*Punto de vista de Dakko*
Mi cabeza daba vueltas. La luz me cegó. Otra vez en esa sala. Las paredes blancas y los instrumentos seguían como la primera vez que me desperté aquí. Pero esta vez el Alto Científico Klok estaba a mi lado, pensativo, leyendo un libro. Y tenía cara de pocos amigos.
- Los asesinatos a sangre fría me encantan pequeño. Pero no si son de hombres de la Inquisición. ¿Tienes algo que decir en tu defensa? - cerró el libro con un golpe seco.
- No lo sé... me cegó la ira y la duda. Mi sangre me controló... - apenas podía recordar nada de lo que pasó - Pero recuerdo que estaba Shina... ¿Y Bronn? ¿Dónde están?
- Cada cosa a su tiempo... ¿Que sentiste cuando entraste en ira?
- Dolor, señor... sentía como si mi sangre entrara en cólera, y me dijese que tenía que eliminarlos a todos...sin remordimientos...
- ¿Cuando aprendiste a manejar el Sanguinem para crear cosas a tu antojo?
- Entreno por las noches. Mi sangre me mantiene despierto, y aún me cuesta dormir a veces, así que entreno para controlarla. ¿Por?
- Hemos cogido muestras de tu sangre. Para analizarla. Pero tu actitud no ha gustado mucho a los altos mandos - ¿A quienes? ¿A esos gordos con dinero? - Así que tendrás que dar explicaciones ante el Emperador.
- ¿Qué? ¿Ante el Emperador? - dije incrédulo
- Si, ha pedido que tengas una audiencia con el. Y por ello iras en las mejores condiciones. - se levantó y caminó hacia la puerta.
- Pero...
- En las mejores condiciones - hizo una pausa - el Emperador no da una segunda oportunidad a cualquiera - y cerró la puerta tras de sí.
--------------------------------------------
Gracias a todos porque ya hemos llegado al 1k de vistas.
Ya se que no estoy actualizando todos los días, pero voy escribiendo conforme me va viendo la inspiración, y así hacer mejores capítulos.
Lo dicho, gracias a todos por apoyarme y comentar en los capítulos.
Seguiré escribiendo, la historia no ha hecho nada mas que comenzar. ^^
YOU ARE READING
¿Por quién lucho?: Sangre Negra
Short Story- ¡No! ¡Usadme a mi! - dije, entre lágrimas, sin preocuparme por mi seguridad. El alto científico dejó a Bronn en el suelo, sus asistentes les quitaron las agujas que ya le habían puesto. Se dirigió hacia mí, con una sonrisa pérfida y asquerosa. ...
