y se muy bien que leías mis pensamientos

El rubio sonrió un poco, recordaba cada pequeño pensamiento de su amado, Pino. Cada pensamiento lo sorprendía más y más.

-Oh, cada día tus pensamientos me sorprendía más.- Soltó una pequeña y casí inaudible risa.

Regresando a lo inicial, con todo mi corazón te pido que me perdones por mi gran cobardía, creeme lamentó dejarte, pero si te lo decía a la cara, simplemente, no podría marcharme, esperó que logres comprender que no estaba en mi, te lo entregué todo de mi, mi primer beso, mis caricias, mi cuerpo, mi corazón...

El rubio sentía cada vez mientras seguía su lectura, como su corazón se hacía añicos cada vez más y más.

-Pino..- Y cada simple segundo que pasaba su voz se tornaba quebrada.

Realmente no se si tengo fuerzas de seguir diciendo más, quiero despedirme de forma rápida aunque esta carta no sea corta en ningun sentido, no puedo evitar imaginar tu expresión en este momento, al momento en que sepas que me he ido que no regresaré jamás, ni aunque me lo supliques, se que no me encontraras y si lo haces, se muy bien que trataras de hacerme volver, decirme que hay otras maneras pero...

-Dirás que más esperanzas no hay, Pino. Lo sé, siempre se lo que piensas...

Tu conoces cada rincón de mi mente, la has indagado hasta tener el completo conocimiento de mi mente, has explorado cada rincón de mi cuerpo, ¿Sabes? No deseó alargarlo más, me duele mucho cada simple palabra que escribo aquí, no sé otra manera de despedirme de ti, ¿Sabes? Eres testarudo y bastante terco, pero, esa fue una de las tantas cosas que amo de tí

Una inconciente y melancolía sonrisa se asomo a su dolida expresión.

-Y ahí tantas cosas que yo amo de tí, Pino.

Y la verdad, es que lo último que deseo decirte es, que te amo. Tu conoces cada mal momento de mi vida, también conoces los mejores, ¿Recuerdas aquel día en la colina?

El rubio cerró unos momentos sus ojos recordando.

-Recuerdo, que casí te caes de no ser por mi.- Suspiró al recordar aquello.

Aquel día fue el mejor de mi vida, ambos nos habíamos sentado en algunas hojas secas del otoño, compartíamos una gran bufanda que Mabel nos había tejido, para luego enterarme que ella nos siguió y nos tomó una foto, la seguí hasta la cabaña mientras tu te reías de nosotros, logré encontrarla y pedirle que me diera aquella foto pero como es Mabel me pidió algo a cambió, nunca va a cambiar. Esa foto nunca te la enseñé porque sabía que me la quitarías, ¿Pero ahora? Creó que tu la deberías conservar, esta en una caja bajo mi cama, solía tener muchas fotos de Wendy en ella pero no puedo creer que me allá enamorado de ella, no es mala es mi mejor amiga pero era imposible, bueno, lo nuestro también lo era. Es decír, tu tenías millones de años de antigüedad ¿Y yo? Un promedió de vida de tal vez de medio siglo ¿Pero que importa? Lo imposible, siempre fue anhelado por todo ser humano, y tu siempre fuiste mi adoración y mi mejor sueño, temo dejarte pues se que no podrás soportarlo, pero el cancer me quita cada día más de vida, el saber que a medida que pasa el tiempo tengo menos días para verte sonreír, para estar juntos, tal vez en otra vida tenga una oportunidad de vivír y se que me enamorare de ti como la primera vez. La muerte es inevitable, pero son pocos los que se animan a asumirlo. No creo poder seguir aguantando,es muy difícil, no creo poder seguir viviendo de esta manera. Gracias por todo lo que has hecho por mi, tantas noches juntos, malos ratos y buenos momentos los tendré por siempre en mi corazón. Te amo,nunca lo dudes. Me hiciste el chico más felíz, y es por ello que agradezco mucho el haberte conocido. Quiero dejar este mundo de la manera más alegre posible almenos para dejarte una sincera sonrisa. Porfavor, no llores por mi. Estoy tan agradecido que tu seas quien se robó mi corazón quien fué mi razón de ser y por quien dí todo por luchar contra esto.

Te amo, Bill Cipher y cada momento que me extrañes lee esta carta, recuerda cada momento que vivimos juntos, como yo antes de morir...
Por siempre tuyo: Dipper Pines<